Sekiryuutei / Supergirl: Lo mejor del mundo [DxD]

Prólogo

Para entender lo que voy a contarte tienes que hacer algo primero, creer en lo imposible.

Mi nombre es Issei Hyoudou y soy el Emperador Dragón Rojo de la era moderna, una era que cambió por completo con la llegada de los Superhéroes como Superman, Batman, Wonder Woman y Arrow. Hay otros más pero solo mencionaré a ellos por ahora.

Yo vivo en Nueva York con mis padres y estoy en mi primer año de la secundaria. Este año me iba a parecer aburrido hasta que una chica llegó a mi vida, su nombre es Yuuma Amano y ella fue mi primera novia. Tuvimos una relación que duró casi tres meses.

Las cosas entre ella y yo iban muy bien e incluso la invité a una cita fuera de la ciudad, el Acelerador de Partículas de los laboratorios STAR de Central City iba a ser encendido y no me lo quise perder, es por eso que ella y yo nos preparamos para verlo, y lo conseguimos.

Ese día fue una montaña rusa de acontecimientos, empezando desde que llegamos y salimos de los laboratorios STAR luego de ver como iniciaban el Acelerador de partículas.

Yuuma y yo habíamos caminado de la mano hasta llegar a un parque donde ella me hizo una petición inesperada cuando se encontraba delante de mí y detrás de una fuente de agua.

"¿Podrías ***ir por mí?".

No había escuchado muy bien lo que me quiso decir y cuando le pedí que repitiera lo que dijo, un extraño temblor sacudió el suelo del parque y lo siguiente que vi de Yuuma fue que desapareció.

A lo lejos vi que el acelerador de partículas de los laboratorios STAR explotó y un suceso de fenómenos extraños ocurrieron en los cielos de la ciudad, vi que un extraño relámpago de color dorado impacto en un lejano edificio dentro de la ciudad, luego vi a un gigantesco dragón rojo aparecer en los cielos de la ciudad con un aspecto espectral, pero por alguna razón nadie más lo podía ver.

Y fue ahí cuando un extraño relámpago carmesí cayó del cielo y me golpeó.

Yo quedé en coma por casi un año y al despertar me encontré en el hospital general de Nueva York, lo primero que recibí fue un cálido abrazo por parte de mis padres, pero lo que me extrañó fue que no había rastros de Yuuma. De hecho, mis padres y compañeros de la secundaria no recordaban haberla visto, incluso llegaron a la conclusión de que yo soñé con ella mientras estaba en coma, pero eso no tenía sentido.

En los siguientes días después de despertar comencé a experimentar sueños muy extraños donde aparecía un ser imposible, un dragón rojo, el cual era más pequeño en comparación al que vi esa noche en los cielos. Aún recuerdo la primera vez que este nuevo "dragón" y yo hablamos.

Estaba soñando con que finalmente me había reencontrado con Yuuma en aquel parque de Central City y entonces todo se puso oscuro y su voz resonó por todos lados.

[¿No estás muy desesperado, muchacho tonto?]

Su voz era burlona y autoritaria al mismo tiempo.

— ¿¡Qué eres tú!? ¿Dónde estás?

Exclamé sin saber a dónde mirar.

[Estoy en frente de ti]

— ¡UWAH...! ¡¿Un dragón?!

Exclamé al caer sentando en el suelo de la impresión.

[Eso es correcto. Lo que supones que soy por ahora. He estado tratando de hablar contigo por un tiempo, pero mis palabras probablemente no podían llegar a ti porque estaba todavía muy débil y tu nivel no era lo suficientemente bueno]

Los ojos rojos del dragón se fijaron más en mí.

[Pero ahora..., desde que fuiste golpeado por ese rayo, finalmente estoy en condiciones de mostrarme ante ti]