Capítulo 17

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Agosto pasó rápido entre clases, trabajos y pruebas. Pero siempre con risas y momentos agradables con los Mugiwaras, Law, y los tres hermanos. Ya estaban a mitad de septiembre.

Con Vivi y Koala, hablabas más que nada por mensajes. Ya que ellas al cursar su ultimo año tambien estaban bastante ocupadas con la escuela, pero habían quedado en ir uno de estos días a comer algo las tres o junto a las demás chicas.

—¡Oye (TN), (TN)! —Llamó Ace—. ¡Acompañame después de almuerzo!

—¿Dónde?

—A comprar una moto, ¡ya tengo el dinero!

Era sábado, y como siempre, estabas en casa de los tres hermanos. Todos estaban en la cocina aunque por razones diferentes.

—¿Eh..? ¿Por qué yo?

—Porque quiero tu opinión sobre cual me hace lucir mejor.

Lo mirabas de reojo divertida mientras terminabas con la comida para el almuerzo.

—¿Luffy no puede?

—Mo, Sago gijo gue hngo gue ogdenag mi gaigscion...

—No hables con la boca llena...

—¡¡Oye Lu, deja de comerte las cosas del almuerzo!! —Reprochó Sabo.

Luffy tomó más de la comida, se la metió toda en la boca y se fue entre risas. Sabo lo miraba con reproche, pero terminó suspirando rendido.

—No puede, tiene que ordenar su habitación de una vez.

—¿Y tú Sabo?

—Tengo trabajos que revisar.

—¿Qué? ¿no quieres ir? —Preguntó Ace.

—No es eso, sólo pensaba que ellos podían ser de más ayuda.

Ace te abrazó por la espalda con una sonrisa, Sabo los miraba de reojo.

—No lo pienses tanto, sólo ven conmigo y pasamos un buen rato juntos, ¿si? —Sonrió removiendote suave.

—Está bien... Iré contigo.

—¡Así me gusta! —Depositó un sonoro beso en tu mejilla abrazándote con fuerza.

—Mimoso... —Susurraste.

—Me adoras preciosa. —Fanfarroneó generándo una risa de tu parte.

Comenzaste a reír más fuerte cuando Ace empezó a dar continuos besos en tu mejilla mientras presionaba tus costados generandote cosquillas.

—¡Ace! ¡Estoy terminando de cocinar con Sabo! —El pelinegro finalizó devolviéndote el gesto de hace un tiempo atrás... Pasó su lengua por tu cuello.

Sabo tenía un pequeño tic en su hombro.

—Oigan parcito... Sigo aqui...

Ace y tú sonrieron, tú tratabas de limpiar la saliva del pecoso.

—Lo sentimos. —Contestaron al mismo tiempo.

—Si, si... Ace, mejor ayudanos colocando las cosas en la mesa. —No conseguía nada poniendo malas caras, así que sólo controlaba en lo posible ese pequeño malestar en su pecho.

Ace le hizo caso manteniendo su sonrisa, fue por diferentes cosas que llevó al comedor.

—¿Qué? ¿Celoso rubio? —Sabo se sobresaltó—. Si claro, solo bromeaba...

Pero al voltear a verlo, este tenía un leve tinte en sus mejillas. Era evidente que trataba de no mirarte y solo se "centraba" en la ensalada frente a el.

Pasado pisado. (Sabo, Ace x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora