Corazones en llamas ©

Capítulo 31

Thiago

Me quedé quieto al escuchar lo que salió de la boca de Ryan. Era una locura, pero de repente mi mirada se conectó con la de Daniela y descubrí que era verdad. Daniela había probado las drogas y había caído en ellas, pero nunca me lo había contado. No podía entender por qué lo había hecho, ni porque se lo había callado durante todo este tiempo, pero si había algo que supiera con certeza es que seguramente tendría una explicación y por eso no podía juzgarla.

Justamente cuando Lucas se fue con Daniela salí del colapso y quise haber reaccionado antes para que ella no se sintiera horrible, pero no pude la noticia fue muy inesperada. Jacob dio un paso hacia adelante y supe que él pensaba lo mismo.

—¿Se puede saber por qué te dedicas a ir haciéndole daño a los demás?—le preguntó Jacob a Ryan

—Porque es lo único que sabe hacer en esta vida—le respondí a mi amigo

Ryan nos sonrió y se cruzó de brazos.

—Amigo, entiendo que estés enfadado porque ella te ocultó ese secreto—me dijo sonriendo—¿Ya pensaste si quieres seguir estando con una chica como ella?

¿Chica como ella? Ugh, qué idiota

—Ryan, puedes pasarte tu miserable vida jodiéndome a mí y a ella, pero no me importa lo que ella haya hecho en el pasado ni lo que haya sido, porque igualmente la voy a seguir queriendo siempre—le dije

Me alejé de él y fui hacia la parte de la grada donde estaban Grace, Gabriel, Mar y Jess. ¿Qué hacía ella aquí?

Salté la valla y subí a la grada donde estaban ellos hablando. Gabriel estaba hablando por teléfono con Lucas, mi mejor amiga estaba hablando con Jessica y tenía en sus brazos a mi hermana que estaba dormida.

—Jess—llamé su atención y me dio un abrazo cuando me vio—¿Volviste por qué tienes combates de boxeo?—le pregunté y asintió

—¿Y tú cómo es que juegas con mi hermano a fútbol?—me preguntó y refunfuñe

—No sé. Me enteré antes del partido que lo habían fichado en mi equipo, pero no me apetece hablar de tu hermano

—¿Y tiene que ver algo con tu novia?—me preguntó sabiendo la respuesta

—Sí, pero no solo es por ella, sino por mí—le respondí

Mi hermana se fue despertando y la cogí en brazos mientras todos intentábamos salir del estadio. Finalmente, cuando nos escapamos de toda esa multitud y nos alejamos hacia el aparcamiento donde no había nadie.

—¿Thiago, qué le ha dicho ese imbécil a mi hermana?—me preguntó Gabriel

—¿Tú sabías que tu hermana había estado relacionada con las drogas?—le pregunté en voz baja y le tapé las orejas a mi hermana

—Sí, me lo contaron mis padres—me dijo mi amigo

—Pues yo me acabo de enterar ahora y es porque Ryan acaba de desvelar ese secreto de tu hermana—le informé y soltó una palabrota enfadado

—¿Cómo él sabía eso?—me preguntó Gabriel

—No lo sé. Lo único que me importa ahora es encontrar a tu hermana porque necesito que sepa que no la odio por haberme ocultado ese secreto—le dije a mi amigo

—Está en casa de Lucas. Ves a buscarla porque te necesita, yo me encargaré de explicarle esto a Grace—me dijo Gabriel

Me alejé de mis amigos, me subí a mi coche y conduje hacia casa de Lucas. Cuando llegué toqué al timbre y mi amigo me abrió la puerta, al verme no se sorprendió, ni se molestó en preguntarme qué hacía aquí porque estaba claro que sabía que iba a venir.