CAPITULO 23

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MARATON 3/3

                       CAPITULO 23

AMOR

Y aquí vamos de nuevo, una nueva semana que pronto terminará, donde he repetido la misma rutina de la pasada, me levanto, desyuno, voy a la universidad, como algo por ahí, voy al hospital, le cuento mi dia, le leo, escuchamos musica y a la casa, por que sí, ahora no me dejan quedarme con él.

Ya creo que Danna y Veronica que acostumbraron a mi presencia por que aunque se molesten no dicen nada. Max es un caso aparte, el siempre me espera en la puerta de la habitación, conversamos un rato y luego me deja pasar.

Estamos jueves, no tengo muchos animos la verdad, amanecí con vomitos y fiebre, pero igual tengo que hacer el esfuerzo de levantarme para ir a clases.
Salgo de la cama y al pasar por en frente del espejo de cuerpo completo desvio la mirada y entro rapido al baño, estos ultimos dias me he dado cuenta de que estoy perdiendo bastante peso, no me gusta ver mi reflejo, no hay nada de la Amor con sus buenas piernas, curbas, pechos, etc, no, solo hay un cuerpo que se notan los huesos facilmente y pálido.

He estado yendo a terapia con mi psicologo, me dijo que empezara a hacer ejercicios por la mañana para disminuir la ansiedad y el estres, tambien me mando pastillas para dormir ya que no lo estaba logrando por mi cuenta, habia estado teniendo pesadillas en donde Nicholas no despierta.

- Cariño, Liam está aquí - la voz de mamá me saca de mis pensamientos.

- Dile que ya bajo - alzo la voz para que me escuche, por que estoy dentro del closet terminando de vestirme.

- Bueno, te esperamos para desayunar - dice y sale de la habitación.

Termino de colocarme los mom jeans, agarro un hoddie que me llega por sobre los gluteos color morado y me calzo unas deportivas negras. Ya vestida salgo y me siento en mi tocador, hago mi rutina de skincare, me maquillo natural y el cabello me hago una trenza.

Bajo las escaleras con lentitud y desgano, bostezo al llegar al ultimo escalon, le hago cariñitos detras de las orejas a Sky y camino con ella siguiendome al comedor, allí se encuentran todos incluido Liam.

- Hola a todos - saludo y tomo asiento al lado de mamá - ¿qué? - inquiero al ver que todos me miran raros.

- Nuestros besos de buenos dias - dice con los ojos entrecerrados papá.

- Se me paso - le resto importancia encogiendome de hombros, me estiro sobre la mesa y agarro un plato con frutas y yogurt, no tengo mucho apetito y tampoco quiero sobrecargar mi estomago por lo de la mañana.

- ¿No comeras más? - alzo la mirada para ver a mi amigo que mira mi desayuno con el ceño fruncido.

- No, no tengo mucho apetito - talvez soné muy seria pero no me retractaré.

Me molesta que esten pendiente de lo que como, si lo hago o no. Sí, estoy enferma por no comer bien pero no puedo hacer más, si mi cuerpo me dice que no, no puedo exigirle.

- ¿Estas bien? - pregunta en voz baja mi hermano quien esta a mi lado.

Me harté.

- ¡¡¡¡Ya basta, maldición!!!! Me tienen cansada preguntandome todos los dias si estoy bien y no, no estoy bien, estoy enferma, he bajado considerablemente de peso, no puedo mirarme al espejo por que no me gusta lo que veo - me desgarro la garganta al gritan y lagrimas gruesas mojan mis mejillas - el chico que amo esta postrado en una cama de hospital sin despertar por mi culpa - se me corta la voz, siento como unos brazos me rodean por la espalda, no se en que momento me levante de la mesa, la silla donde estaba sentada esta volcada en el piso junto con mi plato de comida.

SECRET LOVE IN NEW YORKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora