All My Love [3ra Parte Semicolon] - Omegaverse

Capítulo 32

Seungcheol se reunió con Mingyu en un laboratorio particular, uno especial en antidoping que les pudiera ayudar a saber si Mingyu fue puesto bajo celo por alguna droga. Mingyu seguía negándose en aceptar que Wonwoo pudo haberlo hecho con alguna mala intención y Seungcheol estaba convencido de que así era.

Después de los análisis, había tenido una discusión con Mingyu por el mismo motivo: Wonwoo. Nunca había visto a su mejor amigo aferrado con una situación hasta que eso colmó su paciencia. Juraría que golpearía a Mingyu si no recapacitaba, no podía perder lo que más amaba por una aventura que lo dejaría mal parado.

No quería ver a Mingyu sufrir, por eso, todo lo que le afectaba a su alrededor, también le afectaba a él.

Seungcheol se encontraba en casa por la tarde de ese domingo. Veía la televisión junto a Yeonjun, pues el cachorro había optado por ver algunas caricaturas y opacar toda la televisión para sí mismo. Usualmente, Seungcheol estaría dispuesto a jugar con él, pero ignoró el hecho de que su hijo estuviera jugando frente a la televisión.

—¿Por qué te encuentras así? —Jeonghab llegó de la cocina, trayendo consigo un poco de fruta picada. La dejó sobre la mesa central y de inmediato, su cachorro fue a tomarla—. Últimamente te encuentras muy pensativo.

—Es por Mingyu —confesó. Seungcheol se dejó caer al respaldo para mirar al techo, mientras Jeonghan se sentaba a su lado—. Sus problemas me están volviendo loco.

—¿No crees que deberías dejar que él solucione sus problemas? —Seungcheol miró a Jeonghan, estaba muy cerca de él—. Él ya es el presidente de la empresa, está casado y se supone que planea tener una familia.

—Lo sé, pero ¿sabes? —Jeonghan lo miró curioso—. Mingyu es mi mejor amigo y él siempre lidió con mis problemas aunque yo no quise que lo hiciera, siento que es mi turno hacer algo por él —Jeonghan lo miró enternecido, se acercó a él para dejar un beso en su mejilla.

—Eres un gran amigo.

Antes de que Seungcheol pudiera pronunciar alguna otra palabra, recibió un mensaje de texto. Sacó su celular para verificar los datos y al parecer era Mingyu quién le había enviado una imagen. Se apresuró a abrirla encontrando una captura de pantalla con los resultados de los análisis. Lo leyó con cautela hasta que encontró lo que sospechaba.

—Lo sabía —soltó con un poco de molestia. No dudó en responder el mensaje.

—¿Pasó algo? —Jeonghan lo miró preocupado.

—Mingyu fue drogado —respondió Seungcheol con una mezcla de frustración y enfado—. Y creo saber quién es el responsable…

—¿Estás hablando en serio? —Seungcheol asintió—. ¿Quién lo hizo?

Su celular timbró en ese momento, obligando a ignorar la pregunta de Jeonghan. Era Mingyu quién le hablaba, así que no dudó en responderle de inmediato.

—Necesitamos ver en la oficina —declaró Mingyu. Seungcheol podía escuchar que se encontraba apurado—. Necesito comprobarlo con mis propios ojos.

—¿Realmente eres ciego? —Seungcheol se levantó para buscar su abrigo—. Tienes la respuesta frente a tus ojos y todavía te niegas a creerlo.

—¡Por supuesto que lo hago! Él no haría algo así… —escuchó la voz de Mingyu como un susurro. Seungcheol rodó los ojos.

—¡¿Por qué no?! ¡Dime la razón por la que no-! —y Mingyu terminó la llamada—. ¡Mierda! —exclamó.

—¿Ocurrió algo?

—El imbécil de Mingyu se niega a creer la verdad. Tengo que ir a la oficina, luego nos vemos —se acercó a Jeonghan para dejar un beso en su frente.