El día siguiente, fue extraño el hecho de que ninguno de aquellos dos individuos asistiera a clases. JungKook era un alumno que se caracterizaba por no faltar a menos que fueran sus días de calor. Aunque para este momento los profesores ya estuvieran informados de la razón de su falta, lo extraño era que el omega TaeHyung tampoco estuviera presente, ellos jamás coincidían.
Mientras tanto, JungKook se encontraba tumbado en su cama, una de sus tantas oleadas lo había dejado exahusto y frustrado por lo que ni siquiera tenía ganas de poner un pie fuera de cama. Su lobo estaba extrañamente insoportable, gruñendo y dando vueltas en círculos en su interior, JungKook no lo entendía, desde su presentación nunca había notado a su lobo tan inquieto como ahora, además que le estaba haciéndo más difícil sobrellevar su celo.
Cuando decidió moverse un poco, cubriendo su sudoroso y obeso cuerpo, su madre toco la puerta de su habitación en un corto llamado.
- ¿Hijo?JungKook, ¿puedo entrar? - su madre pregunto.
- ¿Q-Qué necesita? - preguntó de manera dificultosa.
- Traigo algo de comida y supresores - aclaró la mujer.
- Déjelos afuera, en un momento salgo por ellos - pidió el joven que respiraba con dificultad sobre la cama.
- Bien... - la mujer calló por un momento para después volver a hablar. - Por cierto, TaeTae llamó para saber como te encontrabas, se escuchaba extraño, parece que tampoco fue a la escuela - contó su madre y JungKook sintió un tirón en su parte baja y un agudo dolor en su cabeza luego de oír el nombre de TaeHyung.El alfa gimió doloroso.
- Mm, creó que mejor me voy, ah, deje comida en el horno por si te da hambre más tarde, ya sabes donde estaré por si necesitas algo solo llámame. Cuídate pequeño - se despidió la mujer antes de alejarse y finalmente salir de casa, su hijo necesitaba privacidad durante esos tres días que duraba su celo.
Cuando su madre se fue, JungKook destapó su cuerpo cuando una siguiente oleada comenzó a atacarlo, su miembro se puso erecto y lágrimas de frustración se resbalaron por sobre sus mejillas, estaba cansado, su cuerpo dolía y su grasa corporal no le permitía hacer mucho, aún así su lobo le exigía hacer algo para autocomplacerse.
Su piel blanquecina se tornaba roja en las partes donde más rosaba o se calentaba, sus mejillas, pecho y cuello se mostraban rojos ante tal calor que se abalanzó sobre él, gimió cuando sus dedos tocaron su miembro, sus manos se envolvieron sobre éste y comenzó a masajearse, sus ojos se tornaron de un color distinto a su profundo azabache, entonces gimió cuando su lobo trajo a su mente la imagen de cierto omega.
- Ah~ - logró emititir, era un sonido sexy, pero no para quien lo llegase a ver, la imagen corrompia cualquiera fantasía, no era atractivo.
Cuando logró una siguiente liberación, giró sobre su pecho quedando con la cara sobre la almohada, almohada que traía puesta la ropa que había usado el día anterior, el aroma de TaeHyung era apenas perceptible pero para su lobo era suficiente para sentirse acompañado. Sus ojos se tornaban repentinamente con la aparición de su lobo, esto sucedía en lapsos de tiempo, algo que tampoco había pasado antes.
Omega, omega, omega, omega, omega.
Comenzó a llamar su lobo cuando cuando el dolor se hizo insoportable, esto definitivamente nunca había sucedido, JungKook no era tan valiente como para pasar su celo imaginando a un omega y si era sincero nunca había visto a alguien con morbo y el hecho de que su lobo no parará de llamar a alguien, le era frustrate y lo molestaba.
Cuando se corrió una segunda vez, suspiró más que cansado, quería un descanso pero sabía que su maldito animal no lo dejaría.
Repentinamente su móvil sonó y por mucho que no quería responder, su lobo lo incitó a hacerlo, aún en su estado indispuesto, sin mirar el remitente, respondió.
ESTÁS LEYENDO
Mi tierno alfa
FanfictionTaeHyung es un omega perfecto ante todos, sin embargo, el ser amigo y estar secretamente enamorado, del peor alfa de la universidad, opaca de manera drástica toda oportunidad que los demás buscan para acercarse a él. ¿Pero que tiene su amigo? Bueno...