Renacer en otro mundo.
JiMin jamás espero que eso sucediera.
«Amor u Odio»
El mar de sentimientos de dos almas se desenfrena. Y una nueva historia, llena de misterios y romance se desencadena.
¿Te atreves a leer su historia?
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El como ambos terminaron rodando por la cama es algo que ninguno podría explicar correctamente.
Simplemente fue como en un parpadeo.
Cuando JiMin sintió calor, pensó que era porque la habitación estaba cerrada pero... las ventanas estaban habiertas y el viento nocturno seguia entrando a la alcoba, asi que no era eso.
Era él.
Era su cuerpo el que se sentia caliente.
Es cómo si hubiera sido inyectado con un afrodisíaco. Y JiMin sabía muy bien que era la misma sensación de cuando fue emboscado en su primera redada.
El lider del clan Zhong preparó una trampa muy elaborada, fingió que realizaria una cooperación, pero cuando estaba por firmar el acuerdo, su cuerpo comenzo a calentarse y a tener espasmos.
Aunque la dosis no era en exceso, el deseo reprimido lo estaba volviendo loco y se sentia sofocado, el hombre frente él había sonreído con sorna mientras decía algo, es solo que JiMin estaba sufriendo el calor intenso y no pudo escuchar atentamente las palabras del hombre.
Afortunadamente sus hombres se dieron cuenta de que algo no estaba yendo del todo bien, y entraron.
Evitaron que JiMin fuera llevado a saber que lugar para que hiciera saber que cosa indecente con sepa que tipo de gente.
Cuando JiMin se recuperó después de desintoxicar su cuerpo, les devolvió el favor con fuego. El almacen del lider del clan donde tenia la mercancia fue reducido a cenizas.
JiMin se vengó, que dulce y agradable venganza.
Volviendo al presente. JiMin se removió inquieto, su cuerpo se sentia pesado e inconsciente sus orejas salieron a luz, las pupilas de sus ojos se dilataron y su garganta estaba sedienta.
YoonGi dejo de besar el cuello del mayor, sus manos fuertes bajaron por el cuello hasta la cadera, JiMin gimio placenteramente cuando el peli negro acarició su miembro.
— Esta tan caliente... y palpitante. —YoonGi murmuro, sus ojos clavados en el pene de su gege.
Su mano se apreto en la base y las lágrimas fisiológicas de JiMin salieron de la cuenca de sus ojos.
Quería más, más, más placer.
— Da-dame más... más, um~
YoonGi trago grueso, sus labios se dirigieron a los pesones cafes del mayor, chupandolos. Su otra mano jugueteo con el otro peson, mientras que con la otra le daba placer al miembro viril de su gege.
JiMin se retorcio, su cerebro era como una masa suave que flotaba a la deriva, en el basto oceano. Sus orejas se movian segun sus emociones.
Pero... esto no era suficiente. JiMin se sentia vacío, necesitaba algo...
