CAPÍTULO 21

2.5K 266 11
                                        

- ¿J-joven Kim? - la repentina voz de alguien que al parecer no había notado, se hizo oír y la sangre de Tae se calentó sobre sus mejillas en cuanto giró el rostro y se encontró con su sorprendido profesor.

Sin embargo, lo que en ese momento era vergüenza de ser descubierto, se hizo un frío intenso que recorrió cada célula de su organismo cuando el repentino golpe de la banca contra el suelo se escuchó, giró el rostro encontrándose con JungKook de pie, con los ojos completamente abiertos y lagrimosos.
La sangre de su cuerpo se dreno de golpe y espero lo peor cuando vio los labios que hace nada había probado, temblar.

Tae rogaba que fuera un sueño en cuanto la primera lágrima se escurrió de los ojos de JungKook, sin embargo, el golpe de emociones volvió a cambiar cuando vio como los ojos del alfa se blanqueaban y cuando menos lo espero, el pesado cuerpo de JungKook se fue hacía el suelo cayendo de espaldas.

- ¡JungKook! - gritó acercándose de forma veloz al igual que el profesor que había presenciado todo.
- Dios, ustedes dos son todo un caso - susurró el joven maestro cuando ya estuvo a un lado revisando el estado del alfa. - Kim, vaya por alcohol y algodón a la enfermería. Yo me quedaré aquí  con él - indicó el pequeño hombre pero Tae no reaccionaba, concentrado solo en el alfa y lo que acababa de pasar.

Dios, Tae se sentía un idiota, un impaciente idiota que no podía aguardar a que el plan avanzará para poder besar al chico, no, él quería al alfa ya, pero ahora que iba hacer si-

- ¡Joven Kim! - giró el rostro con los ojos muy abiertos y miró a su profesor. - Vaya a hacer lo que le pedí, cierre la puerta antes de que se vaya - volvió a ordenar el profesor pero ante la duda pintada en el rostro de su alumno, gruñó bajito. - Vaya a la enfermería y consigame alcohol y algodón. Pero rápido Kim - entonces Tae reaccionó levantándose a prisa del suelo y corriendo fuera en busca de lo pedido.

Antes de alejarse por completo miró una vez más a su alfa y negó cuando las lágrimas se acumularon sobre sus ojos.
Rogaba a Dios que nada pasará y que aunque le doliera, esperaba que JungKook no recordará el besó.

Mientras tanto, el pequeño profesor revisaba el golpe que su alumno se había propinado ante la dura caída.
Suspiró viendo el rostro relajado de su alumno, esos dos definitivamente necesitarían más ayuda de lo que pensó. Luego de ver la reacción en el rostro del alfa ante aquel besó, fue una clara muestra de lo difícil que sería hacer que esos dos de algún modo terminarán juntos.

Cuando Kim regresó con lo pedido, él se encargó de colocar alcohol sobre el algodón y pasarlo insistentemente por enfrente de la nariz del alfa.

Luego de un rato sin respuestas y creyendo que lo mejor era darle tiempo, miró al omega que sobre sus piernas había colocado la cabeza del alfa, estaba sollozando mientras acariciaba la frente del alfa.

- Joven Kim, llorando no cambiará nada, realmente no se lo que pasa con ustedes pero no debes agobiarte hasta ese punto, solo se desmayo, no es nada grave - habló al fin el profesor.
- U-usted no entiende - logró explicar. - Él y yo no somos más que amigos - hipó. - Besarlo fue un error.

El pequeño hombre lo miró con ternura, se reflejaba a él mismo hace unos años cuando conoció a su esposo, creyó que jamás lo volvería a ver, que incluso aquel alfa no era para él, pero ahí estaba, casado con ese mismo hombre años después.

- ¿Y eso que tiene que ver? Es tu amigo pero a ti te gusta - expresó. - Solo debes decirle y ya.
- No es tan fácil. Kookie no me aceptaría - sollozo.
- ¿Porqué? Eres lindo, más lindo que yo cuando tenía tu edad - sonrió cuando el menor lo miró con una pequeña sonrisa que enseguida se le borró.
- Precisamente por eso - expresó con nostalgia. - Porque cree que yo soy demasiado lindo para él, piensa que no merece estar con alguien como yo y no necesita decir lo que sus ojos gritan. No tengo oportunidad con él - suspiró. - Además de que soy impaciente, no quiero esperar más, llevó enamorado de él prácticamente desde que lo conozco.
- Si llevas tanto tiempo y eres impaciente, deberías ser más directo, incluso atrevido, los hombre caen ante cualquiera que les hable bonito o de manera atrevida y coqueta - el hombre elevó las cejas de manera pícara, más el menor negó.
- JungKook no es así - sonrió mirando al alfa. - Él es diferente - ahí iba, a hablar del amor de su vida, SeokJin sonrió. - Se que tiene mucho que ver su complejo de inferioridad - expreso triste. - Pero fuera de eso, es alguien respetuoso, amable y cariñoso, lo he conocido por más de un año como para decir que sería alguien que se desamayaria ante una sonrisa o un guiño coqueto, le averguenzan ese tipo de cosas porque no tiene experiencia en esos campos - contó mientras miraba la expresión "pacífica" del alfa. - Pesé a que muchas personas lo han tratado mal, se que jamás dudaría en ayudar a alguien por más que esta persona lo haya lastimado. Kookie es tan pacífico que aunque tiene la suficiente fuerza para defenderse, prefiere que lo lastimen, esta mal, pero si él piensa que no lo notó, se equivoca, se que siempre se contiene además de que sus miedos lo atacan antes de que el pueda reaccionar para defenderse - Tae acarició la frente del alfa que por un microsegundo que no percibió, esta se frunció. - Se que JungKookie es fuerte, yo creó que si quiere cambiar entonces lo hará, es alguien dedicado y determinado, también es competitivo y eso me gusta, JungKook es perfecto, solo debe cambiar su perspectiva de él mismo, mirarse con unos ojos diferentes cada que se encuentre frente al espejo, se que si lo hace, se que si se propone mirarse como yo lo veo, su físico dejará de importarle. Se que ese es un tema difícil de tratar para él pero creó en que tarde o temprano cambiará, yo se que mi JungKookie puede - sonrió y besó la nariz del alfa, aún sin darse cuenta del calor que se instalaba sobre las grandes mejillas de su amado.

Mi tierno alfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora