Merengue

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— ¡Vamos a hacer muffins!

—Estás toda feliz. —Jisung se rió.

—Porque vamos a hacer muffins —confirmó Felix, girando sin dejar de caminar para mirar a Jisung y sacarle la lengua. Jisung corrió para abrazarla por la cintura y revolverle el pelo.

— ¡Sungie! —Felix rió.

Felix se liberó del abrazo cuando llegaron a la entrada del supermercado y Jisung sostuvo la puerta abierta para dejarlo pasar.

— ¿No hiciste muffins el otro día? —preguntó Jisung, empujando el carrito.

—Estos son especiales.

—Ahh, porque son para Hyunjin —afirmó Jisung. Felix eligió dos tabletas de chocolate amargo, dos de chocolate con leche y una bolsa de chips de chocolate—. ¿No me vas a convidar uno?

—No, son demasiado especiales para vos —bromeó Felix, y Jisung empujó el carrito para chocarle la cola, haciéndolo reír.

Felix cargó una botellita de esencia de vainilla y dos bolsas de azúcar, y agarró el paquete más grande que encontró de palitos de queso cuando llegaron a la góndola de los snacks. Escuchó a Jisung echando algo dentro del carrito y cuando se dió vuelta para mirarlo encontró tres paquetes de papas fritas de distintos sabores y a Jisung sonriendo, viéndose tierno.

Felix agregó al carrito dos kilos de harina y uno de cacao en polvo. No necesitaba ni la mitad de eso para los muffins, pero nunca estaba de más tener la alacena llena. En las heladeras, eligió algunos paquetes de manteca y cajas de leche y un balde de helado de crema oreo.

Iban bien, hasta que se descontrolaron en la góndola de las golosinas y llegaron a la fila de la caja con el carrito saturado de bolsas y cajas de todos colores. Felix le entregó a la cajera la tarjeta de crédito, porque Jeongin tenía razón.

— ¿Hablaste con él? —Jisung susurró mientras esperaban a que la operación fuera autorizada.

Felix negó con la cabeza y Jisung lo rodeó con un brazo. Su papá nunca lo llamaba para preguntarle cómo estaba, pero autorizaba todas las compras que Felix quisiera hacer con su tarjeta, sin importar qué tan grandes o ridículas fueran. Felix no sabía si eso contaba como amor.

Estaban agotados después de cargar todas las bolsas hasta el departamento y guardar cada cosa en su lugar, y ni siquiera habían empezado a cocinar. Jisung abrió una bolsa de bocaditos de merengue y apoyó uno sobre los labios de Felix hasta que abrió la boca.

— ¿Minho te llevó a comer hamburguesas? —Felix preguntó mientras picaba el chocolate y lo metía en un bol.

— ¡Sí! Las mejores hamburguesas de la ciudad —contestó Jisung, abriendo el paquete de manteca—. Tenemos que ir juntos algún día.

Cuando terminaron de picar, Felix colocó el bol lleno de chocolate y manteca a baño maría sobre la hornalla, luego partió dos huevos en un nuevo bol y agregó una taza de azúcar.

— ¿Vas a verlo de nuevo este fin de semana?

—Sí... —Jisung no parecía del todo seguro—. ¿Por qué sonás triste?

—Porque lo estoy. —Felix hizo pucheros, apretando la bolsa de azúcar entre sus manitos, dedos pegajosos por la clara de huevo. Jisung se la sacó con delicadeza y la apoyó sobre la mesada.

— ¿Querés que hagamos algo juntos? Podemos ir a la casa de Innie.

Felix sacudió la cabeza. Agarró un puñado de merengues y le dio uno de comer a Jisung antes de empezar a batir la mezcla.

—Ya te dije que no quiero ir más a esas fiestas.

—Podemos hacer lo que vos quieras —Jisung le aseguró.

—Hmm... —Felix se quedó pensando mientras mezclaba el chocolate y la manteca derretida con el resto de la preparación—. ¿Podés quedarte a dormir hoy? ¿Y jugamos jueguitos?

— ¿Y te ayudo con tu ensayo de Estética?

— ¡Sí! —Felix lo abrazó, escondiéndose en el cuello de Jisung y asintiendo con la cabeza, acariciando la piel suave de su mejor amigo con la nariz—. Por favor. Ese trabajo me está haciendo sufrir.

Colapsaron en el sillón después de meter los muffins en el horno, la bolsa de merenguitos entre las piernas de Jisung. Felix amaba estar con él, lo hacía sentir seguro. Jisung lo cuidaba y le cumplía los caprichos y le acariciaba el pelo porque sabía que a Felix le gustaba estar en contacto. Para Felix, eso era amor.

— ¿Qué clase de cosas hacen con Minho?

—Vamos a comer, miramos películas... Le gusta resolver crucigramas.

—En la cama, Sungie.

— ¿En...? Ay, no. —Jisung se tapó la cara con las dos manos—. ¿Para qué querés saber eso?

—Me da curiosidad... —Felix trepó sobre Jisung y se sentó en su regazo.

—A mí me da vergüenza —discutió Jisung, pero se destapó la cara y colocó las manos instintivamente sobre los muslos de Felix.

— ¿Qué cosas te gustan?

—No te voy a decir. —Jisung le hizo cosquillas en la panza. Felix se retorció riendo.

— ¿Qué fue lo que más te gustó?

— ¡No te voy a decir!

Felix infló los cachetes, haciendo una carita que sabía que Jisung no podía resistir. Jisung suspiró.

—Él... Su...

Jisung desvió la mirada. Felix acarició su cuello hasta que Jisung se acercó para susurrar en su oído la cosa más sucia que Felix había escuchado en su vida.

— ¡No te burles! —Jisung pidió cuando Felix empezó a reírse. La abrazó contra su pecho para hacerla callar—. Me pongo tímido.

— ¿Creés...? —Felix respiró hondo hasta que se le pasó la risa—. ¿Creés que Hyunjin va a querer hacerme lo mismo?

—Hyunjin va a querer pasarte la lengua por todo el cuerpo —dijo Jisung, subiendo las manos por las piernas de Felix hasta sus costillas y volviendo a bajar—, como si estuvieras hecho de helado.

Felix se rió de nuevo.

— ¿Sungie? —dijo, y Jisung lo miró— ¿Besito?

—Lix... No sé si debería. Estoy con Minho.

— ¿Estás con Minho... oficialmente? —Felix alzó las cejas y apoyó las manos sobre las mejillas de Jisung, forzándolo a mirarlo.

—No, no oficialmente —Jisung admitió en un tono triste.

—Entonces lo lamento, pero seguís siendo mío.

Felix le ofreció un merenguito y cuando Jisung lo sostuvo entre sus dientes, Felix se lo robó. Mordió el merengue para recuperarlo, rozando los labios de Jisung con los suyos.

— ¡Lix!

Felix partió el merengue entre los dientes, dejando que los pedazos de azúcar se derritieran sobre su lengua. Jisung sostuvo su rostro y presionó sus labios sobre los de Felix en un beso que no podía saber más dulce.

—Siempre voy a ser tuyo.

Bubblegum [Hyunlix] 🧁Donde viven las historias. Descúbrelo ahora