Sekiryuutei / Supergirl: Lo mejor del mundo [DxD]

Capítulo 8: Despertar de la Chica de Acero

Themyscira

Al siguiente día, ya en la Tierra, en Themyscira la isla de las amazonas, Kara quien se encontraba recostada en una cama empezó a abrir sus ojos y lo primero que ella vio fue a su primo Kal-El quien la miró de forma tranquila a pesar de las múltiples heridas que tenía él en su rostro.

— Hola.

Saludó a su prima.

— ¿Estoy soñando? ¿Qué sucedió? No recuerdo nada.

Ella preguntó sentándose en la cama, pero de repente los recuerdos de lo que sucedió llenaron sus pensamientos.

— ¡Layla!

Exclamó recordando el momento en que Darkseid la asesinó. Inmediatamente ella empezó a llorar y su primo le dio un gentil abrazo mientras limpiaba una de sus lágrimas.

— Estás a salvo.

Él aseguro intentando confortarla, luego se separó un poco para mirar a su prima y ella lo miró a él y fue ahí cuando notó las heridas en su rostro.

— No es nada, solo un rasguño.

Le aseguró.

— Recuerdo un sueño, una horrible pesadilla. Sólo quería llegar a casa. Hice... cosas terribles....

— Darkseid vive para la manipulación. Él tiene hipnotizadores, científicos y manipuladores dedicados a quebrar tu espíritu. Darkseid es maligno.

Kara apartó la mirada de su primo.

— Pero, ¿él me influenció? ¿O sólo reveló mi oscuridad interna?

Preguntó volviendo a mirar a su primo y él le respondió con una sonrisa amistosa.

— Tú estás aquí, conmigo. Y estás bien, nada más importa.

Al decir eso, los dos volvieron a compartir un cálido abrazo mientras que él recordó algo.

— Issei una vez me dijo que no querías ser héroe de nadie. Cuando estés mejor quiero llevarte a un lugar donde podrás estar a salvo, encajar y ser tú misma.

Kara asintió con la cabeza sin separarse de él. 

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Al caer la noche, Kara se encontraba frente a una estatua de Layla que fue construida a tiempo por las Amazonas para honrar su nombre. La trinidad, Issei y Zez la observaron desde atrás.

— ¿Seguro que es una buena idea?

Batman le preguntó a Superman sobre su plan.

— Se siente bien.

Le respondió y el caballero de la noche lo miró no convencido.

— No te des por vencido.

Superman le aseguró con una sonrisa.

— Los dos ya dejen eso.

Advirtió Diana quien seguía observando a Kara, Diana estaba al lado de Batman y él al lado de Superman, Issei y Zez estaban al otro lado de Diana.

Frente al monumento, Kara le dedicó sus últimas palabras a su difunta amiga.

— Layla, voy a extrañarte más de lo que puedes imaginar. Tú fuiste mi primera amiga aquí en la isla y me aceptaste sin preguntas, quizás porque como Oráculo viste algo bueno en mí. Ahora solo tengo que encontrarlo. Trataré de no defraudarte.

Luego de eso, ella se acercó hasta los héroes, específicamente frente a Zez.

— Sé que no hemos intercambiado ninguna palabra, pero quiero darte las gracias por haber apoyado a Issei en los últimos años.