Farsa de amor con el chico oveja [Finalizada Sin Corregir]

CAPÍTULO 31

CALEB

No podía explicar todo lo que estaba experimentado al ver lo que contenía la caja.

Una lámpara en forma de luna me había hecho sonreír como loco. Era preciosa y aún sin pilas lucía increíble.

-Me encanta Emma.-Dije sincero luego de terminar de mirarla de manera detallada. -Creo que es el mejor regalo que alguien me haya dado alguna vez.

Porque realmente nadie prestaba tanta atención a mis gustos, en especial mi amor por todos los astros.

Emma sonrió satisfecha.

Quería seguir hablando con ella pero otro cliente llegó y tuve que atenderlo. En el momento que vi que quería irse le hice una seña para que me esperara. Terminé de preparar el pedido del señor y me acerqué a Emma para darle mis llaves del departamento.

Al ver su sorpresa me apresuré a decir: -Si no tienes algún otro plan podrías esperarme en mi departamento.-Al escuchar que acababa de sonar como un pervertido, sentí que mis mejillas se calentaban.-Para mirar una película o jugar algún juego de mesa.

Puros pretextos, solo quería pasar tiempo con ella. Llevaba mucho tiempo sin hablar con ella de manera tranquila porque yo trabajaba y Emma estudiaba para los próximos exámenes.

Emma mordió su labio ligeramente como si lo pensara. Así que decidí decir que si no podía o no quería todo estaba bien.

Emma me sorprendió cuando se apresuró a responder. -No tengo nada más que hacer, en realidad Ava ahora probablemente esté con su novio y Olivia podría estar con Helmer.

Forcé mi cerebro para recordar ese nombre. Y finalmente lo logré al pensar en la corta conversación que habíamos tenido Emma y yo hacía un mes. El tal Helmer visitaba todos los fines de semana a Olivia.

Emma se despidió de mi luego de que le dijera que pronto la alcanzaría.

✧✧✧

Estaba yendo de regreso a mi departamento mientras miraba la publicación que se había hecho viral. Incluso mi hermano había reaccionado e incluso me llamó para felicitarme.

Me sentía orgulloso de mí, pero mirando las ofertas sabía que no se compraban con la de Italia. Faltaban meses para salir pero ya iniciaba a pensar en el momento que me separaría de Emma y eso no dejaba de atormentarme. Antes tenía todo claro pero ahora dudaba.

Dejé de darle vueltas al asunto cuando llegué a mi destino. Toqué antes de abrir.-Voy a entrar -dije en voz alta para hacerle saber a Emma que era yo.

La puerta se abrió y vi a Emma salir con un mandil de cocina.

-Justo estaba terminando unas galletas, aunque creo que no son comestibles.