CAPITULO 59

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CAPITULO 59

NICK

Hace pocos dias, exactamente tres, mi bonita habia entrado a los 8 meses de embarazo. Ahora entendia cuando decian que cuando vives esta etapa los meses se pasan volando, no se cuando pasó el tiempo, Amor tenia un vientra grande, no era en extremo pero para su estatura lo era. Estaba muy irritante y mas suseptible que nunca, cuando hablabamos de cualquier tema tenia que irme con cuidado, porque una palabra mal interpretada se jodia todo.

Como lo que pasó hace dos semanas, estabamos hablando del parto y las cosas que teniamos que tener listas, recuerdo que lansé un comentario de que hay madres que son descuidadas y es al ultimo momento cuando hacian la maleta para el hospital. Ella pensó que se lo dije a ella, claramente no fué así y lo peor que pude hacer fue reirme y no esperé la cachetada que me llevé, porque en palabras de ella me estaba "burlando". Me sorprendió mucho el golpe que me quedé en shock por unos minutos, no dije nada para no empezar una discución innecesaria. Se que está muy nerviosa por lo que se viene y yo tambien, pero no por eso ando gritandole a todo el mundo. Ese dia me mandó a dormir a otra habitación, no podia dormir, ya estoy acostumbrado a abrazarla todas las noches, pasaron unos largo minutos, que para mi fueron horas, para que se diera cuenta lo que habia hecho, entró y me miró arrepentida, cuando vi que su labio inferior empezó a temblar y sus ojos a humedecerce supe que llegaba la otra fase: el llanto. Y no me defraudó, comenzó a llorar y pedirme perdon, lo unico que hice fue levantarme, tomarla en brazos, llevarla a la cama, abrazarla y calmarla diciendole que no pasaba nada, mientras le acariciaba el cabello. Repito, la discución fue innecesaria porque horas antes en la mañana habiamos arreglado los bolsos, el suyo y el de la bebé.

Suelto un suspiro cuando el ascensor abre las puertas, sacandome de mis pensamientos y entrar al apartamento. Son las cinco de la tarde, habia estado en una reunion con Nadia en el terreno donde ya habian empezado la construcción de nuestra casa, mansión como la llamó mi bonita sin saber nada.

Me retracé al llegar porque me llamó por telefono para pedirme que le trajera comida china. Ando hacia la cocina, dejo las bolsas con la comida en la encimera, mientras me quito la chaqueta y la cuelgo el espaldar de un taburete. Busco dos platos, cubiertos y vasos. Vierto los fideos coon polllo agridulce en los platos como tambien las bebidas, coloco todo en una mesita de madera y boto los contenedores a la basura.

Justo antes de agarrar la mesita escuché en la parte de arriba, en la habitación como algo se rompia y un grito de parte de mi bonita. Dejé todo en la isla y salí corriendo de allí, no se como subí las escaleras sin caerme, mi pecho dolía por los acelerados latidos de mi corazón, rezaba en mi mente porque no le haya pasado nada, a ninguna de las dos.

Abro la puerta de manera abrupta, me adentro y veo lo que sucede, mi bonita está inclinada hacia abajo, una mano apretando la silla del tocador y la otra bajo su vientre, su respiración es acelerada, bajo sus pies se encuentran pedazos de vidrio, no le doy importancia a eso. Me apresuro a ir a su lado, para no alterarla mas llevo mis manos a sus hombros con delicadeza, ella deja caer su cabeza en mi pecho.

- Mi amor ¿que pasa? ¿te duele? - le hablo en voz baja.

- Cuando escuché que llegaste...me levanté al pasar por el tocador iba a acomodar mi perfume, que no estaba en su lugar pero sentí - se ahoga con su saliva - un dolor en el vientre y lo dejé caer - solloza por lo bajo.

Le beso la cabeza, deslizo mis manos por su espalda para tranquilizarla.

- Tranquila, respira como nos enseñaron en las clases - lo hago con ella - ¿Son como los anteriores? - pregunto.

A pocas semanas de terminar los 8 meses ella ya presentaba las famosas contracciones de braxton hicks, eran leves, no eran muy seguidas, tenian un tiempo de horas.

SECRET LOVE IN NEW YORKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora