My Demon....

Cap 3 Enfrentamiento

"Me encantan tus movimientos pero necesitas
Más para que me atraigas."

El veneno de la flecha cada vez más se estaba apoderando del brazo de Tom, pero lo único que hizo fue sonreírle a la rubia, quien lo quedaba viendo con pánico y a la vez autosuficiencia.

-Veo que tiene agallas hermosa.

Tom paro a Andy y Geo por qué iban directo a los chicos.

-Calmarse ya habrá acción.

-Pero te ah atacado.- Dijo Geo concierto desden en su voz.

-Calma, habrá acción, pero ahorita déjenme a la rubia que esto lo arreglo yo.

Me le acerque a la rubia, demasiado rápido que cayó de culo del susto, yo solo pude sonreir aún mas.

-Umm huelo miedo, oh preciosa no lo tengas.- Tom se puso de cunclilla y la quedo viendo y en minutos sus ojos se pusieron color negro, levanto el brazo como diciendo que detuvieran a los amigos de la rubia estúpida.

Tom la levanto del cuello con demasiada fuerza, que el cuello le sonó de una manera que dio horror.

-Dejala maldito infeliz.- Pero Tom no escuchaba nada pues solo quería comerse a la rubia.

Bill y Gus estaban en brazos de los otros, solo viendo como la rubia cerraba sus ojos.

Bill viendo eso, tan desesperado que levanto un poco su mano y se concentro en solo proteger a su amiga. Donde estaba Nat se estaba creando un escudo y Bill estaba desprendiendo una magia blanca que en segundos puso la casa en blanco con toda la esencia que desprendía de su ser, el solo estaba pensando en como proteger a sus amigos.

Andreas quien tenía sujeto a Bill lo tuvo que soltar por qué toda esa magia lo estaba quemando. (Literalmente.) Tom tuvo que alegarse de la rubia, pues el veneno y tanta magia blanca lo estaba poniendo aturdido, volteo haber que sucedía y vio a Bill quien estaba de rodillas en el suelo, con los ojos cerrados y poniendo un escudo para sus dos amigos.Tom viendo todo eso solo pudo sonreír.

"El chico es demasiado fuerte, pero hay una gran parte de esa fuerza que no es de el." Pensó Tom.

El con paso veloz se acercó a Bill y le dio un empujón con demasiada fuerza, que hizo un hoyo en la pared de madera de la casa, con el mismo paso velos se dirigió a Bill quien se intentaba levantar del césped de afuera.

-Oh ¿pequeño te duele?.- Pregunto Tom, al ver a Bill tocándose la cabeza y solo hizo que su mano se llenará de sangre.

Bill lo volteo haber con una sonrisa, el mayor solo pudo sentir satisfacción, del solo hecho que miro la sangre y la sonrisa de el.

"Se mira tan hermoso, umm ¿como será tenerlo para mí solito?. Pensó Tom.

Bill rápidamente se levanto y le metió un golpe en toda la cara a Tom, el mayor solo atino a gruñir y antes que el menor escapara, Tom lo agarro por el cabello lo jalo hacia el, lo tomo de la cintura y dijo.

-Me pone demasiado, cuando son brusco, será ¿que te llevo conmigo o dejo que mis amigos te coman?.- Tom le mordió el cuello y luego lo soltó, para llamar a sus amigos.

-Andy, Geo vámonos ya.

-Chao linduras.- Dijo Andy guiñandole un ojo al rubio, el otro solo le saco el dedo con un "Pudrete maldito."

Los tres demonios se ajustaron y comenzaron a caminar y de separación en el bosque.

Bill se llevó la mano al cuello, sintiendo su sangre caliente, solo hizo que sintiera un escalofrío en su columna, luego sintió como mini Billy se levantaba de su sueño.

-Oh no mierda vuelve a dormir.- Le dijo en susurro a su pequeño amigo. (Bueno ni tan pequeño.)

-Bill estas bien.- Dijo Gus preocupado.

-Bill cariño estás bien que te hizo ese animal.- Ahora fue la rubia agarrando mi cuello y viendo la mordida que me hizo el de trenzas.

-Oh estoy bien solo fue un pequeño mordisco.

-Y veo que te ah encantado.- Dijo Gus con cierto tono de burla en su voz.

-De que hablas.- Pregunto Bill, con el ceño fruncido.

-Mira tu amigo está despierto.- Dijo Gus estallando en carcajadas y Nat dirigió la mirada a su entre pierna, rápidamente Bill la tapo y la rubia también reventó en carcajadas.

-Que les den.- Dijo Bill más que rojo, se fue hacia la pequeña casa.

-Jaja, calma hombre es normal después de todo eres un ser viviente ¿no?,  hasta los celestiales tienen hormonas.- Decía la rubia para tranquilizarlo pero eso solo hizo que se sonrojara a un más.

-Vale déjenme en paz, voy a mi habitación.

Bill entro en su habitación, cerro la puerta con seguro y comenzo a despojarse de su ropa, dirigió su mano a su amigo y comenzó a moverla de arriba hacia abajo, lo curioso era que se estaba dando atención con el pensamiento del de trenzas y el solo pensamiento cuando esté lo mordió fue suficiente para que se viniera.

Lo que Bill no sabía era que lo estaban observando desde un gran árbol.

Tom se deleito con el espectáculo que le dio el pelinegro, estaba deseando tenerlo en la cama, oyendolo gemir y pedir por más.

-Muy pronto serás mío.

Espero y les guste.

Perdón por los errores ortográficos.