SIX

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El rubio tomó el pomo de la puerta, seguido de ello ingresó a la habitación. Encontrándose así con el pelinegro, que por cierto ya estaba en pijama, listo para dormir.

— ¿Se durmieron los niños? —preguntó Taehyung mientras se aplicaba una loción en su rostro. El menor era muy delicado y cuidadoso en cuando a su piel se trataba. 

— Así es —Jungkook apartó sus ojos del doncel, para dirigirse al clóset.

Cuando abrió se topó con varias pijamas en colores claros, tonos que no le agradaba en absoluto al mayor. Pero aún así rebuscó alguna de color oscuro, y tuvo suerte al hacerlo ya que se encontró con un conjunto color negro. Perfecto para él.

Tomó la prenda y lo puso encima de algún sillón, luego procedió a desprender cada botón de su camisa, con la intención de quitársela. En ese momento, olvidó por completo la presencia de Taehyung.

Luego de deshacerse de la camisa, siguió con su tarea de desabrochar su pantalón. Pero se detuvo a sí mismo al oír la voz del pelinegro.

— ¿Por qué no me dijiste que te hiciste tatuajes en el brazo? —preguntó Taehyung bastante sorprendido, mirando con novedad aquellos dibujos impregnados en la piel ajena. Nunca antes lo había visto así, mucho menos llegó a imaginarlo con esa tinta en alguna parte de su cuerpo. 

En mas de una ocasión, Jongguk siempre le comentó que no le llamaba mucho la atención los dichosos tatuajes y que no era de su gran deseo hacerse uno. Y mas allá de recordar todos esos comentarios, la sorpresa y la atención inundaban mucho en él, tanto que no le daba tiempo para poder cuestionar.

Ante la mirada fija del doncel en él, Jungkook no pudo evitar soltar un suspiro de cierta preocupación. Habia sido un descuidado al no cubrir sus tatuajes como se debía.

Era de suponerse que el tonto de su hermano nunca llegó a tatuarse, como él lo hacía.

Al querer meterse en sus profundos de sus pensamientos, el rubio lo impidió para no salirse de la realidad.

— ¿Qué? ¿Acaso no te gustan? —fue lo primero que respondió a medida que se daba la vuelta para mirarlo, dejando de lado su preocupación. Podía asegurar que su cuñado no era tan inteligente y curioso como el pensaba. de eso podía estar mas que seguro.

— N-no... ¡Digo si! —ni Taehyung sabía lo que estaba respondiendo. Debía de suponer que era por los dibujos extraños que lo tenia impresionado.

 Jongguk con tatuajes, quien lo diría.

El rubio soltó una risa nasal al verse convencido por su respuesta, pero no era la primera vez que le pasaba este tipo de cosas, ya que anteriormente también fue halagado por otras personas, en mayoría con quienes llegó a follar.

— Pues gracias por decírmelo. —se desabrochó la correa, seguido de ello continuó con bajarse el cierre del pantalón para después quitárselo.

Ya muchas personas lo habían visto desnudo, y que Taehyung lo observara no era novedad para él.

Por otra parte estaba el pelinegro observándolo detenidamente y con mucha atención a su pareja. Antes de que su amado viajara a Daegu, pudo asegurar que su cuerpo no estaba tan tonificado y bronceado como lo estaba viendo ahora. Y no es que no le gustara, a lo contrario le encantaba y mucho. 

Jungkook quien ya estaba cambiado, procedió a poner su traje en el cesto donde se ponía la ropa sucia. Ya lo había visto anteriormente al pasearse por toda la casa con cierto disimulo.

Una vez listo procedió a dirigirse a la cama, donde estaba Taehyung esperándolo con ansias.

— Buenas noches. —dijo el rubio tapándose con las sábanas, seguido de ello darle la espalda al doncel.

IT'S NOT YOU || KOOKVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora