TWO

8.7K 1.2K 361
                                    

Caminaba de un lugar a otro con desesperación, esperando con ansias la llamada de su gemelo.

Se supone que ya debería de estar llegando, por lo tanto no tardaría en llamarlo.

Jungkook se consideraba una persona con poca paciencia, odiaba perder su tiempo en personas que no suman en su vida, pero esta vez estaba haciendo una excepción con su hermano. Necesitaba el dinero, por lo tanto se mantenía por estar a corde.

Al tener poco control, se dispuso a servirse una copa de licor para mantener la calma.

Siguió esperando por varios minutos más, hasta que sonó el bendito celular. El azabache no tardó en contestar.

— ¿Ya llegaste? —preguntó ni bien contestó la llamada.

— Estoy en el aeropuerto, envíame la ubicación.

Jungkook no pudo evitar sonreír al escuchar eso, por fin sus problemas se solucionarían.

— Claro, ahora te lo envío. —se alejó del teléfono para luego compartir la ubicación con su hermano— ¿Te llegó?

El rubio revisó la pantalla de su celular y vió que efectivamente había llegado la ubicación real.

— Lo tengo, llego de media hora. —informó para luego cortar la llamada.

Jongguk no perdió el tiempo y se dirigió a la salida del aeropuerto para luego tomar un taxi perteneciente del mismo lugar.

— Ha este lugar porfavor. —pidió el pelirubio, mostrando la ubicación. Él no sabía donde quedaba aquel lugar desconocido.

— El lugar se encuentra a afueras de la ciudad, señor. La tarifa le saldrá muy alta—informó el chofer.

El rubio se preocupó pero decidió ir de todos modos.

— No importa, yo pagaré el costo que sea necesario. —respondió.

El chófer lo miró por el espejo y no tardó en asentir para luego empezar a manejar.

Una vez acomodado, el rubio sacó nuevamente su teléfono para esta vez hacer una vídeollamada con su familia. No quería que se preocuparan.

— ¡Papito! —se oyó las voces de los niños, quienes se encontraban sentados en el comedor.

— Hola mis niños ¿Cómo están? —les brindó una sonrisa cálida.

— Bien papito ¿Llegaste a Dagu? —uno de los gemelos pronunció con dificultad la palabra "Daegu".

— Claro que sí, acabo de llegar ¿Y su papi?

— Está en la cocina pero ahora viene. —respondió.

— ¡Hola Cariño! ¿Ya llegaste? —se apareció por la pantalla el pelinegro, quien se encontraba limpiando sus manos con una franela. Parecía que recién acababa de cocinar.

— Claro que sí amor, ahora mismo me voy dirigiendo a un hotel para poder instalarme. —mintió, si tan solo supieran que tiene un hermano gemelo que se encontraba en problemas.

— Que bueno. —respondió el doncel con una sonrisa encantadora para los ojos de Jongguk.

Los cuatro siguieron hablando por varios minutos más, hasta que el rubio decidió cortar la videollamada ya que estaba cerca de llegar al lugar indicado.

Jongguk prometió llamarlos una vez instalado en el hotel, su familia no tuvo problema por ello.

— Aquí tiene —le brindó el dinero al hombre.

— Servido —una vez que haya verificado la cantidad. Por otro lado el pelirubio tuvo intenciones de salir pero la voz del chófer lo detuvo— Señor.

IT'S NOT YOU || KOOKVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora