El juego de la muerte

Capitulo 28

25 de septiembre 2022
Hora: 09:34 pm

Keran:

— Oh sí, rico, dame más fuerte —  sinceramente estaba intentando concentrarme en follarme a esta tía, pero con la exageracion de sus gemidos solo me provocaban sacar mi arma y meterle un tiro, así que me quitó, salgo de su interior, retiro el condón, lo tiró en la papelera que está a lado de la cama, me subo el pantalón, saco un cigarro para ir a fumarmelo.

— Levanté y largao— le digo tirándole un buen dinero.

— Eso es todo, me vas a dejar así, y me das dinero como una cualquiera,  ¿es serio Keran?— está más que cabreada, se levanta de la cama y se sube el vestido, Hilari es un chica hermosa, la conocí hace más de un año en una discoteca y desde entonces no hemos en rollado un par de veces, recuerdo que la conocí gracias a Dylan que se habia quedado sin dinero y no tenía como regresar a casa esa noche, pero ella solo es una chica de un revolcón, ninguno de los dos quiere nada sentimental, fue un mutuo acuerdo al parecer ella tiene un idiota por novio y bueno yo soy un desastre.

—Hilari no hagas tus dramas, vete a casa llama un taxi,  yo que se, solo vete no estoy con ánimos de nada— le digo mientras me fumo un cigarro.

— Apenas tengo una semana de haber llegado de Canadá después de 5 meses sin vernos y me sales con estás mierda— la veo ponerse sus tacones— en serio nunca voy a entenderte, ten — dice poniendo el dinero que le di en mi pecho — no necesito de tus migajas, muy bien sabe que mi familia tiene mucho dinero.

— No son migajas solo aceptalo como un regalo de bienvenida, no necesito que me entiendas, solo no tengo ganas y debo ir al casino— digo tirando la colilla de cigarro por la ventana del la habitación— Nos vemos luego, yo te llamo.

— A veces siento que me tratas como una zorra— no puedo evitar sonreír con lo que había dicho, porque la verdad si la veo como un zorra que es fácil de abrirme  las piernas.

— Solo cuídate— me despido y salgo de la habitación pero antes de cerrar la puerta la escucho y me grita.

— PUDRETE EN EL INFIERNO— ya estoy en el,  pienso mientras camino hasta mi auto, subo y pongo algo de música.

Estos días han sido una completa mierda, después de la muerte de Isaac, he tenido que resolver muchos problemas y contratar más gente para el casino  ya que nos estamos quedado solos, eso me hace recordar una frase que me dijo Dylan el día que Emily murió:

Estamos en un una ruleta donde vamos girando hasta que cada uno de nosotros valla muriendo, solo somos un juego de entretenimiento para el diablo, el juego con nuestras mente y nos manipula a su antojo.

Creo que Dylan tenía mucha razón con aquellas palabras, sin darme cuenta ya había llegado, decido pagar el motor del auto para bajarme, pero veo que un auto se detiene enfrente de mi, dicho auto ya lo había visto antes, así que mientras veo quien baja del dichoso auto decido hacer una llamada.

Paco necesito que me sigas un auto, ya te paso el número de placa, no solo lo vas a seguir, también vas averiguar de quién es el auto, dónde vive con quien vive — hago una pausa viendo como la fiera baja del auto con el imbécil de Alex— necesito saber todo, si tiene perro o gato todo me entendiste o necesitas que te lo explique con dibujos—  sin esperar su respuesta le cortó la llamada y le envío el número de placas.

Veo como Mely y Alex hacen el intento de pasar por los de seguridad, sinceramente no sé que siento por la fiera tal vez este obsesionado como una vez me dijo Isaac, pero solo se, que cuando ella está cerca de mi solo quiero tenerla a salvó y conmigo, ella es como una maldita adición que aunque sabes que eso te hace daño sigues hay, porque que te gusta, la veo muy molesta y decido ir hasta haya y aprovechar el momento, y cuando estoy cerca la escucho decir: