En un buen día, si Jeno hubiera asistido a su casa con la intensión de hablar con él y arreglar las cosas para volver a tratarse como los amigos que eran antes, Yoongi hubiese aceptado y todo habría salido bien. Al igual que su padre, era muchacho de palabras.
Pero no era un buen día, estaba sumamente estresado por los últimos exámenes de diciembre y lo último que necesitaba era perder tiempo que no tenía tratando de rragelar un problema que él no causó.
Se sentía como cuando peleó por primera vez con Hoseok, la primera vez de muchas que no lo dejaron bien parado, porque no sabía cómo, pero el omega siempre lograba hacerlo sentir culpable dándole la vuelta a la situación.
Pero no permitiría que siguieran viéndole la cara de estúpido, ninguno de ellos, porque a él ya no le interesaba tener a Hoseok a su lado en todo momento como en aquel tiempo en el que intentaba encajar con los estándares de un omega que solo quería moldeardo a su gusto.
Ya no necesitaba la aprobación de nadie, pasaba completamente por alto incluso la de su madre, porque ya tenía a su pareja a su lado y no mecesitaba la buena opinión de nadie más.
Jimin lo quería, lo besaba hasta el cansancio cuando no se veían por días y le susurraba cosas bonitas en el oído antes de dormir esos días que tenía guardia de madrugada y solo podía pasar a verlo a la hora de dormir.
Su rey le mandaba besos por audios en horario de clases, le mandaba fotos cada que podía con mensajes largos contándole lo que hacía y dándole ánimos con sus exámenes.
Jimin lo apoyaba y prácticamente todo lo que consideraba aceptable, no trataba de mandar sobre sobre vida, no se atrevía a criticar sus decisiones y mucho menos intentaba cambiar su forma de ser para que encajara en la imagen que la gente quería de él.
Con Jeno siempre fue parecido, le gustaba estar con él porque su personalidad era diferente a la de Hoseok y junto a él no sentía la presión en sus hombros de ser perfecto para su satisfacción.
Pero había cambiado un poco, haciendo cosas como insistir para que saliera con él incluso cuando ya tenía planes con Jimin, sugerir que dejara de ver a su omega para verse ellos porque de alguna manera era mucho más importante y las últimas palabras que le dijo fueron el colmo para él.
No entendía por qué todos estaban en contra de Jimin si él ni siquiera les dirigía la palabra, ni cuando los veía de lejos en la entrada de la universidad o en en casa. A los únicos que le daba gusto saludar eran Namjoon y Jin, quienes sí le ponían buena cara al verlo.
—Sé que estás ocupado.—Comenzó, siguiéndolo a la habitación.
—Entonces, ¿Para qué vienes?—Se tiró sobre la cama, señalando la silla del escritorio para que Jeno tomara asiento.
—Porque en serio necesitamos hablar.—Dijo con mala cara.—Te di un tiempo porque sabía que estabas molesto, pero no me conestaste las llamadas en una semana, tuve que venir.
—No tengo muchos tiempo, Jeno, mañana tengo dos exámenes que atender.—Suspiró.—Dime lo que me tengas que decir.
El alfa sonrió un poco, viendo el menor sentado en la cama. Lucía tan perfecto solo respirando que era inevitable no desearlo para él, se veía extremadamente atractivo con aquella mirada baja y exigente. Todo un alfa imponente.
Jeno se levantó de la silla del escritorio y fue hasta Yoongi, el otro miró atengo como tomaba asiento a su lado, quizás muy cerca.
—Yoongi, yo te quiero—Comenzó.—, te amo, de hecho. Nos conocemos hace mucho y estoy seguro de que me tomaste algo de cariño en este tiempo.—Dijo algo tímido.
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Be My Omega| ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ| OMEGAVERSE
FanficYoongi nunca había considerado la edad como un impedimento para mantener una relación con alguien, pensaba que ocho años de diferencia no era algo que debía de separar a una pareja. Y no porque se lo hayan enseñado sus padres o lo haya visto toda s...