Daniela
Me encontraba en mi habitación y estaba hablando por teléfono con Jay, me estaba diciendo las fechas en las que tenía algunos combates. Después, me levanté de la cama y me dirigí al lavabo, me arreglé y cuando salí del baño me encontré a mi hermano sentado en mi cama, estaba mirando el nuevo libro que me compró Thiago ayer.
—¿Es nuevo?—me preguntó por el libro
—Sí, ayer Thiago me llevó a una librería y me lo compró—le dije y él sonrío
—Al final sí que funcionó—dijo en voz baja, pero logré escucharlo
—¿A qué te refieres?—fruncí el ceño
—Nada. Oye, hoy Thiago, Lucas y yo vamos a ir a la casa de Jacob, ¿quieres venir?—me preguntó
—¿Van a ir Mar y Grace?—le pregunté y asintió con la cabeza—De acuerdo, iré
Mi hermano me dijo que habían quedado a las seis de la tarde en casa de Jacob. Él era amigo de mi hermano, Lucas y Thiago porque se conocían desde el instituto, además Jacob jugaba en el mismo equipo que mi novio.
Me senté en mi cama y apoyé mi espalda en la pared. Aún me acordaba de todo lo que pasó ayer. Recordaba todos los susurros, los besos y las caricias que me daba Thiago. No pude evitar soltar unas sonrisas cada vez que pensaba en él.
Pasaron las horas tan rápido que ahora me encontraba vistiéndome para irme con mi hermano a la casa de su amigo. Decidí ponerme unos tejanos y un top de manga larga negro. Cuando acabé de arreglarme y cogí todas mis cosas, bajé abajo porque mi hermano me esperaba y nos despedimos de nuestros padres.
Me subí al coche y mi hermano me dejó poner música, así que conecté mi teléfono y empezó a sonar Karma de Taylor Swift y no me pude resistir y empecé a cantarla. Cuando acabó de sonar mi hermano me miró como si estuviera enloqueciendo, pero no lo estaba.
—¿Hermanita, estás bien?—me preguntó mi hermano y le dije que sí—Pues a mí me parece que la canción te afecto un poco—me dijo bromeando
—No me afectó, solamente que me siento realmente identificada. Algún día lo entenderás, créeme
Llegamos a la casa de su amigo y salimos del coche. Seguí a mi hermano y cuando él tocó el timbre su amigo le abrió la puerta y nos dejó pasar.
—¿Cuánto tiempo sin verte?—me dijo y me dio un abrazo—Bonita declaración de amor que le disté a Thiago—me dijo y supe que estaba sonriendo, en cambio, yo me moría de vergüenza.
Pasamos al salón y estaban varios chicos más del equipo. Aunque había un chico rubio que se me quedó mirando, pero no recordaba que él fuera del equipo de fútbol. Entonces mi hermano se interpuso en mi camino para que ese chico me dejara de mirar, pero lo que me sorprendió fue el comentario que soltó mi hermano. Algo no iba bien, pero ¿de qué se conocían ellos dos? Nunca lo había visto.
—Joder, esto no me gusta nada—soltó en voz baja, pero lo escuché
—¿Por qué dices eso?—le pregunté curiosa
—No importa, solo no te acerques a él—me advirtió
Me quedé en el sitio donde estaba y al cabo del rato ese chico desapareció. No había rastro de él, pero de repente sentí unos brazos abrazarme las piernas y era Mar. Me agaché para estar a su altura y le abracé. Después saludé a mi amiga que había estado hablando con mi hermano y finalmente vi a mi novio. Se acercó a mí, me abrazó y me dio un beso en los labios.
Unos minutos más tarde, llegó mi mejor amigo y me quedé con él hablando mientras tenía en brazos a Mar. Entonces, el chico rubio volvió al salón y cuando Grace lo vio, le avisó a mi novio y a él no le gustó nada verlo.
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Corazones en llamas ©
Teen Fiction"A veces el amor y la amistad se cruzan y a alguien le toca sufrir" Daniela Miller y Thiago Walker eran mejores amigos desde pequeños, pero todo eso cambió un día y empezaron a convertirse en dos completos desconocidos hasta el punto de detestarse...