21. No, no puedo reponerme

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Existían pocos consuelos para Baekhyun, uno de ellos era el tiempo dedicado en exclusivo a su pequeño hijo, cuando estaban solo los dos y él podía sentir ese lazo maravilloso entre ellos. Le recordaba su infancia, siempre fue muy unido a Tao y él sabía que, si bien una madre no podía llenar el vacío de un padre, sí ayudaba mucho a atenuarlo, su bebito sería feliz, él se iba a encargar de eso.

Estaba disfrutando cada etapa de Daehyun, y ahora, cercano a cumplir su primer año, con sus tiernos balbuceos e intentos de caminar, lo tenía fascinado. El dolor en su corazón por su otro bebé nunca se apagaba, especialmente porque Baekhyun creía que iba cayendo poco a poco en la locura.

Desde el momento en el que supo que su hijo había muerto, una parte suya se negó a aceptarlo, su lobo estaba muy afectado, pasó días sin sentirlo en absoluto y luego lo confundían las sensaciones que le transmitía; él podía sentir que su bebé lo llamaba, había momentos en los que sus pechos dolían terriblemente y escurrían presintiendo el hambre de su hijo, le pasaba con Daehyun todo el tiempo y luego, mientras él dormía, volvía a sentir lo mismo.

Hubo muchas noches en las que Baekhyun no podía dormir por la seguridad en su interior de que su hijo estaba enfermo, lo sentía en sus entrañas, llamándolo y pidiendo su cuidado, pero Daehyun dormía tranquilo a su lado. Él trataba de no contarle nada de eso a su madre, no quería atormentarlo más, se lo había comentado a Kyungsoo y él solo le decía que la mente tiene formas extrañas de procesar el dolor, tal vez su lobo no lograba desprenderse de su cachorrito y sentía ecos de un vínculo perdido.

Tao estaba muy emocionado con la celebración para Daehyun, le habían organizado entre todos una fiestecita y quería que asistieran todas las personas que lo amaban, entre ellos estaba Siwon, quien se mostraba muy afectuoso con el niño. De la misma manera en que se preocupaba por Baekhyun cuando él era pequeño y le ayudaba a cubrir sus necesidades, el hombre había estado muy pendiente de Daehyun y siempre le llevaba regalos, ropa muy bonita y juguetes.

Tao no podía verlo de manera romántica por más que se esforzaba, pero sí lo consideraba un buen amigo ahora, y esperaba que, con el tiempo, esos sentimientos se transformaran en algo más y pudiera darle la oportunidad de una relación que Siwon tanto esperaba. Las visitas del hombre eran casi todos los fines de semana, ya se estaba convirtiendo en una rutina y él ya no se negaba a sus atenciones.

Fue en uno de esos sábados que Siwon llegó con una inesperada compañía, él invitó a uno de sus socios de origen chino a degustar las delicias de Zitao, ni el restaurante más lujoso de Seúl preparaba una sopa de wantan tan exquisita y, sabiendo que era el platillo favorito del hombre, Siwon quería congraciarse con él.

Tao los recibió con total amabilidad y se esforzó por preparar el mejor plato posible para complacer al alfa que, observando su ropa lujosa y ese reloj exclusivo en su muñeca, se notaba que pertenecía a la clase más alta, su humilde restaurante no tenía ningún lujo que ofrecerle, pero el hombre parecía ser sencillo y disfrutar de la deliciosa comida.

No fue hasta que terminaron de comer, cuando el joven quiso agradecerle y felicitarlo porque de verdad estaba exquisito, que se efectuaron las presentaciones de rigor y Tao casi se desmaya al enterarse de la identidad de ese apuesto hombre.

─Encantado de conocerlo, soy Byun Yixing, a su servicio.

Tao había perdido el color de su rostro y los alfas lo miraban con preocupación, pero el omega logró recomponerse y disimular.

─Mucho gustó, señor Byun, soy Huang Zitao.

El omega no pensó que su nombre significara nada para el alfa, después de todo, su relación con el padre del joven fue un secreto para todo el mundo y a ninguno de la familia Byun le convenía que se supiera de su existencia, sin embargo, Yixing sí identificó el nombre, solo la Luna sabía cuánto habían buscado a alguien con ese nombre durante más de veinte años. También se esforzó por disimular, no quería alarmarlo y que huyera de nuevo, necesitaba avisarle a su padre para ver si lo reconocía como el Zitao que estaban buscando.

💔ILUSIONES PERDIDAS💔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora