Let the tears dry
One-shot
Mid AngstA la hora que Chuuya regresaba a su hogar, normalmente Dazai ya se encontraba durmiendo profundamente, por lo que era normal que no entablaran una conversación a altas horas de la noche. Sin embargo hoy el ambiente estaba diferente. Chuuya desde la mañana sentía que algo iría mal, su té de manzanilla que normalmente consumía sabía más amargo, y eso que le echó dos cucharaditas de azúcar. Todo se sentía extraño, distante y al pelirrojo eso no le gustaba. Aunque no le tomó importancia, se despidió de su amado esposo, y fue a su lugar de trabajo, la Mafia.
Ya era bastante tarde cuando regresó a su hogar, eran eso de las 12:40 de la madrugada. Las luces estaban todas apagadas, en la cocina estaba todo echo un desastre, al igual que en la sala de estar. No se le hizo tan extraño, ya que con Dazai todo era un desorden, y siempre que el ojiazul regresaba, tenía que volver a limpiar y ordenar la casa. Pero lo que si le llamo la atención, fue ver vendas tiradas por todo el suelo, vendas sucias.
—Dazai, ya llegue—. dijo dirigiendo su vista hacia el cuarto donde ambos dormían. No hubo respuesta.
Caminó lentamente hasta dar con la puerta, estaba por girar la manecilla, sin embargo, al hacerlo se encontró con que esta tenía seguro. Comenzó a preocuparse, esto definitivamente no era normal. Busco entre sus bolsillos la llave maestra de la casa, esa que abre cualquier puerta, sin encontrarla. Tocó con su puño suavemente y preguntó al pelicafé si estaba todo bien, sin obtener respuesta.
—Dazai, me estoy preocupando por favor abre ¿Si? Cualquier cosa podemos hablarlo entre los dos, pero déjame entrar Dazai—. Su voz se escuchaba desesperada, y Dazai no daba ninguna señal de estar ahí dentro.
Chuuya, como podía controlar la gravedad, iba a destruir la puerta, pero luego se arrepentiría, así que con una última esperanza de que Dazai saliera por las buenas, comenzó a hablarle a través de ésta.
—Dazai, no se que sucede, pero necesito verte, necesito saber que estás bien. Si algo sucedió lo podemos hablar entre los dos. No tienes por que sobrellevar todo tu solo, no seas idiota. Estoy aquí para ti. Mierda, no sabes cuanto quiero abrazarte ahora mismo, ábreme por favor—. terminó por decir, la puerta comenzó a abrirse dejando ver la mano pálida del chico de ojos cafés.
Chuuya abrió rápidamente y lo primero que hizo fue abrazarlo, acariciar su pelo y repetirle que ya estaba ahí, que todo estaba bien. Dazai a duras penas devolvió el abrazo, pero logró subir sus manos a la cintura del pequeño, pegándolo un poco más a él.
—Chuuya...—. Dijo su nombre con un hilo de voz.
—Aquí estoy Osamu, aquí estoy contigo—. Se separó un poco para poder dejar un beso en la frente del más alto, quien se derritió en los brazos de su pareja.
—Tuve un ataque de ansiedad Chuuya—.
—¿Qué lo provocó?—. Le cuestionó.
—Soñé con...con mi pasado, en la Mafia—. dijo Dazai, abrazando ya bien al ojiazul.
—¿Con qué cosa exactamente?—. Chuuya sabía del pasado de Dazai, pero no lo sabía todo, el sabe que el pelicafé le ocultaba algo.
—No puedo decirte chibi, no se cómo—. Aunque no había mucha luz, Chuuya sabía que en los ojos de su pareja, habían lágrimas y restos de ellas.
—Está bien si no quieres hablar de eso Dazai, no tienes que decírmelo ahora—. Acarició las hebras castañas del otro.
—Creo que es algo que es justo que lo sepas—. Acarició la mejilla pecosa del pequeño. Chuuya solo lo miró con ojos de amor, con los únicos que tenía para ver a Dazai Osamu.
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Soukoku: The Series
Fanfiction-One shots -Two shots -Three shots -Drabbles -Songfics Estan invitados todos a leer <3 [la portada no me pertenece, créditos a su respectivo/a autor/a] [los personajes tampoco me pertenecen, créditos a Kafka Asagiri]