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Sabía que aceptarla me costaría parte de mi , Sabía que permitirle acercase  costaría parte de mi libertad, Sabía que besarla me condenaría, pero permitirle formar parte de mi para después dejarlo me dolería.

Porque después de todo ya no era una extraña, no era una amiga, mi familia ni mucho menos una desconocida o chica mimada que me hizo perderlo todo, sino más bien mucho más que eso, mucho más que mi estúpida ex novia o cualquier persona que pudo estar cerca de mi.

Soha había pasado a ser parte de mi, era mi familia, mi compañera, una complice, un amor duradero que creo prevalecerá más allá de las fronteras y nuestras futuras vidas, creo fervientemente en que es mi alma gemela, que paso a serlo a pesar de que le negue el acceso a mi mundo pero que terminó por explorar porque se ganó mi confianza e indudablemente mi corazón.

-Lo siento- hablé mientras la veía dormir- De verdad-

Soha permanecía profundamente dormida en la habitación, cubierto por aquel par de sabanas blancas y una manta que había colocado encima de ella debido a que el clima se había tornado frío.  Hace minutos que me había levantado, tomado un baño, y vestido con algo realmente cómodo para realizar el largo viaje que me espera.

Me senté a la orilla de la cama para mirarla más de cerca, miré su delineada mandibula, sus delineados labios, sus inigualables pestañas y su cabello siendo un completo desastre, mientras mantenía un perfil bastanete relajado. No contuve el deseo de acariciar suavemente sus mejillas y sentir su tersa piel.

¿Qué si la quiero? Claro que lo hago, daría mi jodido mundo, y vendería mi puta alma solo para poder estar junto a ella. Pero el tiempo en el que habíamos coincidido había terminado y por más que deseaba prolongarlo no podría. Nuestro plan tenía fecha de caducidad asi como mi estadia en este lugar.

Seguramemte Soha deseaba que al despertar encontraría el perfil del chico que ama, que ambos despertarán mirándose a los ojos para después intercambiar un par de besos que terminarían en algo más, para después tomar un baño, tomar un desayuno entre risas y muestras de cariño interminables que ambos deseaban vivir,  donde después de un tiempo tendrán citas en público sin preocuparse de lo que sus mundos dirán, visitarán lugares nuevos, tendrían momentos inigualables con un par de discusiones que terminarían por esfumarce porque su orgullo no es tan fuerte,  pero sin duda alguna crearían recuerdos juntos difíciles de borrar de la memoria del otro, y si la relación entre ambos continuaba bien; terminarían casandose en donde solo sus amigos más cercanos asistirán y en la cual yo me reiría al ver como todos pelearían por ese estúpido ramo de flores artificiales sin sentido alguno más que el de decoración, tendrían hijos y una vida bastante estable.

Pero…. Pero…..

Aunque deseba deslindarme de mi pasado, algo me perseguia. Siempre lo hacia así que no podría vivir en paz, no podría casarme , tener una familia o algo estable porque cuando hay cosas que te importan existen mas posibilidades que las ocupen para dañarte. Y en familias como la mía, negocios como los mios, nadie se libra por completo. NADIE

Así que lamentaba que al despertar ella no podría vivir nada de ello, lo lamentaba.

-Lo siento- acaricié   levemente su mejilla- No podré quedarme, pero podré.…- suspiré- Yo te..- guardé silencio-Adios Angel-

Con demasiado cuidado me acerqué a ella para depositar un beso en su mejilla que provocó un vacio en mi debido a que sería el último que le daré.

Me alejé y sin mirar atrás tomé aquella mochila color negro que había traido de la casa de Amy , la colgué sobre mi hombro, subí el cierre de mi sudadera y salí del departamento dejando sobre la pequeña mesa de centro de la sala una nota y una caja de terciopelo negro que habia adquirido en una joyeria del centro.

Era momento de enterrar mi pasado. Dolía pero debía de hacerlo.

"Pasajeros del vuelo 695 con destino a las Vegas, Favor de abordar por el pasillo 3" "Pasajeros del vuelo 695, abordar por la puerta 3"

-Boleto y pasaporte por favor- comentó la señorita delante de mi- Los bolsos pueden ser colocados en los compartimentos superiores del asiento- miró con atención mis documentos- Disfrute su viaje-

La señorita me dejó el pasillo libre hacía el avión en donde logré ver con atención como los demás pasajeros abordaban aviones diferentes, como los carritos llevanan equipaje de un lado a otro, y otros se encargaban de dar señalamientos a los pilotos para alinear perfectamente el avión hacía un destino diferente.

-302- susurré mientras buscaba mi lugar-302-

Fijé mi vista en la parte superior de los asientos, hasta que por fin visualice, la verdad volar en un asiento de clase turista era mucho más económico y bastante pertinente para hacerme pasar desapercibido entre tantas personas pero la verdad era que… no viajaría solo.

Porque  tengo una deuda.

-Vaya- comentó para después darle un sorbo a su margarita- Pensé que no vendrías y que tendría que ir a buscarte-

-Una promesa- pause tomé asiento a su costado después de dejar mi maleta en el compartimiento- Es una promesa-

Comenté con sabor agridulce en los labios después de recordar a la autora de dicha frase que debía de olvidar lo antes posible.

-¡JA!- rió irónico-No digas tonterias- rió de nuevo de una manera tan exhuberante que me hizo sentir incomoda- ¿Cursilerias que te pego esa chica?-

-No- comenté firme- Nada de eso-

Giré a ver su figura robusta con aquel peinado anticuado, traje color negro y pañuelo blanco sobresaliendo de ese peculiar bolsillo, sin olvidar el terrible aroma a tabaco que desprendía no solo su ropa sino tambien el cigarrillo que tenía entre sus dedos de una manera tan elegante que para él lo hacia lucir superior.

………

‐¿Qué quieres que haga?-

-Nada exhuberante- hizo una señal a sus hombres para que me soltarán-Solo lo que te corresponde-

Caí de rodillas mientras presencié como Él dejo caer la colilla de su cigarrillo sobre la alfombra dejando sobre esta una marca oscura y grisácea difícil de remover. Alce la mirada para verlo directo a los ojos haciendole saber que no me intimidaba. Ya no.

-Quieres decir...-

-Ocuparte del negocio-

-¿Y ella? - interrogue- ¿La dejarán en paz?-

-Si cumples con tu parte, yo me ocuparé del resto, así que…- me incorporé-¿Tenemos un trato?-
……..

-Nada eso- abroche mi cinturón de seguridad- Padre-

Bad MessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora