Capítulo 42

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—Esto no va a salir bien... —Dijiste.

—Claro que si, estamos solos en el estacionamiento.

Sabo, tomó tu mano para besarla en un intento de calmarte. Era de noche, y ustedes estaban en un estacionamiento bastante iluminado gracias a las luces de la calle. Tú cuerpo estaba tenso de nervios, aún si no había nadie, te sentías extraña.

—Respira, estamos contigo, no pasará nada malo. —Ahora fue Ace quien aportó.

—Pero... no quiero dañar tu auto, Sabo.

Tu mano libre estaba básicamente enterrando las uñas en el volante.

—¡Después podemos ir a comer algo, relájate! —Luffy quien también estaba en el asiento trasero junto con Ace, trataba de animarte.

—Gracias Luffy, pero... no sé si pueda pensar en comida ahora mismo.

—(TN), mírame. —Le hiciste caso al rubio, y él les unió en un beso, mientras que acariciaba tu mano y mejilla—. Vamos paso a paso, ¿si?

Asentiste.

—Bien... es que, a penas sé el uso de los cambios, y es gracias a Law...

—¿Él estaba enseñandote?

—Sí... me hacía pasar los cambios mientras él manejaba, así que terminé aprendiendo.

—Al menos tienes ya una buena noción al respecto. Entonces, con mayor razón relájate... es la primera vez que tomaras un auto, así que no debe salirte perfecto.

—Bien... —Soltaste aire de forma pesada varias veces hasta que te sentiste mejor.

—¿Lista?

—S-sí...

—Bueno, enciende el auto entonces.

Le hiciste caso. El auto prendió, y encendiste las luces también. Sabo, comenzó a darte algunas indicaciones, y te recordó que en caso de cualquier cosa, ellos estaban allí y podían ayudarte...

Despues de sacar el neutro en el auto, con ambas manos en el volante, soltaste de a poco el embrague. El auto empezó a moverse lento, y tú debías apretar el acelerador con cuidado. Pero como ya veías venir, el auto pegó un pequeño arranque y luego se detuvo. Te quejaste.

—Tranquila, solo hazlo de nuevo...

—Bien...

Repetiste el proceso. Cambios en neutro, encender auto, primera, y soltar embrague pasando al acelerador.... De nuevo el auto se detuvo. Otra queja pero un poco más fuerte.

—La tercera es la vencida, pequeña... ánimo.

Neutro, encendido, primera, embrague y acelerador... esta vez, el auto si avanzó como debía, lento, pero seguro. Ellos tres sonrieron, ibas con los ojos bien abiertos y las manos tensas, pero los tres te daban palabras de aliento.

—Señaliza y gira a la derecha.

—¿como señalizaba..?

—La palanquita junto al volante.

—Bien...

Hasta aquí, todo iba bastante bien... ibas lentisimo, pero obedeciendo las indicaciones que te daba Sabo. Él te estaba llevando por las divisiones del estacionamiento, así que te hizo avanzar y doblar, avanzar y doblar repetidas veces.

—Acelera un poco, suave...

Le hiciste caso. Tenías que seguir con lo que hasta ahora iban haciendo como ejercicio, pero al doblar de nuevo, el auto se apagó.

Pasado pisado. (Sabo, Ace x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora