Soukoku: The Series

28✨

Cuddles Please
One-shot

El pelirrojo estaba harto. Odiaba tanto esos días en donde solo quería salir, sin rumbo alguno, simplemente salir de la horrible soledad que significaba estar en su hogar. Por que sí, podía, aún que parezca imposible, disfrutar de estar sólo, pero no le gustaba, al menos, no cuando estaba débil. Lamentablemente ese día, el castaño había salido a realizar un trabajo que Mori le asigno, justo un día antes de toda la tragedia.

Cuando Chuuya usaba corrupción, era normal que se tomara uno o dos días de descanso. Pero esta vez fueron más, quizá unos 5 días. Pero todo fue culpa del estúpido de su compañero, si llegaba dos segundos más tarde, puede que ni siquiera siguiera vivo. Todo lo culpaba en el, a pesar de que, por obvias razones, el también tenía parte de la culpa.

Colocó un brazo encima de sus ojos, bloqueando la luz que entraba en su cortina, y se dispuso a dormir. Quizá haya dormido la mayor parte de ese día, y en parte se alegraba que mañana ya pudiera salir de ese miserable cuarto. Detestaba, con toda su vida, estar encerrado. Era aburrido. Y lo aceptaba, estar en casa sin su compañero, era como no estar en casa.

En un intento de levantarse, listo para ir a darse un baño, después de no hacerlo por tantos días, tan sólo logró lastimarse los codos, pues al caerse se apoyó en estos. Y joder, le había dolido. Como pudo, se incorporó en el piso, no importandole lo frío que estaba, sobandose sus codos por el fuerte impacto, comenzó a murmurar insultos.

No sabe cuanto tiempo paso echado en el suelo, muriendose de frío, y quejándose constantemente en que qué idiota había sido el levantarse sabiendo muy bien, pero sin aceptarlo, que no podía caminar correctamente todavía. Escuchó como la puerta de su apartamento era abierta, y un largo y cansino suspiro se oyó también.

-Chuu ya estoy aquí-. Sonó su voz, al mismo tiempo que se adentraba a su cuarto.

Sorprendido de ver al pequeño mafioso en el piso, e imaginándose la situación que tuvo que haber pasado, se acercó a él. El pequeño pelirrojo sólo lo vio mal, como diciendo que no se acercara, aún que si necesitara ayuda.

-Ni se te ocurra reirte, gasto de vendas-. Le reto.

El de orbes oscuros sólo le dió una pequeña sonrisa, no, no se burlaría, después de todo, era en parte su culpa que su compañero estuviera así. Por lo tanto, se acercó a él, sin este detenerlo, y lo ayudó a incorporarse, cargandolo de nuevo a la cama.

-Chuuya, ¿Por qué te levantaste?-. Cuestionó.

-Quiero darme una ducha, no me gusta oler mal-. Volteó su vista.

-Ven, te llevaré al baño-. Ofreció.

-Ya para qué-. Contestó resignado.

Chuuya estaba muy absorto, debatiendose si era necesario bañarse, que podía esperar hasta mañana. Al final, decidió que si se ducharía. Obviamente, Dazai tuvo que cargarlo a la bañera, y colocó una silla adentro para que no tuviera que estar parado.

-¿Me ayudas?-. Preguntó justo cuando el más alto estaba por salir del lugar.

-Oh~ Chu quiere que le de un baño-. Sonrió, alegre.

-Cállate-. Contestó sonrojado.

Dazai se acercó al chico a paso lento, tomó el shampoo en sus manos, regando un poco en estas, para luego posarlo en el cabello de su pareja. Restregó bien, lavando con mucho cuidado su pelo, lo desagüo para luego colocarle el acondicionador. Desenredó las hebras rojizas, dejando que este se viera suave y brillante.

-Dazai...-. Le vio a los ojos.

-¿Hmm?-. Siguió tocando su pelo mojado.

-Estás muy callado-. El castaño pensó que no lo había notado, y se sorprendió por las palabras del ojiazul.

-¿Lo estoy?-. Preguntó.

-Si, mucho-. Recalcó.

-No es nada Chuu, estaba concentrado en lavar bien tu hermosa~ cabellera-. Le molestó.

-No mientas Osamu-. Esta vez habló con un tono serio, muy serio para el gusto del pelicafé.

-No pasa nada Chuuya, de verdad-. Le dió una sonrisa reconfortante, pero había algo en ella, que se miraba falsa.

-Deja de mentir-. Dijo mientras alcanzaba una toalla, para envolverse en esta y salir del baño. No tardó tanto, con la ayuda del otro chico fue más fácil.

Ambos caminaron al cuarto de nuevo. Chuuya no tardó en ponerse ropa, aun que no era del todo su ropa, sino optó por ponerse una de las camisas que sabía que Dazai ya no usaba, y una pantaloneta. Volteó a ver a su pareja, que lo miraba enternecido.

-De verdad, dime que te sucede-. Se puso en frente de él.

-¿Podemos acostarnos?-. Pidió el más alto.

-Si-.

Los dos chicos se acomodaron debajo de las frescas y suaves sábanas, abrazándose mutuamente. El más alto pasaba un brazo por la cintura del ojiazul, mientras esté se recostaba en el pecho del otro, escuchando sus latidos, tranquilos.

-No pasa nada Chuuya, es la verdad. Es sólo que estoy cansado-. Cerró los ojos, poniendo su nariz en el pelo húmedo del más bajo.

-¿Cansado? ¿Pasó algo en la Mafia?-. Preguntó.

-Puede...que, bueno, ya sabes, confundí unas cosas-. Suspiró.

-No entiendo a que te refieres-. Se aferró a su brazo.

-Entregué unos papeles que no tenía que, y como no es novedad, Mori me regaño-. Volvió a suspirar.

-No es tu culpa, todos cometemos errores Dazai-. Bajo la voz.

-Eso lo se, es sólo que odio cuando Mori me da sus pláticas eternas. Es un gasto de energía-. Abrazó más fuerte a su novio.

-Ya, descansa ¿si? Iré a hacer algo de comer-. Dijo y quiso levantarse, pero el castaño se lo impidió.

-Quedémonos así, por favor-. Pidió en un murmuro. Chuuya no opuso resistencia, y se apego más al cuerpo del más alto.

Nadie volvió a decir nada. El pelirrojo sabía que había algo más, que este le estaba ocultando, pero no le presionó. Sabía que el ejecutivo le diría en algún momento, cuando esos pensamientos carcomieran su mente, y necesitara sacarlos, lo haría.

Por ahora, ambos se empezaron a quedar dormidos en los brazos del otro. Escuchando sus respiraciones tranquilas, demostrando así, que los dos estaban en paz, y que tener el uno al otro los hacía sentir en casa.

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JANDJDJSJXJXJSJ HACE CUANTO NO ACTUALIZO I'M SORRY.

Bueno chicxs ya casi es navidad y, sinceramente quería hacer un tipo...especial, pero no se xd,ustedes me dirán.

Skk mi comfort shipp cuando no tiene nadA de comfort ship es mi biggest flex