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Sin decir nada, el castaño asintió y le dio una pequeña sonrisa a Fourth, saliendo de la habitación silenciosamente.

Gemini suspiró y se dedicó un buen rato (tal vez fueron segundos, quizás minutos, o incluso horas, pero Fourth no podía estar muy seguro porque se la había pasado completamente hipnotizado) contemplándolo como si fuesse una escultura, con su comisura elevándose un poco al final cuando desvió la mirada.

"Te has largado muy pronto de ahí, ¿te encuentras bien?" Él inquirió, dando algunos pasos hasta estar cerca de la cama para poder sentarse.

Fourth lo miró. "Oh, por supuesto que lo estoy." Entregó una sonrisa completamente falsa. "Voy a dormir con la persona que más me detesta en el planeta, estoy muy feliz"

"Hey, no es necesario que uses ese tono conmigo. Y tú lo sabes, ella no estaría aquí de no ser porque papá no tiene ninguna idea de como te trata. Todo sería mil veces más fácil si le contases."

El pelinegro respiró hondo, relamiéndose los labios y mordiéndose el inferior.

"Yo... no soy capaz de hacer eso. Papá y la tía Yuna se pelearían, y no quiero eso. Además, los niños tampoco tendrían ningún sitio al que ir. Y puede que Kapook sea una estúpida, pero sus hermanos realmente son inocentes en estos, y ellos sí son mis primos."

"Fourth," Gemini le miró de forma severa. "Deja de pensar en los demás un sólo segundo y enfócate en ti mismo, ¿de acuerdo? Los demás probablemente no vayan a devolverte ese favor."

Negó. "No espero recibir nada a cambio, Gemini. Nunca lo hago. No soy ese tipo de persona"

"Pues a veces, deberías. Haces que todos piensen que eres tonto y fácil de manejar para su propio de beneficio."

"¿Y acaso lo soy?" él alzó ambas de sus cejas, mirándolo con interrogación. El mayor suspiró, negando lentamente con la cabeza. "Honestamente, poco me importa lo que piensen, sé como soy, y estoy seguro de que por mucho que lo intenten, no van a conseguir manejarme"

Gemini volvió a elevar una de sus comisuras en una sonrisa ladeada, acercándose mucho más a su hermano, para poder susurrar: "¿Ni siquiera yo?" Fourth carcajeó suavemente.

"Mucho menos tú, idiota."

"¡Hey!" el azabache se hizo el ofendido, llevándose una mano al pecho. "¿Por qué me insultas así?"

"Porque me da la gana." Mordisqueándose el labio inferior, Fourth le guiñó un ojo peligrosamente.

"Ah, ¿Es decir, que tú crees que ese es un buen modo para referirte a tu Phi?" inquirió, acercándose un poco más.

Fourth volvió a reír, como si del chiste más divertido se tratase. "¿Cuándo has sido tú mi Phi?"

"Buena pregunta..." Gemini entrecerró los ojos en su dirección. "Tal vez tenga que empezar a serlo."

Para cuando ambos quisieron darse cuenta, sus narices estaban casi chocando mientras se observaban mutuamente, pequeñas sonrisas invadiendo sus rostros a poca distancia.

Un sonido de ruedas arrastrando por el suelo se hizo presente, y alguien carraspeó. "Err, yo..." Era Satang, parado en la puerta con una maleta que no parecía ser suya en absoluto.

Los mayores se separaron y lo miraron. Gemini frunció el ceño hacia él.

"¿Por qué llevas mi maleta?"

"La traigo aquí"

El ceño del pelinegro se frunció. "¿Aquí por qué?"

"Hablé con papá" él sonrió un poco. "Le propuse la idea de que Gemini durmiese aquí y yo en su habitación mientras Kapook se hospedaba en casa. Le pareció una buena idea cuando mencioné el hecho de que ellos podían llegar a matarse en algún momento"

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