Be My Omega| ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ| OMEGAVERSE

❥︎Parte 29

Les recomiendo revisar si han leído el capítulo anterior, Wattpad no está avisando de las actualizaciones :( y sigan comentando, las quiero <3

—Namjoon, ¿Cómo fue tu primera vez?—Su amigo giró la cabeza hacia él.

—Bien, supongo.—Se encogió de hombros.—Fue con esta muchacha de último grado... no recuerdo su nombre, pero fue mi novia un mes y lo hicimos como a los dos días.

Ambos sonrieron. Namjoon no recordaba la mitad de las personas con las que había estado, básicamente porque eran demasiadas. Por eso, además de porque era su mejor amigo, consideraba al más bajo la persona correcta para preguntarle a cerca de eso.

Habían salido ellos solos, como pocas veces ya que eran un grupo, pero debían recordar siempre que aquello empezó con ellos dos. Ninguno era más cercano a nadie; Namjoon no era hijo único y amaba muchísimo a su hermano mayor, pero consideraba a Yoongi el hermano que siempre quiso. Yoongi sí era hijo único, y Namjoon definitivamente era el hermano que siempre quiso.

Comieron algo fuera, como casi todos los sábados que estaban libres, fueron a uno de los recreativos más grandes de toda la ciudad a jugar videojuegos y discutir por quién era mejor jugando bolos, un clásico. Por último acabaron en la casa de Yoongi, viendo la tele en su habitación.

Porque sí, ahora Yoongi tenía televisión en su habitación luego de rogarle unos días a su padre, así no tendría que ver películas con Jimin en el salón.

—¿Fue especial?—Namjoon rió en voz alta, burlándose y Yoongi lo miró.—Es verdad, si ni siquiera te acuerdas de su nombre.

—Yoongi, no fue especial porque ella no era especial, fue una novia que me eché porque me gustan las chicas mayores, ella estaba aburrida y le quiso hacer caso a un alfa de primer grado.—Explicó, suspirando.—Jimin es tu alma gemela.

—Mi alma gemela eres tú.—Corrigió y Namjoon chistó.

—Sí, pero él es como tu otra mitad; Tú estás hecho para él y él está hecho para ti—Le sonrió.—Va a salir genial, deja de preocuparte.

—Me da miedo cargarla.—Confesó.—Hacer algo que no le guste o lastimarlo.

—Está hecho a tu medida.—Repitió.—Además, siempre duele, luego se va el dolor y llega el placer.—Le guiñó un ojo.

Desde que lo habló con Jimin solo ha podido pensar en eso, en todo momento, comenzaba a creer que se estaba volviendo loco o algo así. Él no estaba desesperado, sin embargo, su lobo sí y la opinión y deseos de este afectaban de manera significativa en él.

Ahora, se sentía como un jodido pervertido. No podía ver a Jimin y no pensar en eso, mucho menos cuando no estaba. Se había aguantado muchas erecciones, negándose a masturbarse con su imagen porque sentía que le faltaba al respeto. Pero ganas no le faltaban.

—Va a ser su cumpleaños el jueves, sale de trabajar en la tarde y se irá a Busan para celebrar su cumpleaños con sus padres, así que le dije que me dejara las llaves de su departamento para regar sus plantas.—Namjoon le dijo que continuara.—Ni siquiera sé si tiene plantas.

Estallaron en carcajadas como si fuera el mejor chiste de mundo.

—¿Qué planeas?

—Viene al día siguiente para la comida y así celebrará su cumpleaños con nosotros porque es su día libre. En la noche le digo que vayamos a su departamento y le doy una sorpresa.

—¿Te sacarás la polla?—Esquivó sabiamente un golpe.

—Decoraré con globos y le compraré un pastel.—Dijo, el otro asintió.