El Mismo Cielo (Yoonmin)

Misteriosa identidad

Misteriosa identidad

—Es mi primer día como encargado de este consultorio, mi nombre es Kim Namjoon—se presentó el apuesto moreno ante los muchachos, mientras que con mucho cuidado trataba las heridas que tenía Hoseok en el rostro. Al otro lado, Suga y Jimin estuvieron esperando en silencio.

—Yo soy Jung Hoseok, y ellos son mis amigos, Park Jimin y Cha Suga.

—¿Park Jimin?—preguntó el doctor Kim, deteniéndose de repente.

El aludido se puso de pie al escuchar su propio nombre e inmediatamente inclinó la cabeza, presentándose. —Yo soy Park Jimin, bienvenido a la escuela, señor.

NamJoon se había quedado callado por un momento, mirando el rostro de Jimin fijamente.

—¿Doctor Kim?—le preguntó Hoseok, al notar que el doctor había parado con lo que estaba haciendo y parecía sobrecogido.

—Gracias, también es un gusto—dijo NamJoon, recuperándose de su ligera impresión que no había pasado desapercibido por los demás. — Pero te pediría que no me llames "señor", me hace sentir mayor. Por favor, solo llámame por mi nombre o si lo prefieres solo doctor Kim—sonrió con amabilidad.

Jimin asintió de acuerdo y el doctor Kim volvió a lo que estaba haciendo antes. —Listo, ya está. —Se quitó los guantes quirúrgicos de las manos. —Sanara muy pronto.

Hoseok estaba contento con el trato amable del doctor. —Se lo agradezco muchísimo, no sabe lo aliviado que estarán muchos de los estudiantes después de saber que ya tenemos un nuevo doctor, y no uno aburrido como el anterior, sino uno genial como usted.

NamJoon hizo una sonrisa atractiva. —Tú también eres genial Hoseok. Y por más que me caigas muy bien, no quiero verte otra vez por aquí ¿Escuchaste?

—Fuerte y claro—el azabache levantó la mano en señal de promesa.

Jimin y Suga se colocaron a lado de Hoseok y los tres estuvieron a punto de salir cuando el doctor Kim los volvió a detener.

—Antes de que se vayan, me gustaría hablar con el señor Cha. Por favor ¿Podría quedarse un momento?

Con cierta sorpresa, Jimin frunció el ceño con un mal presentimiento. —¿Podemos saber la razón?—No podía ser que el doctor Kim siguiera creyendo que Suga tenía algo que ver con los golpes y las heridas. ¿Verdad?

—Le aseguro que no es lo que está pensando, joven Park. Creo que ese malentendido ya lo aclaramos al principio —parece que el doctor Kim había podido leer su mente.

Jimin quiso hablar pero fue interrumpido por Suga. —Me quedaré. Pueden irse sin mi.

—Pero...

—Está bien. Ya lo escuchaste, solo será un momento.

—Entonces, te esperaré afuera—refutó Jimin, decidido a no dejar a Suga.

Suga revolvió su cabellera castaña y sutilmente se acercó hacia su oreja. — Ve a clases, o yo iré a arreglar cuentas con Hangil, y creeme, no me importara patearle la cara y rebajarme a su nivel— murmuró, dejando a Jimin algo estupefacto por sus palabras y al mismo tiempo nervioso por su cercanía, Suga no parecía estar bromeando en absoluto.

Finalmente, el menor accedió nada convencido y se fue con Hoseok sin antes echarle una mirada desconfiada al doctor Kim.

La puerta se cerró y el doctor Kim se recargó sobre su sillón mirando seriamente al pelinegro. —Él es muy intuitivo, ¿No lo crees?— comenzó hablando calculadoramente—es obvio que desconfía de mí, y tiene razón, lo primero que pensé cuando abrí esa puerta fue que tú habías cometido el infame acto de golpear a esos chicos. Y es que a veces eres tan impredecible.