Be My Omega| ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ| OMEGAVERSE

❥︎Parte 35.1

Jimin trataba con todas sus fuerzas de no soltar ningún sonido comprometedor mientras Yoongi besaba y lamía su cuello acostado sobre su cuerpo.

Estaba entre sus piernas, sin hacer ningún movimiento, solo con los labios pegado a la piel sensible de su cuello y acariciando lentamente su cintura. Simplemente está siendo cariñoso mientras ambos estaban acostados, pero a Jimin ya empezaban a temblarle las piernas.

No habían tenido actividad sexual en mucho tiempo, cosa que podría justificar lo necesario que se encontraba por estar con su alfa, pero la verdadera razón es que estaba entrando en esos días en los que no podía ver a Yoongi sin quererlo dentro de él.

Jamás había pasado un celo acompañado, se negaba a darle esa experiencia a cualquier persona, nunca había tenido la suficiente conexión con nadie como para querer pasar un día entero en completa sumisión a esa persona.

Pero Yoongi era diferente, era su novio, su alfa y él único que ha llegado a considerar para entregarse de esa manera.

—Bebé...—Lo tomó por los hombros, queriendo que parara, pero su queja sonó más como un gemido.—ya, para.

Lo hizo al instante, jamás ignoraría una orden de Jimin, mucho menos en una situación así.

Era el último día de vacaciones que podían pasar juntos antes de volver a su ritmo habitual. Yoongi quería darle amor de todas las formas posibles, besarlo por todos lados y volver a marcarlo como no lo hacía hacía tiempo atrás.

—¿Pasa algo?—El alfa había parado de besarlo, pero en ningún momento sacó la cabeza de su cuello, era su lugar favorito, ni dejó de otorgarle caricias en la cintura y pecho.

—Es que... voy a entrar en celo pronto.—Yoongi asintió.—y estoy muy sensible.

—¿Quieres que me quite de encima y estás más cómodo?—El alfa ya se estaba alzando cuando Jimin lo abrazó por el cuello para tenerlo de vuelta en su pecho.

—No, no quiero que te alejes.—Dijo con un tono de queja que derritió al menor.—Es sólo que tenerte besándome así y en este estado, hace que- ya sabes.

—Y... ¿no quieres hacerlo?

—No es eso, sabes que no quiero que tengamos sexo con tu padre y Tae durmiendo a dos habitaciones.—Alegó, lo habían hecho una vez y aunque fue emocionante, no le hizo mucha gracia bajar a desayunar todos juntos.

—Si somos un poco silenciosos...

—No somos silenciosos.—Dijo enseguida el omega, compartiendo una risa.—Pero... tengo muchas ganas.

—Yo también, así te llevas un recuerdo de mí al hospital mañana.—Sugirió y Jimin mordió su labio inferior con un fuerza.

—Yoongi... ¿no te da vergüenza por tu padre?—Le preguntó, volviendo a sentir besos mojados en su cuello.

—No nos van a escuchar, yo duermo todos los días aquí y nunca los he escuchado a ellos.—Dijo y con confianza metió las manos en el pantalón de Jimin, tocando directamente la piel caliente de sus glúteos.

—Qui-quizás no lo hacen.—Estaba nervioso, ansioso y deseoso de todo lo que Yoongi quiera darle.

—No me importa, yo solo quiero tomarte ahora.—Pasó la lengua por encima de los labios del amor y este mismo abrió la boca para que así mismo, lamiera dentro de su boca.—¿Puedo? Solo si quieres. Si no, puedo hacerte cariñitos en la espalda hasta que duermas.

Jimin rodó los ojos sabiendo que no podía ir en contra de esa carita preciosa y sus palabras bonitas. Yoongi era su persona favorita, no hacían falta más que un par de palabras suyas y un beso para que el cansancio corriera fuera de su cuerpo o la tristeza lo abandonara.