"Te llevaré conmigo donde sea.."
"Incluso si es al mismísimo cielo, por qué al infierno ya estás de camino."
"¿Te he dicho que eres lo mejor que me ha pasado?."
*//*//*//*
By Narradora.
-Si no te callas clavare está lanza en tu garganta.
-Hazlo.
Y antes de que Tom pudiera reaccionar, vio como la lanza rosaba su garganta en una fricción, sintió como brea negra salía de ese rasguño. Se tocó la parte afectada, se llenó los dedos de la brea, Tom ladeó la cabeza y sólo sonrió de lado, depronto el aire se puso helado y el ambiente tenso.
-Solo esto puedes hacer, no mereces tener el puesto de arcángel. Te queda muy grande.- Tom tenía su voz espectral.
De hecho Tom no sentía ni una milésima de miedo hacia el Arcángel o a cualquiera, de hecho si ese era el mismísimo Gabriel. El Arcángel Gabriel derrotó a su padre pero a él no, el necesitaba más que un simple Ángel.
Sintió como la parte afectada comenzó a escocer, claramente se sanaria en unas semanas, ya que era una lanza celestial.
Solo hizo un movimiento de mano y un Ángel cayó muerto, luego hizo otro y otro cayó, después solo soltó un suspiro y mato a todos, dejando solo al padre de Gustav y al Arcángel altanero, el padre de Gustav mantenía su semblante serio, y el otro tenía la cara descompuesta.
-¿En serio quieres seguir?.- Dijo cuando miro que el Arcángel levantaba su Lanza, firme en su decisión.– Aunque admiro tu determinación, no eres rival para mí, de hecho nadie es rival para mí.- Todo lo decía una sonrisa.
El Arcángel estaba furioso, pero Tom tenía razón no era rival para el puto príncipe del infierno, asi que agarro su orgullo pisoteado y se dio la vuelta para salir volando, detrás de él iba el padre de Gustav, pero antes de que se fuera el padre de Gustav le dijo.
-Cuidalos bien y espero que esa astucia la tengas con el impostor que está en ese trono, que solo le pertenecia al antiguo soberano y a su hijo.- Y con eso se fue.
Dejando en el limbo a Tom, pero comprendió que el "hijo" era él, Tom ya tenía dudas que si Bam era su padre, pero solo lo quería dejar en la duda.
Llamo a su cuervo, el cual salió unos minutos después, seguido de su lindo novio y después el amigo de Bill, le sonrió para darle tranquilidad. Ya que sentía por el lazo que Bill estaba preocupado.
(El lazo se creó cuando tuvieron intimidad y se reafirmó cuando Bill quedó en cinta del heredero del abismo y lo celestial.)
Bill lo miro con ojos preocupados y más cuando miro el corte que tenía en el cuello, este se estaba torneado de un color negro y morado, seguía saliendo brea negra, pero no tanto.
-¿Q..que te a p...pasado?.- Pregunto con un nudo en la garganta.
-Nada mi amor, solo un simple contre que se sanara.- Tom le dio un casto beso.
-¿Seguro?.
-Si mi amor.- Tom le dio una sonrisa tranquilizadora, para luego usar un poco de magia para poder de tener la brea que aún estaba saliendo. Gustav tosió un poco incomodo.
-¿Se han olvidado que estoy todavía aquí?.- Tom se carcajeo.
-No.
Fue lo único que respondió.
-Te llevarás muy bien con mis amigos o con la metida de Emely.
-¿Quien es ella?.- Pregunto Bill, un poco ceñudo.
-Oh, ella es una de las tantas que me cuidaba, es una demonio del lado del círculo de la avaricia, es divertida y su lado amigable es un poco raro, ya que cuando quiere ser amiga tuya te da un ojo de un ángel muerto.
-Eso no suena tan "bonito".- Argumento Gustav.
-La vas amar.- Fueron las últimas palabras de Tom.
-¿Nos vamos?.- Pregunto Bill.
Tom asintio, agarro la cintura de Bill y luego miro a Gustav y extendió la mano, el cual le devolvió la mirada y quedó viendo su mano espesante.- ¿Que? ¿Quieres que también te agarre de la cintura?.- Respondió altanero.
Gustav rápidamente tomo la mano de Tom, la cual era un poco áspera pero eso no le importó, cuando sintió el tirón que le dio.- Sujetarse bien.- Tom lo apego para que no hubiera accidentes no deseados.
Bill se rió de la expresión de su amigo, el cual tenía los ojos abiertos y quería protestar...
Espero y les guste.
Perdón por los errores ortográficos.
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My Demon....
SpiritualLa Diosa celestial tuvo a dos gemelos maravillosos con el Dios del abismo, era un amor prohibido que ninguna de las deidades y de más dioses aceptaban pero eso no les impidió seguir con su amor y cuidar de sus hijos. Pero eso acabó, cuando uno de lo...