Habitaciones Cuadradas (Saibuki)

Capítulo 27

Habían pasado alrededor de veinte minutos desde que Fubuki había despertado y treinta segundos desde que se atrevió a salir del baño.

Ella caminaba con lentitud mirando fijamente, aún con una ligera confusión, el cuerpo dormido sobre el futón.

Tatsumaki iba cerca tras ella.

Cuando llegó a Saitama, Fubuki se arrodilló junto a él, sus rodillas y manos recargadas sobre el futón.

Genos se acercó a ella con una mirada seria, ignorando por completo el rostro amenazante con la que Tatsumaki lo miraba. —Ventisca, necesitamos saber qué fue lo que viste ahí en la mente de mi maestro. ¿Él está bien? ¿Averiguaste por qué no puede despertar?

Fubuki volteó a verlo con su rostro inexpresivo.

La cara de Genos estaba más fracturado de lo que estaba antes cuando despertó. Uno de sus brazos había sido arrancado y tenía muchos más cables colgando en uno de sus costados. Seguramente Tatsumaki se había desquitado con él mientras estuvo encerrada en el baño.

De alguna forma, sus ojos mostraban un atisbo de amabilidad y una muy ligera preocupación.

Fubuki le había prometido que su plan no duraría más de unos cuantos minutos, pero había pasado casi un día entero y ni siquiera había podido despertar a Saitama. Ella esperaría verlo furioso.

Quizás lo estaba pero no lo demostraba debido a la presencia de Tatsumaki.

De todas formas, Genos había prometido tomar represalias en caso de fallar y ella había fallado.

No, el plan aún no ha fallado por completo.

—Saitama está bien. —Fubuki meditó un poco su respuesta. Todos los ojos estaban puestos en ella. —...Necesito volver ahí. —Dijo de pronto.

—¡¿AH?! ¡¿Eres idiota?! —Tatsumaki la tomó del brazo.

Fubuki se zafó. —Tengo un plan.

—Pero tú ya tenías un plan y no funcionó. —Dijo Genos de pronto cortante y exponiendo por fin su molestia. —¿Qué es lo que está reteniendo a mi maestro? ¡Responde!

—Saitama está soñando, él sólo necesita despertar. —Fubuki no quería dar más detalles, su mente aún estaba llena de recuerdos borrosos y confusos.

—¡No vas a volver ahí! —Tatsumaki gritó.

—¡Saitama necesita mi ayuda y ahora sé perfectamente lo que debo de hacer, prometo que no tardaré, en verdad necesito entrar de nuevo ahí!

Fubuki intentó acercarse a Saitama pero el brazo de Genos se interpuso en medio.

—No vas a volver ahí. —Dijo él con frialdad.

Fubuki lo miró, ella no estaba sorprendida en lo absoluto. Genos estaba herido, molesto y preocupado, pero más herido que nada; él había confiado en ella y había sido decepcionado.

Fubuki se sintió culpable pero en verdad necesitaba el apoyo de alguien.

—¿Cuál es tu nuevo plan?... Si no es mucha molestia preguntar. —Habló King.

Tatsumaki y Genos lo voltearon a ver, luego miraron hacia Fubuki.

—Saitama... — Ella aclaró su garganta. —Saitama necesita despertar pero para eso necesito entrar de nuevo en su mente. Así que, a grandes rasgos, mi plan no ha cambiado en lo absoluto. Mi error fue no haber considerado lo difícil que sería penetrar su mente y eso fue un precio que pagué caro, mi mente fue consumida sin saberlo y de pronto olvidé qué es lo que hacía ahí. Es por eso que...