Be My Omega| ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ| OMEGAVERSE

❥︎Parte 15

Desearía decir que estaba emocionado, que deseaba que la hora de Jimin llegar se adelantara y por fin estuvieran juntos, pero no era así.

Más que emocionado, estaba nervioso. Tenía miedo de cargarla como solo él y su lobo sabían hacer buscando su comodidad, como lo hicieron mientras intentaba tener algo con Hoseok.

Jimin no es como Hoseok. Se repetía a sí mismo cada segundo, su lobo le repetía cada segundo. Tenía miedo de que fuera peor, era mayor, quizás más exigente.

Quizás por eso planeó la ropa que se pondría desde el día anterior y por la mañana, una hora antes de que Jimin viniera, ya estaba listo; no con la ropa que había guardado el día anterior, por supuesto, la cambió como tres veces buscando no lucir como un idiota con el omega.

—Hola.—Su padre hacía la comida con ese horrible delantal que decía odiar pero nunca tiraba a la basura.—Veo que ya estás listo.

—Hola, sí.—Se vio a sí mismo a la vez que abría la nevera, buscando agua.—Para evitar retrasos.

—¿Estás nervioso?—Quiso saber y Yoongi negó.

—Aterrado, más bien.—Confesó y Yoonsik bajó el fuego de lo que sea que tenía en la olla, le puso una tapa y caminó hasta él.

—¿Aterrado por qué? Te ves bien, hueles bien, siempre lo haces.—Lo alagó, acercándose a su hijo; probablemente esa era la conversación más larga que han tenido en días.

—Voy a tener una cita con el omega del que he estado enamorado desde que tengo catorce años y sinceramente, antes sentía que podía conseguirlo, ahora no.—Confesó, forzando una sonrisa que para nada se veía bien.

—¿Por qué dices eso? Eres un chico increíble y Jimin lo sabe, no por nada te ha invitado a salir.—Yoongi negó.

—Lo ha hecho por su lobo, porque estamos imprimados el uno del otro; si tuviera que escogerme por su cuenta no lo haría.—Yoonsik frunció el ceño por la bajada de autoestima de su hijo.

—No creo que eso sea así, pero si tu lo crees, entonces haz que te escoja por encima de tu lobo.—Tomó la mano del menor y Yoongi no lo miró a los ojos.—Han llegado hasta aquí porque tienen una conexión, ahora tienen que encargarse de que todo continúe porque quieren, no porque deben.

—No sé cómo hacer eso.

—Sé tu mismo, no es como si tuvieras que seguir algún guión.—Trató de tranquilizarlo.—Simplemente... no fijas ser algo que no eres, no digas cosas que no sientes y no te calles lo que sí sientes solo porque piensas que Jimin no te aprobará si lo haces.

—Ser yo mismo, lo capto.—Levantó la mirada de sus manos unidas por primera vez desde que empezaron la conversación.—Gracias, papá.

—De nada.—Acarició el rostro de su hijo. Le sorprendía lo poco que habia tomado de su madre, era literalmente igualito a él. Si mostraba una foto suya a los dieciocho podrían confundirlos.—Sabes que te amo, ¿Verdad?

—Lo sé, pero aún así, ¿podrías decírmelo siempre?—Pidió, con su mano sobre la que su padre tenía en su rostro y una pequeña sonrisa.

—Por supuesto, mi amor.

—Yo también te amo, papá.—Le dijo.—Aunque me porte mal y a veces esté fuera de mí, recuerda que te amo, siempre.

—Lo sé, es lo único que me mantiene contento.—Ambos se sonrieron.

—¿Viene Taehyung a comer? Estas cocinando para dos.—Señaló los fogones y su padre asintió.

—Es serio, lo juro.—Yoongi asintió rápidamente, sonriendo para hacerle saber a su padre que todo estaba bien.—No pensé enamorarme de nuevo, mucho menos del hermano de tu mejor amigo.