IT'S NOT YOU || KOOKV

TWENTY-NINE

Moviendo, y removiendo sus manos encima de las sábanas, Jungkook fue despertando lentamente , para luego toparse con una figura bastante conocida ante sus ojos.

Y estaría muy loco para no darse cuenta que se trataba del mismísimo Taehyung, quien se hallaba sentado en uno de los sillones, cerca de la cama donde él se encontraba.

El menor al ver la reciente reacción de Jeon, no tardó en levantarse y dirigirse hacia su adverso.

— ¿Como estás? ¿Ya te sientes mejor?

— ¿Donde estamos? —fue lo primero que dijo, mientras fruncía el ceño ante el leve dolor en su brazo.

— Yoongi... Él nos tiene bajo su poder. —respondió Kim, bajando la mirada, ante una posible furia por parte del contrario.

Sin embargo, lo que dijo Jungkook, lo dejó ciertamente confundido.

— Era de suponerse —suspirando, y sentándose debidamente en la cama, continuó hablando— ¿Te has preguntado si los niños hubieran estado en ese momento?

Riendo levemente ante su propio comentario, Jungkook dirigió su mirada hacia el menor.

— Hubiera sido una completa tortura, si es lo que te preguntas.

— No digas eso ni de broma. —contestó rápidamente— Ahora lo más importante es salir de este lugar.

— ¿Y como piensas hacerlo?

— Aún no tengo una idea clara, pero lo que si sé, es que Yoongi me propuso algo que en definitiva hace que tenga miedo de todo.

Frunciendo sus labios, Jungkook puso más atención de lo normal.

— ¿Te hizo algo? ¿Te tocó? ¡Dime!

— No pero...

— ¡Entonces que fue lo que te hizo!

— Cálmate quieres, así no llegaremos a ninguna parte —sujetándolo de la mano, Taehyung lo miró con desconsuelo. Algo que hizo un mínimo efecto en el mayor.

—Qué fue lo que te dijo, y no estoy para tenerle paciencia a alguien, Tae. Así que habla de una vez. —su voz salió en un intento de tranquilidad.

Respirando y botando ese mismo aire, el menor lamió levemente su labio, antes de hablar.

— Él quiere que trabajemos en su club —comenzó diciendo, bajo la atenta mirada de Jeon— Yo... Al principio pensé que sería algo turbio o incluso una tortura por lo que iba a pedir, pero eso no fue así, ya que me dijo que sería un trabajo en relación a las apuestas que tiene en este lugar.

— ¿Todavía estamos en Seúl? —cuestionó, por respuesta recibió un asentimiento— Ya sé a lo que se refiere, además no es la primera vez que estoy en esa área del club.

— ¿Es algo malo? —después de todo no confiaba en Yoongi.

— No, todo lo contrario. —viéndose ciertamente tranquilo y a la vez preocupado, siguió hablando— Las apuestas en si, es un área donde los hombres de Min trabajan en el casino para jugar con señores de alto poder económico.

— ¿Con que intención hacen eso?

— Fácil, sacarles dinero y todo lo que tengan de valor, ya sea sus propiedades o empresas.

— Entonces tú...

— Yo también jugué y saqué dinero de esos tipos, con la diferencia de que yo robaba para mi propio beneficio, y no para la mafia de Min.

— ¿Que quieres decir con eso?

— Les robé todo, absolutamente todo, mi amor. Pero para mí mala suerte, el estúpido de Min me descubrió y me mandó a pagar todo el dinero que había ganado en el casino, pero para ese entonces yo ya lo había gastado en ciertas cosas. Y eso no es todo, sino también, el muy hijo de puta me pidió que le diera con interés todo lo que había adquirido a mí favor.