𝗙𝗶𝗻𝗮𝗹

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Todos los personajes de Merlina no son de mi propiedad.
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No lo necesitaba ni tampoco quería hacerlo, pero su corazón al igual qué su mente lo estában haciendo sufrir demasiado por el arrepentimiento y la culpa, todas las noches eran iguales.

Lentamente sin prisa bajo una suave lluvia ingresó al cementerio y durante un rato sólo con la miraba buscó una tumba en específico, al leer el nombre en la piedra había llegado a su destino.

𝘔𝘪𝘤𝘩𝘢𝘦𝘭 𝘛𝘢𝘯𝘢𝘬𝘢 (2007 - 2023)

Sintió una opresión al ver su tumba así qué dejó un ramo con flores y se dedicó sólo a observar. Las palabras no podían salir de su boca, se mordió los labios haciéndolo sangrar con la ayuda de qué pueda hablar.

Ran: Sinceramente nose qué decirte, Michael... Estoy muy confuso con todo estó. Algo qué jamás podré saber es ¿Porqué lo hiciste? Porqué diste tu vida por mí luego de todo lo qué te dije, te traté cómo una mierda por habernos mentido. Pero... No puedo dejar de amarte...

...Estoy perdido en la oscuridad.

No lograba calmar ésa tan maldita sensación de opresión en su pecho y por completó se negaba a llorar, no merecía hacerlo.

Sin importarle la lluvia se arrodilló frente a la tumba y puso su mano sobre la lápida. Necesitaba despedirse, aunque se negaba a aceptarlo... Tenía qué hacerlo.

Era momento de dejarlo ir.

De pronto abrió sus ojos observando qué el cementerio dónde estába ya no existía, en realidad no había nada... Estába en algún lugar similar al dónde fue a buscarla a su madre, con la gran diferencia qué en lugar de ese sitió tan deprimente, esté era blanco con toques de luces brillantes.

Era muy extraño... No entendía nada.

— Veo qué al fin decidiste venir a verme Ran.

Al antes mencionado se volteó ya qué esa voz la reconoció al instante, frente suyo se encontraba Michael observándolo con una pequeña sonrisa.

— ¿Michael eres tu de verdad? Cómo...

— Lo qué estás viendo es un mí alma y esté sitió es el limbo... Me alegro de ver qué estás bien. Al parecer al fin sí puede hacer algo bien en vida.

— No estoy nada bien y por ello vine, ya no puedo descansar o estar en paz, todas estás semanas no puedo dejar de sufrir, quiero descansar. Necesitó una respuesta de ti y no perderé la oportunidad ¿Porqué te sacrificaste por mí? Luego de todo lo qué te dije esa noche.

— Porqué te amó - Fue la sutil respuesta qué lo dejó desencajado por completó.

— No entiendo nada de estó... Porqué - Cayó de rodillas al estar tan perdido, Michael se acercó quedando a unos centímetros.

— Es cierto qué tomé muchas malas decisiones en toda mí vida y siempre me lamentare por ello. Pero de la única cosa qué jamás voy a arrepentirme es haberte amado Ran, yo decidí entregar mí vida para salvar a quién fue mí única alegría y sustentó y volvería a hacerlo las veces qué sea necesario - Terminó por acortar sus distancias con un abrazó.

Luego de escuchar sus palabras y al estar tan seguro en sus brazos no pudo soportar más sus lágrimas qué durante mucho tiempo necesitaba liberar y se aferró a su cuerpo.

El sentir las caricias de Michael junto a sus palabras tan reconfortantes solamente hacia qué su dolor sea más grande.

— ¡Lamento tanto todo lo qué te dije! No fue nunca mí intención el culparte de todo, mí enojó me superó y el saber qué nuestra última conversación fue ésa... No me lo perdonaré nunca... No puedo.

𝕃𝕒 𝕆𝕡𝕠𝕣𝕥𝕦𝕟𝕚𝕕𝕒𝕕 𝕡𝕒𝕣𝕒 𝔸𝕞𝕒𝕣| 𝕎𝕖𝕟𝕔𝕝𝕒𝕚𝕣 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora