Chaos || S.Black

29

Habían pasado meses desde lo ocurrido, y nada estaba bien, James intentaba dividirse en dos por sus amigos y no sabía como actuar, Sirius se había disculpado con Remus desde el día uno sin descanso, hasta que Eris le sugirió dejarle un poco de espacio.

Sirius pasaba la mayor parte del tiempo con Eris, ya que cuando estaba con James y Peter, Remus se iba y no quería incordiarlo ni molestarlo más de lo que ya estaba. Eris obligaba a Regulus a ir con él cuando ella no podía, los dos hermanos Black se habían acercado más, aunque a Sirius era imposible verlo feliz completamente.

-Sirius, cielo, no voy a hacer una broma contigo - le dijo Eris por quinta vez en el día.

Eris se había saltado en esos tres meses más clases que nunca en su vida, todo porque Sirius le proponía planes que antes hacía con los merodeadores y ahora no. Eris solía ceder a la mayoría de cosas, irse a Hosgmade por no sabe cuales pasadizos, lanzar piedras al lago y que el calamar gigante se las devolviera, o incluso ir a las cocinas a coger comida de manera no muy legal, pero no estaba dispuesta a hacer una broma como las que le gustaban a Sirius.

James apareció mientras Sirius le daba su discurso de porque era una muy buena idea, y broma, y le pasó el brazo a Eris por los hombros riendo.

-¿No te deja en paz? - preguntó ignorando al chico.

-Ni un minuto - respondió divertida Eris.

-Pues siento decir que te la voy a robar - informó James - ya que acaparas el 90% del tiempo de mi hermana no creo que te moleste que me la lleve un poco

Sirius miró a Eris, iban a ir a la torre de astronomía, y ahora no sabía que hacer si ella se iba con James. Eris le pidió que si por favor podía ir a pedirle a Regulus una libreta que ella se había olvidado, indicándole también que estaba en la biblioteca, solía mandarlo con Regulus con alguna excusa para que no sintiera lástima de él mismo, Regulus le decía que estaba tratando a Sirius como un niño pequeño que no puede estar solo, pero a Eris le daba miedo que se derrumbara si no se mantenía enfocado en otra cosa, ya que le solía pasar por las noches, que salía abrumado de la habitación e iba a buscarla.

James seguía siendo su mejor amigo, pero no quería que Remus se alejara de él por su culpa, por lo que poco a poco se fue él mismo alejando de James y Peter también.

Ambos hermanos se fueron cuando Sirius asintió al recado de su novia, James le contaba como le había ido con Lily el sábado pasado en Hosgmade, ya que ambos estaban empezando a quedar con más frecuencia, llegaron al borde del lago negro y ambos se sentaron allí, con los pies sumergidos en el agua, disfrutando del buen tiempo y del sol.

-Necesito que vuelvan a ser amigos, Eris - le dijo su hermano - No soporto un minuto más que estemos todos separados, como si tuvieramos que elegir un bando, hace dos semanas que no hablo con Sirius más de dos palabras.

Se notaba que su hermano estaba agobiado, no era muy bonito ver a tus amigos distanciarse cada vez más, y no saber que hacer para que se reconciliaran . Eris también quería que se arreglaran de una vez, echaba de menos pasar tiempo con sus amigos, por mucho que quisiera a Sirius, hacía tanto tiempo que ella y Lily no iban a Hosgmade para simplemente hablar de todo, ya que cuando Sirius estaba con los merodeadores, Remus estaba con Lily y Eris con los chicos de Slytherin, cuando Remus estaba con los merodeadores, Sirius estaba con Eris, Severus ni se acercaba y Lily hablaba con ellos pero no con la misma intimidad que antes.

-Nada va a ser igual, ¿lo sabes no? - le preguntó su hermana.

James asintió, sabiendo de primera mano que una relación en la que la confianza había desaparecido y el odio había entrado no podía reconstruirse de la misma manera, ellos mismos lo habían vivido.

-Se necesitan, Remus y Sirius se entendían a la perfección, creo que se han contado cosas que ni Sirius se ha atrevido a contarme a mi - comentó exaltado James - Habla con Remus, Eris por favor, eres la única a la que escucharía, fuiste la única a la que no se le echó encima el día de después.

-Intentaré hablar con él, pero no hago milagros James.

James abrazó a su hermana contento y emocionado, era la única persona que podía persuadir a Remus Lupin, sabía que su hermana era demasiado ingeniosa y convincente a la hora de hablar y de verdad esperaba poder reunir de nuevo a sus amigos.

-Gracias por cuidar de Sirius - añadió también - Se os nota muy unidos, Sirius nunca lo mencionaba antes.

Eris asintió incómoda, no sabía si debía decirselo, puede que fuera lo mejor, que no se lo tomara mal, pero si no era así no quería que ellos dos también se pelearan, suficiente con Remus y Sirius.

-Además yo creo que le gustas, ignora a todas las chicas, desde hace ya bastante tiempo, aunque antes siempre nos decía que había quedado con una y con otra, pero nunca nadie de Hogwarts lo comentaba - parloteaba sin parar James - A ti también se te ve muy feliz con él.

- Por que lo soy - afirmó con una pequeña sonrisa.

-NO - chilló James - NO NO NO - repitió mirando a su hermana.

Eris lo miraba extrañada, es cierto que James era muy enérgico y le daban esos brotes pero todavía no se llegaba a acostumbrar.

-Tú estas enamorada, Eris Potter - le dijo con una sonrisa de lado - Me acuerdo de esa pequeña sonrisa, la ponías siempre cuando íbamos a casa de los amigos de papá y repetías una y otra vez que su hijo era el amor de tu vida y que te ibas a casar con él.

Eris recordaba a aquel niño, tenía bastante más años que ella pero siempre jugaba con ella y le contaba cosas divertidas de Hogwarts, le encantaba ir a su casa porque estaba él, obviamente el chico nunca se iba a fijar en ella, ya que tenía diez años más, pero en su momento a ella le daba igual. Pero aún así, Eris negó con la cabeza.

-Tenéis que hablarlo, haríais una pareja preciosa, los dos os gustais, además de que sé que eres el mayor apoyo de Sirius, os vais a casar, ya puedo imaginarme a mis sobrinos, les pega ser Blacks - empezó a fantasear James

-Sirius y yo llevamos juntos desde Noviembre, James - aclaró riendo Eris

Al ver lo emocionado que se había puesto con la situación todo el miedo se le pasó, claro que su hermano iba a reaccionar bien, el solo miraba por la felicidad de las personas, y no le desaba la felicidad a nadie tanto como a su hermana y a su mejor amigo.

-¿Qué? - dijo confundido - Pero.. Incluso ... Aunque ... - James era incapaz de terminar una frase por la cantidad de preguntas que estaban formándose en su cabeza.

Eris soltó una carcajada al verlo tan confundido y pasó el resto de la tarde contándole algunas cosas, ambos hermanos dejaron atrás la luz del sol entre risas y anécdotas, que dejaban a James Potter alucinado de lo ciego que había sido durante meses, fue un día increíble ya que ambos parecieron unirse más después de aquello.

-Así que todas la veces que yo he alejado a Sirius no han servido para nada - bromeó James

Encontraron a Sirius en el Gran Comedor, comiendo con Regulus, cuando James se acercó enfadado a reclamarle que estaba saliendo con su hermana, a Sirius se le quitó el poco color que tenía en la cara, Eris se sentó junto a Regulus para ver la escena divertida, sabía que James estaba actuando, sino a ella también se le hubiera quitado el color.

-James, lo siento, te lo debería haber dicho pero sabía que no os llevabaís muy bien y después no quería que esto arruinara vuestra nueva relación, no me pegues por favor- empezó a explicarse rápido Sirius, tapándose la cara con las manos.

James se empezó a reír tras eso y lo abrazó aclarando que estaba de broma y que si no lo hubiera estado ya se hubiera encargado Eris de alejarlo, Regulus se fue, dejando a los hermanos Potter comer junto a Sirius.