Sekiryuutei / Supergirl: Lo mejor del mundo [DxD]

Capítulo 19: La venganza de un Caballero

Ciudad de Kuoh – Japón

6 de Junio de 2017, 00:00 AM

Yo, Kiba Yuuto estaba caminando sin necesidad de usar un paraguas cuando llovía mucho. Pensé que una buena lluvia podría refrescar mi cabeza.

Recientemente tuve una discusión con mi [Rey] Rias Gremory.

Se podría decir que me he revelado contra mi ama, quien hace muchos años atrás me salvó la vida. He Fracasado como "Kiba Yuuto", ya que no puedo olvidar mi venganza hacia la "Espada Sagrada Excalibur". Me había vuelto senil en los últimos años, con el estilo de vida escolar y ahora el universitario. Recientemente hice buenos amigos, tuve un buen estilo de vida y hasta recibí "ese" nombre. También había conseguido un propósito en esta vida gracias a Rias Gremory. Pedir más felicidad era algo malo. Sin duda fue malo. No puedo seguir viviendo con mis compañeros, no hasta que logre mi propósito...

"¡¡SPLASH!!".

Oí un sonido de agua que era diferente al sonido de la lluvia. Hubo un sacerdote delante de mí. Tiene una cruz colgando alrededor de su pecho y es alguien que da castigos divinos en el nombre de Dios. Él representa una de las cosas que más odio en este mundo. Él es mi objetivo de odio. No me importaba matarlo si él era un exorcista. Eso es lo que yo pensaba.

¡¿...?! ¿Qué rayos...? En él hay manchas de sangre en su estómago y estaba tosiendo un poco de sangre. Luego cayó al suelo. ¿Fue asesinado por alguien? ¿Quién? ¿Un nuevo enemigo?

— ¡.........!

Al instante creé una espada demoniaca ya que sentí algo bastante anormal. ¡Fue un poderoso intento de asesinato!

"¡¡KACTHIN!!".

Había un metal que brillaba al mismo tiempo que un rayo aparecía en el cielo. Cuando moví mi cuerpo hacia el lugar de donde la intención de matar venía, había alguien con una espada larga atacándome. Ese tipo tenía la misma ropa que el sacerdote muerto, lo que daba a entender que éste también era uno. ¡Pero las intensidades asesinas que este tipo liberaba no eran normales!

— ¡Yahooooo! Cómo te va, chico guapo.

Esa voz... conozco a este sacerdote...

Cuando la luz de un relámpago alumbró los cielos pude ver su rostro. Cabello blanco, ojos con iris rojos, se trataba de Freed Sellzen. El hombre con quien luché en el incidente de los ángeles caídos, el incidente donde conocí a mi amigo...

Freed mostraba la misma sonrisa desagradable de siempre...

— No pensé que siguieras en esta ciudad. ¿Qué quieres? Lo siento, pero hoy estoy de mal humor.

A pesar de la ira en mi voz, él solamente se rió.

— Bueno, este es un gran momento. ¡El mejor! ¡Porque yo estoy super feliz! ¡Estoy tan feliz que voy a llorar de felicidad! ¡Estoy tan feliz de volver a verte!

Él sigue hablando como un loco arrogante. Realmente sabe cómo sacarme de quicio. Yo ya lo detestaba por el simple hecho de que se trataba de un sacerdote. Cuando traté de crear una espada demoniaca en mi mano izquierda, la espada que Freed estaba blandiendo empezó a emitir aura sagrada. ¡Esa luz...! ¡Esta aura...! ¡Ese resplandor! ¡¿Cómo podría olvidarlo?!

— Sabes, me estaba aburriendo de cazar sacerdotes por lo que este un muy buen momento, chico guapo. Muy bien. Vamos a ver qué es más fuerte, mi Excalibur o tus espaditas demoniacas. ¿De acuerdo? ¡Hyahahahahahahahaha! ¡Tú recompensa será la muerte y un buenas noches!