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Recuerdo que en una ocasión y cuando Amy dejó a  Ji-Eun con una niñera de su plena confianza. Una señora de unos 60 años que horneaba galletas cada tarde, se dedicaba a la jardinería y crochet, además de que su aspecto podría ser bastante… lindo. 

Mejillas brillantes con un tono rojizo natural a causa de la gran felicidad que le brindaba cuidar a los niños del vecindario, porque en efecto no solo cuidaba a Ji-Eun sino a una decena más, al parecer tenía bastante tiempo o sus hijos se habían olvidado siquiera de su existencia. Como sea, anteojos, cabello corto pero chino de tal manera que este parecía el arbusto que se encuentra frente al local de Amy, sonriente, demasiado sonriente como para preguntarme si tanta felicidad en su rostro era posible ser contenida en un ser humano. 

Pero regresando a lo de aquella ocasión, Amy me invitó a mirar una película que había conseguido en una venta de garaje de unos inmigrantes americanos, una que en sus palabras:

"Es la mejor película de romance cariño, no podras olvidarla. Es una verdadera Joya" 

Bien, pues aquella película llevaba por nombre "Pretty Woman" en donde un hombre de edad media con bastantes canas como para no ser mayor de edad pero que le ayudaban bastante para lucir atractivo a los ojos de las mujeres, contrató a una prostituta como acompañante de reuniones y encuentros casuales para dejar de ser atacado por unos cuantos conocidos, por su parte aquella chica de largo cabello ondulado, facciones bastante definidas y con un sueño frustrado acepta el trato en cuanto percibe la cantidad de dinero que se le dará puesto que este le ayudaría en un par de cosas. 

La película se desarrolla demasiado bien, podría decirse que aquellos inmigrantes americanos no engañaron a Amy puesto que aunque no era el tipo de película que me causaba interés, verla con Amy había sido bastante entretenido, además de que ella derramo un par de lágrimas mientras miraba el largometraje. 

Personas ricas, otras no tan ricas, situaciones embarazosas, halagos, peleas, emociones, sentimientos, confesiones y claro…. Escenas para adultos en compañía de canciones de 1980 creaban una perfecta trama que me hizo cuestionarme el porque actualmente se había perdido aquel brillo y glamour de los largometrajes románticos. 

Como sea, aquel remoto recuerdo había salido a la luz debido a que de toda aquella película se hacía resaltar el hecho de cómo alguien puede cambiar completamente su imagen cambiado su corte de cabello, el color, e indudablemente su vestimenta. Puesto que aquella chica había cambiado su aspecto  con ayuda de una estilista, algo de ropa nueva, refinada y dinero. Mucho dinero de por medio. 

Haciendo que aquella prostituta cambiará de tal manera que para el resto la mayoría del largometraje luciera completamente como una chica de un extracto social acomodado. 

Pues bien, mi vida no es "Pretty Woman" y mucho menos esperaba que alguna situación como esa pudiera ser posible en la vida real, Es algo Estúpido. Sin embargo actualmente y frente a la escena que se encuentra frente a mi, se podría que yo soy algo parecido a la prostituta y  Angel el tipo con dinero de pormedio puesto que cuando Amy me hizo salir por 3 horas para que regresara por Christine no esperaba encontrarme  con algo como esto.

-¿Y la chica mimada?- Cuestione en cuanto cruce la puerta-Se hace tarde- 

-Pero vaya- mencionó con asombro Amy- Pensé que no te gustaba usar trajes como esos- me miró de arriba abajo- Pero luces espectacular Cariño-

Rodé los ojos y miré mi reflejo en el espejo puesto que la sorpresa de Amy se debía a que usaba un ajustado pantalón color negro, camisa negra, corbata perfectamente atada al cuello gracias a la ayuda de un extraño, un chaleco abotonado en su totalidad quedando este entallado a mi cuerpo y como punto culminante, un saco que no me había molestado en abordar, puesto que eso solo lograría incomodidad.

Bad MessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora