Capítulo 30

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Emma.

Escuchar que mamá diga eso me asusta, pero me llena de seguridad. La abrazo fuerte y ella no me quiere soltar lo cual agradezco.
Silvia- No te voy a dejar jamás, tu eres mi bebé.
Emma- Te amo tanto mami... ¿Te quedas conmigo por favor?
Silvia- claro que si mi amor. Acuéstate conmigo bebé.
Emma- Prometeme que vamos a estar juntas siempre.
Silvia- Te lo prometo mi amor.
Nos acostamos y ella no deja de abrazarme. No logro dormir y ella se da cuenta. Volteo a verla y bajo la mirada, pero ella hace que la mire.
Silvia- dime lo que sea bebé.
Emma- Tengo mucho miedo mami, Yo se que estos dias estas muy pendiente de nosotros y te lo agradezco tanto.
Silvia- ¿Te sientes incomoda con eso?
Emma- no, yo entiendo lo que haces y por eso te quiero pedir una cosa. 
Silvia- dime mi amor.
Emma- quiero que tu vayas por mi a todos lados y tambien que me lleves. Basicamente que cuides de mi como más te guste. No me molesta que quieras pegarte como si fueras una garrapata.
Silvia- ¿Estas segura?
Emma- si mami, por años no pudiste cuidarme y quiero que lo hagas ahora. Me encanta que me trates como una niña porque jamás me iré de tu lado. Siempre estaré contigo.
Silvia- Será hasta que tengas novio y te olvides de mi.
Emma- claro que no. No quiero novio, estoy bien así.
Silvia- que bueno eso, porque eres mi bebé.
Ella me abraza y luego nos dormimos.

Silvia.

Fiorella ya había regresado a su casa porque mis heridas sanaron, tengo una cicatriz pero estoy haciendo todo para que no se note. Últimamente me siento muy enojada con Jimena y la odio tanto que deseo tenerla enfrente para hacerle daño así como me lo hizo a mi. Carlos y yo sabemos dónde está, está cayendo y está perdiendo mucho. Hay gente nuestra a su alrededor, tenemos todo para ganar. Jimena ama el poder, pero yo se lo estoy quitando. Carlos me apoya en todo y nunca me deja sola, sin dudas es el hombre ideal.

Me despierto con un beso en la mejilla de Emma, sonrío y la abrazo fuerte.
Emma- Hola mami.
Silvia- Hola mi bebé. ¿Cómo estás?
Emma- muy bien, contigo siempre estoy bien.
Silvia- te amo tanto.
Emma- Yo te amo a ti.
Silvia- ¿Que harás hoy?
Emma- nada.
Silvia- Dylan estará con Judith, Carlos y los peques irán de paseo. Mientras tu y yo iremos a ver a Fiore a un evento. ¿Quieres?
Emma- claro, ¿Cómo debo ir?
Silvia- elegante.
Emma- oh, genial. ¿A qué hora?
Silvia- 16 PM.
Emma- muy bien, voy a desayunar.
Silvia- Mmm... ¿La señorita no se irá a lavar?
Emma- no, ¿Huelo mal?
Silvia- estás puerquita.
Emma- pues, que pena por ti. Yo no iré a darme un baño.
Silvia- Bebé... Lávate el rostro y colócate las cremas.
Emma- No, que cansancio. Chao te amo.
Dice mientras sale de la habitación mientras río. Voy a la habitación de Mateo que lo encuentro triste.
Silvia- ¿Que tienes bebé?
Mateo- No pude dormir... Mami, no quiero creer mi historia real, no quiero saber más de eso.
Silvia- Es que...
Mateo- No necesito saber más, yo solo se que Jorge me separó de ti y que tu eres mi madre.
Silvia- ¿Estás seguro?
Mateo- si mami... Yo soy tu hijo ¿Verdad?
Silvia- Claro, Jorge nos separó pero ya estamos juntos y nada nos va a separar. Yo siempre te voy a amar. Te amo bebé.
Mateo- Yo sabía que si te buscaba sin perder la esperanza te iba a encontrar. No tengo nada que reclamarte mami yo sé que no sabías de mí.
Silvia- si yo lo sabía te hubiese buscado mucho antes. Yo te amo, eres mi gran amor, eres mi bebé.
Mateo- Ay mami, te extrañe aún sin saber cómo era tu voz. Eres hermosa y eres mi mamá. Tengo a la mamá más hermosa del mundo.
Silvia- No, yo tengo a el hijo más hermoso con esos ojos color miel que tanto amo.
Mateo- ¿En serio?
Silvia- Si, tus ojos son bellos y tan llenos de amor. Eso es todo lo que importa.
Mateo- Sin dudas eres la mejor mamá.
Silvia- ¿Por qué tantos elogios bebé?
Mateo- porque estoy feliz de estar contigo.
El me abraza y lo lleno de besos hasta que lo mando a lavarse y a desayunar. Luego paso por Raquel y la lleno de besos mientras ella no quiere despertar.
Silvia- si la princesa no despierta no comerá unos deliciosos Pancakes y no jugará con sus hermanos y papi.
Ella despierta y corre al baño mientras voy por Dylan que me recibe con un abrazo.
Silvia- Ash, me ganaste mi amor.
Dylan- Una vez tenía que hacerlo. Pero y mis besos.
Lo beso varias veces en las mejillas y huele tan bien.
Silvia- ¿Por qué tan guapo?
Dylan- iré a desayunar con Judith a algún lado.
Silvia- Pero mi amor...
Dylan- llevaré a seguridad, a cuatro.
Silvia- ok, te amo bebé.
Dylan- Te amo mami... Creo que falta que uno despierte. Tu bebé más grande.
Silvia- no es mi bebé, es mi amor.
Dylan- Ay ella, mi amor.
Dice caminando hasta la salida. Voy a mí habitación y veo a Carlos dormido y solo en boxer. Cierro la puerta y me acerco y me subo arriba de el moviendo mis caderas.
Silvia-¿Será que mi marido me de amor? ¡No, ya sé! Mejor voy a llamar a mi Fiore y ella me dará un orgasmo intenso.
Quiero bajarme pero el me toma de la cintura con fuerza y giramos mientras besa mi cuello y eso me exita.
Carlos- Ya vas a ver el orgasmo que te voy a dar yo.
Silvia- ¿Qué piensas de lo que hablamos?
Carlos- no me gusta, pero si no lo veo es mejor.
Silvia- es para ayudarla, se merece nuestra ayuda. Y ya te conté todo.
Carlos- Pero promete que me recompensaras con más sexo.
Silvia- todo el que quieras mi amor. Ya deja de hablar y dame amor.
Nos besamos con pasión mientras rápidamente me quita el short y me penetra profundo moviéndose rápido mientras me besa en los labios. Gimo mientras acaricio su espalda y estábamos tan excitados que rápidamente llegamos a sufrir espasmos hasta que gimo más alto si entiendo el orgasmo.
Silvia- Oh, por Dios. Que maravilloso.
Carlos- me debes más.
Silvia- cuando regresemos de nuestras obligaciones.
Carlos- ok. Te amo.
Silvia- yo te amo a ti Ferrito.


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