Miré a todos lados con una sonrisa antes de voltear a ver a Ikkaku a un lado. Asentimos a la par y saltamos del barco hasta tocar la madera del muelle. Me estiré soltando un gran suspiro de alivio, ya que luego de insistirle sin descanso al capitán entre todos, ¡por fin tenemos un día libre!
-¡Genial! Este lugar es hermoso -mencioné viendo todo lo que esta isla tenía para ofrecer.
-Y los habitantes... -Ikkaku y yo observamos a los que paseaban con normalidad.
Asentimos a la vez sin poder despegar la mirada de los que trabajaban en poca ropa por el calor que hacía en la isla. Entonces una mano cubre mis ojos y me jala hasta atrás.
-¡O..Oye!
-¿Qué se supone que estás mirando? -Law me reclama con molestia.
-La comida, ¿no ves? -apunté a todos los puestos de comida que habían allí-. Está bien, está bien. De todas formas no necesito mirar a nadie más, no te preocupes, capitán.
Law rodó los ojos mientras que yo sonreía ampliamente, daba gracia cuando se ponía celoso. De todas formas seguimos avanzando, algunos fueron por su lado mientras que Law y yo éramos seguidos por Bepo, Shachi y Penguin.
-¡Huh! -me detuve en seco al observar el grandioso centro comercial-. Lo... encontré.
-Vice, no se emocione tanto... -piden los demás nerviosos al ver mis claras intenciones de gastar todos mis tesoros.
-Sí... ya casi no hay lugar en el barco para tantas... ¡ya se fue!
Ignoré a los demás y me adentré enseguida al centro comercial para calmar mi adicción a las compras. En menos de dos horas ya tenía a los tres chicos cargando con cosas, ya que ellos insistieron en ayudarme, y yo con ambos brazos llenos de otras bolsas.
-¡Buah! Sí que hace calor aquí -mencioné bebiendo de mi batido helado- ¿Hm? ¿Y Law? ¿Dónde se metió?
-El capitán vio una tienda de medicinas y lo perdimos allí -comenta Penguin-. Vice... No es por decirle nada, pero... bueno...
-Está bien -respondí antes de que terminara-. Volvamos al barco.
-¿Eh? ¡¿En serio?!
-Sí -levanté los lentes de sol nuevos y sonreí-. Dejaremos esto y volveremos a por más. Gracias por ayudarme chicos, no me imagino lo que pasaría conmigo si tuviera que cargar con todo esto yo sola.
Los tres parecían querer caer desmayados. Me reí suavemente comenzando a caminar de regreso hasta encontrar dicha tienda con el capitán viendo un libro de medicina. Sonreí y me acerqué a él, pero apenas di dos pasos cuando vi a una mujer acercarse a él. ¿Por qué todos en esta isla se ven tan bien? ¡Esa mujer es hermosa!
-¡Vice! No se altere... -escuché a Penguin.
-¿Alterarse? ¿Quién está alterada? -murmuré pero sabía bien que si lo decían es por algo. Y creo que es por las flechas de sangre en mi espalda apuntándo a esa mujer.
-¡Vice! ¡Seguramente le está pidiendo consejos, eso es todo! -Bepo salta hacia mí.
-¡S..Sí! Seguro que es eso. Nuestro capitán se ve muy confiable cuando tiene un libro de medicina en manos -dice Shachi.
-Sí... Seguramente es eso -suspiré calmando mis ánimos y apartando la mirada-. Lo siento, no sé qué me pasó.
Volví a mirar hacia Law pero repentinamente el vaso en mi mano explota cuando lo apreté de golpe al ver a esa mujer aprovechando sus atributos para llamar la atención de Law.
-¡La mataré...! -murmuré con la voz áspera y sintiendo la sangre hirviendo en mi interior.
-¡Vicecapitana, cálmese!
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CORAZÓN ROBADO || Trafalgar Law y tú ||
FanfictionEn su búsqueda por alguien que pueda curar la enfermedad del "plomo blanco" de Trafalgar Law, Corazón recurre a una pequeña niña que ayudó hace pocos años, pues ella tiene la habilidad de la "Chi Chi no Mi" o Fruta del Diablo de la sangre. El único...