Capítulo 16

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Daniela

Aunque Thiago todavía no me creyera estaba segura de que lo haría cuando acabará de ver el vídeo reproducido, porque en pantalla aparecía yo confesando a mi hermano y a Grace lo que sentía por él. También aparecía la parte donde le confesaba a Lucas que no me importaba lo arriesgado que fuera el plan, estaba dispuesta a hacerlo por él.

—Antes de que nos arrastrarais a la pista él estaba hablando con una chica y parecía que se lo estaban pasando demasiado bien. Entonces fui a la barra y le pedí al camarero tres chupitos, pero ellos no los aceptaron y me los acabé tomando yo

—Menos el último que se lo tomó Thiago para que no acabarás borracha—habló mi hermano

—Espera, ¿hiciste todo eso por qué estabas celosa?—preguntó mi amiga con una sonrisa en la cara

—Sí, lo hice porque estaba muerta de celos—ellos empezaron a reírse—Chicos, no tiene gracia, estoy metida en un laberinto sin salida

—¿Por qué dices eso?—me preguntó mi hermano

—Porque él no siente lo mismo que yo, él no está enamorado de mí, en cambio, yo sí. 

En este momento deseaba poder esconderme, pero estaba ante miles de personas que estaban presenciando lo mismo que yo. Sin pensarlo me giré hacia Thiago y él me miró mientras esbozaba una sonrisa e inmediatamente volvió a mirar la pantalla.

—Lucas, necesito ayuda porque siento que si sigo pensando y dándole vueltas al tema voy a acabar volviéndome loca

—Lo que te voy a decir va a ser una locura

—No importa

—Amiga mía te has enamorado de una manera que ni yo podría

—Ya, creo que me he dado cuenta

—Si te cuelas en el campo quizás sea más probable que te escuché

—Para hacer eso hay que estar demente—comentó mi hermano

—Pues tu hermana es capaz de hacerlo—le contestó Lucas

—Daniela, ni se te ocurra porque te van a sacar del estadio a patadas

—Para que eso no ocurra voy a necesitar vuestra ayuda

Cuando el vídeo finalizo todos se giraron hacia nosotros y yo me quedé quieta, no sabía qué hacer ni que decir. Aunque de lo que estaba segura es que ese video no formaba parte del plan porque ni siquiera sabía que existía.

—¿En serio, hacía falta poner ese video?—les pregunté a mis amigos

—Necesitábamos un plan B por si acaso el tuyo no funcionaba y mira al final hizo falta—contestó mi amiga

—Mi plan era perfecto, pero se ve que, aunque haga o diga lo que sea tu amigo no va a cambiar la forma de pensar. Más bien está bastante claro que él no siente lo mismo que yo, entonces lo mejor va a ser que dejemos las cosas como estaban

—Eso lo dijiste tú, pero yo todavía no te he dicho lo que pienso

Mis amigos se alejaron y él se puso delante de mí, yo me crucé de brazos y aunque me costara le miré a los ojos.

—Pues sería un buen momento para que comenzaras a hablar y para ser sincero

—Antes de nada, quiero que sepas que te creo

—¿Tuviste que ver ese video para creerme?

—No, además sé muy bien que para planear una locura como la que hiciste hay que estar loca

—Gracias, eres muy amable

—Es mi especialidad cuando se trata de ti

Desvié mi mirada al suelo y solté una maldición por dentro, después cuando comenzó a hablar volví a mirarle a los ojos.

—Yo quería disculparme contigo por cómo te traté ese día. La verdad es que estaba muy cabreado porque pensé que me querías usar y eso me jodió en el fondo—se acercó a mí y sentí mi corazón acelerarse—Rubia, yo no quiero que pienses que no siento lo mismo que tú porque ni en mil años podría sacarte de mi cabeza

Sus palabras me hacían sentir muy nerviosa y mi corazón cada vez empezaba a latir más rápido y eso era jodidamente frustrante porque no era fácil controlarlo, mucho menos si tan solo estaba a unos centímetros de mí y para colmo nuestras miradas estaban conectadas. Él no me dejaba de mirar ni un instante y yo de vez en cuando apartaba la mirada.

—Antes de que sigas me gustaría que me explicaras ¿Por qué te convertiste un capullo conmigo y por qué de repente nuestra amistad se jodió?

Hacía tanto tiempo que me había preguntado qué había pasado entre nosotros que necesitaba averiguarlo, y ya que los dos estábamos siendo sinceros no podía perder la oportunidad de preguntárselo.

—¿Todavía no te diste cuenta?—me preguntó y negué con la cabeza—La verdad es que todo se fue a la mierda cuando apareció Mateo y te enamoraste de él. Rubia, yo nunca quise aceptar lo que sentía por ti, pero cuando apareció él, lo comprendí, me había enamorado de ti, pero ya era demasiado tarde porque tú solo tenías ojos para él

—¿Has estado 4 años enamorado de mí?—asintió

—Y lo sigo estando

—¿Por qué no me lo dijiste?

—Porque debes entender que en las guerras de amor siempre hay balas perdidas

—Thiago no sé lo que se siente que la otra persona no sienta lo mismo que tú porque por suerte no lo he vivido, pero entiendo lo que me dices y me puedo imaginar que ha debido de ser un horror ver como yo era feliz con otro y que tu amor no era correspondido, pero ahora el destino nos ha dado una oportunidad

—Nunca pensé que fuera a perderte, pero lo hice y me di cuenta de que fue una estupidez. Aunque muy en el fondo me di cuenta de que tampoco fue un error porque si seguía estando a tu lado sabía no iba a poder fingir ser tu amigo cuando yo estaba enamorado de ti

—¿Por eso decidiste poner un muro entre nosotros?—asintió

—Prefería perder tu amistad a tener que fingir que te quería como una amiga y no como algo más

Seguí prestándole atención, pero me estaba congelando de frío porque solo llevaba una sudadera. Entonces él lo notó y me ofreció su chaqueta y aunque me negué al final la acepté.

—¿Tú no tienes frío?—le pregunté

—No te preocupes por mí, estoy bien

—Thiago, creo que quizás de haber sabido lo que sentías por mí las cosas hubieran sido diferentes

—No hubieran sido diferentes porque a él lo querías y a mí nunca me diste la oportunidad de...

Dejó la frase a la mitad porque en un instante cayó al suelo y cuando se giró escupió sangre por la boca y ahí estaba el imbécil que lo había golpeado y había cortado nuestra conversación. Era Mateo. 


Seguímos con los finales inesperados y con mucho drama

Thiago es mi expectativa en el amor, que le haya dejado ser feliz con Mateo mientras él llevaba todo ese tiempo enamorado de ella. Mi niño se merece todo lo bueno 

Y cómo no Mateo teniendo que interrumpir el momento ¿Que oportuno no?

Este capítulo fue muy lindo, nos vemos el próximo sábado con más.

Los amo y estoy segura que van a disfrutar del próximo.


Corazones en llamas ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora