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By Atenea.

"Que afortunada soy" pensé, yo había sido la que entró primero a la habitación de George, el realmente estaba dotado, en realidad debería darme asco por que es uno de ellos, pero siento que el es diferente, carajo, debo dejar de pensar en eso...

- Vamos Emma. - Le dije a Emma.

Una vez en la sala escuchamos unos pasos provenientes de las escaleras, Emma y yo nos miramos mutuamente, asustadas y sorprendidas.

- ¿Qué hacen ustedes dos aquí? - Tom nos vio con una ceja alzada.

- Amm... venimos por un vaso con agua... - Respondió Emma, si que era estúpida.

- Claro, explícame entonces ¿Donde está el vaso? - Tom se estaba acercando y eso me puso los pelos de punta.

- Acabamos de bajar por el... - Contesté temerosa.

- No soy idiota Atenea, ¿Qué carajos hacen aquí? - Tom me tomo de las mejillas apretandolas. Yo sólo hice una mueca de dolor.

- ahh. - escuchamos un gemido proveniente de el cuarto de George.

- Supongo que no vinieron a ver a George ¿Cierto? - Me tomo más fuerte.

- N-no - Tartamudee.

- Te recuerdo que eres mía Atenea, mia... - Tom me soltó y bajo las escaleras al primer piso.

- ¡Emma! - Grito Bill desde su cuarto.

- Joder... - Susurre.

- Ya sabes que hacer. - la tome suavemente por los hombros.

Emma asintió y se alejó de mi lentamente.

- No Bill... por favor no. - suplico Emma desde su habitación.

- Sigues aquí abajo muñeca. - Bajo Tom nuevamente.

- Lo siento... -

- Vamos arriba. - Me tomo por la cintura y me jalo hasta las escaleras.

By Emma.

- No Bill... por favor no. - Le suplique a Bill.

- shhh... - Me tomo por la cintura y comenzó a besar mi cuello.

Era momento de empezar con el plan.

- ¡Sueltame! - Empuje a Bill lejos, esto lo cabreo demasiado.

- Estúpida. - Me tomo por el pelo tirando de el hacia atrás.

Una lágrima salió de uno de mis ojos, Bill tenía bastante fuerza, al principio piensas que es una persona amable y cariñosa, pero cuando convive diario con ella te das cuenta que es un mounstro igual que Tom, alguien rencoroso y sin sentimientos.

Reaccione y trate de soltarme de su agarre pero como antes mencioné el tenía bastante fuerza.

- Sueltame... - tome su brazo para tratar de sacarmelo de encima pero no lo logre.

- Estas logrando que quiera golpearte, niña estúpida. - Dijo cerca de mis labios.

- Por que no mejor la pasamos bien tu y yo, y nos olvidamos de este momento tan malo. - Volvió a besar mi cuello.

- No... - para esto ya me había soltado el pelo, lo tome por los hombres y lo empuje lejos, haciendo que tropezara con una maleta.

Lo único que se me ocurrió en ese momento fue salir corriendo por la puerta, así que eso hice. Corrí hacia la puerta eh intenté abrirla, pero Bill me tomo por el cuello apretando de este.

Un grave ERRORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora