Silvia.
Dylan está frente a mi, su mirada está perdida en algún lugar o en algún recuerdo que no puedo descubrir ahora. Quizás los recuerdos aún le duelen, recibió terapia con distintas psicólogas pero un dolor así no es fácil sobrellevarlo. Su novia acaba de dejarlo, el se veía tan feliz y la muchacha realmente lo creyó pero yo no. Está en una banca solo viendo ese camino por dónde esa hermosa niña se acaba de ir. Me acerco de apoco sin que el de cuenta y poso mi mano en su hombro con suavidad. El voltea y sus ojos llorosos quieres ocultarme su dolor. El sonríe sin querer hacerlo.
Silvia- Mi amor... No es necesario que hagas eso, te conozco perfecto y sé que estás triste.
Dylan- Ya no debería doler mamá. Tengo 20 años.
Silvia- esto no es cuestión de edad mi vida. Solo duele y ya.
Dylan- ¿recuerdas este día?
Silvia- si... Fue el día en que volví a verte.
Dylan- ¿Te lastimé?
Me siento a su lado y tomo su mano con delicadeza. Acaricio su mejilla y hablo con él.
Silvia- jamás... Entendí perfecto porque tú creías que esas personas eran tu familia. Fui muy feliz al verte nuevamente. Eres todo para mi. Mi amor, sin ti yo no sé vivir... Me dolería muchísimo que no estuvieras aquí para abrazarte y darte un beso.
Dylan- No voy a dejarte mamá. Te amo muchísimo.
Silvia- Yo te amo a ti. Eres mi mundo entero, jamás sería feliz si tú no estás conmigo.
Dylan- No repitas eso. Por favor.
Silvia- jamás sería feliz sin ti. Quiero que lo sepas Dylan.
Dylan- te amo mami.
Silvia- yo te amo más hijo.
Nos quedamos en silencio un rato. Me levanto y extiendo mi mano a Dylan.
Silvia- Vamos a casa bebé.
Dylan- Saliste temprano de tu trabajo.
Silvia- en realidad no fui. Creo que necesitaba tranquilizarme. Pero lo que realmente necesitaba era estar contigo.
Dylan- me pasó exactamente igual.
Silvia- yo sé que Raquel se pone celosa pero sabes perfecto que paso todo el día con ella. Ahora te invito a que nos vayamos ambos a disfrutar.
Dylan- ¿a dónde?
Silvia- me hablaron de un lugar súper bonito a las afueras de esta cuidad. Es un hotel en medio de la nada y hay cosas muy divertidas.
Dylan- Pero...
Silvia- solo un dia. Solo los dos.
Dylan- está bien.
Silvia- no tenemos que llevar nada, lo compramos ahora y ya.
Dylan- ¿Así nada más?
Silvia- si.
Dylan- me encanta que armes planes de último momento. Vámonos.Ambos caminamos a mi carro, es el mediodía así que compramos algo de ropa y el conduce por dónde le indico.
Dylan- mami... ¿Papá no se enojará?
Silvia- ya le dejé un mensaje. De todos modos Raquel se queda en casa de una amiguita.
Dylan- podríamos ir por él.
Silvia- Esto es solo tu y yo.
Dylan- ok. Pero no quiero que peleen.
Silvia- Tiene que entender. Y si discutimos tu no tienes la culpa. Ya deja de pensar eso.
Dylan- ok.
*Al siguiente día regresamos de noche, Dylan entra directo a su habitación a descansar luego de unas horas súper divertidas luego de llorar mucho. Nos hizo bien hablar y alejar ciertos pensamientos.
Carlos no me respondió el mensaje y eso quiere decir que está enojado conmigo. Así que primero voy a la habitación de Raquel.
Raquel- mami... ¿Me lees este cuento?
Silvia- claro que sí mi amor.
Leo un cuento de princesas a mi hija. Ella se duerme luego de decirme.
Raquel- mami Lee la nota que me llegó esta mañana. Está en mi mochila, es un sobre rosa. Dice que no te lo dé pero me asusta.
Silvia- tu descansa que todo va a estar bien. Allí afuera están los seguridad y ya sabes que hacer si te da pesadilla. Corre hasta mi cama.
Raquel- si mami. Te amo.
Silvia- te amo bebita hermosa.
Le doy un beso y la dejo dormida. En mi habitación no está Carlos, lo busco en el baño y tampoco está. Camino a su habitación y lo veo allí de espaldas.
Silvia- no estés enojado conmigo mi amor.
Lo abrazo por la espalda y inhaló su Roma delicioso.
Carlos- Ten... Es un regalo por tu cumpleaños.
Silvia- (rio) pero si ya pasó mi cumpleaños y hace mucho tiempo.
Carlos- lo sé pero no pudo estar a tiempo y no puedo esperar a que cumplas 43.
Silvia- Ok...
Carlos- ahh, tranquila que no estoy enojado contigo. Entiendo perfecto lo que sucede entre tú y Dylan. Debe ser muy doloroso todo eso.
Silvia- lo es. Y más ver a mi hijo muy mal pero nos sirvió de mucho alejarnos.
Carlos- me alegra demaciado. Ahora me preguntó... ¿Puedo relajarte yo también?
Silvia- ¿que tienes pensado?
Carlos- hacerte el amor. Una y otra vez.
Silvia- Woow eso suena interesante.
Carlos se acerca a mi. Cierra la puerta con llave y me besa guiandome hasta la cama. Caemos, el arriba de mi, enseguida empieza a besarme el cuello y me quita cada prenda lentamente. Luego se quita la camisa y el pantalón quedando solo en boxer. Me deja en ropa interior mientras sus manos acarician cada centímetro de mi piel. Sus labios buscan los míos encontrandolos para quedarse un buen rato allí. Luego ya besos bajan a mi cuello. A mis senos quitando el sostén, quedándose a succionarlo, pellizcarlos y trazando su lengua en círculos a través de mi pezón. Baja con más besos hasta mi abdomen y baja lentamente mi braga. Abre mis piernas y su rostro se pierde entre ellas. Su lengua hace maravillas en mi centro y gimo cada vez más fuerte mientras pasan los minutos. Cuando llegó a mi orgasmo el se detiene sin dejar que terminen por completo y me penetra. Se mueve rápido y luego lento y siento que no puedo más del placer y antes de gritan el besa mis labios. Gimo en sus labios mientras el se mueve más y más rápido. Mi cuerpo sufre de espasmos por el placer y luego el se detiene y vuelve a moverse haciendo que mi cuerpo pida más. Ambos tenemos un exquisito placer cuando llegamos al éxtasis.
Carlos se recuesta sobre mi pecho mientras recuperamos nuestras respiraciones. Cierro mis ojos y trato de dormir.
Silvia- Todavía tengo que bañarme.
Carlos- ¿Quieres que te bañé?
Silvia- si. Por favor.
Carlos me baña con agua caliente haciendo que mis músculos se relajen por completo. Luego nos acostamos y el se queda dormido. Estaba por dormirme cuando recuerdo la nota que le dejaron a mi hija. Me levanto poniendo mi pijama y voy a el habitación de ella. Busco en su mochila y cuando por fin la encuentro la leo. Está escrito con letras de recortes de revista."No te alejes de tus padres porque sufrirás lo mismo que sufrió Dylan... Te irás lejos y tus padres no te encontrarán.
P/D: Te irá peor si le cuentas a tus padres."Frunció las cejas tratando de pensar quien pudo ser el que envío esa nota. Luego veo a mi niña en su cama ya dormida y me recuesto a su lado.
Raquel- mami... Que bueno que estás aquí. Me dió una pesadilla horrible.
Silvia- no te preocupes mi amor, estoy aquí y no me pienso ir de tu lado.
Raquel- No me dejes.
Silvia- no voy a dejar que nadie te separé de mi lado.
Raquel- ¿lo prometes?
Silvia- lo prometo. Solo no te separes de mi.
Raquel- abrázame mami.
Silvia- estoy contigo mi amor. Duerme.
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Ven por mi
FanfictionTercera y última parte de la historia Navarro/Ferro Primer parte: En busca del amor Segunda parte: Contigo quiero estar.