CORAZÓN ROBADO || Trafalgar Law y tú ||

Capítulo 57

Desde aquí adentro podía escuchar toda la conmoción que estaba sucediendo allá afuera además de la gran tormenta en la que estábamos que hacia mover el barco. Me acomodé el abrigo sobre mis hombros y abrí la puerta finalmente.

-De verdad que esos tres no pueden verse sin terminar peleándo entre ellos.

-¡_________-dono! -Kin'emon me ve con sorpresa y alegría a la vez mientras yo sonreía de lado y observaba los barcos de los Piratas Bestia frente a nosotros.

-Qué gran tormenta -comenté sin referirme a la verdadera tormenta; miré hacia la costa en donde Kanjuro sujetaba a Momonosuke-. ¿Quién lo diría? Allí está la mutación traicionera que corrompió el equilibrio del grupo.

-¡Oigan! ¡¿Cómo atacan ese bote de los samuráis?! -se queja Luffy a los piratas de Kaido.

-No son expertos del mar, no hagan locuras -les reprende Law a Kin y los demás.

-¡Deberían mantenerse al margen! -menciona Kid.

-¡El mar es donde luchan los piratas! -sentencia Luffy.

Ambos barcos, el de Kid y Luffy estaban a los lados del nuestro, que era el que tenía a los samuráis a bordo. Pude ver a todos los chicos saludando luego de que Usopp y Zoro atacaran a uno de los barcos que los apuntaban, haciendo que Kin'emon se sintiera mejor por la ayuda que estaban recibiendo.

-¡No pierdan la esperanza! Tenemos posibilidades de ganar mientras haya gente que luche con nosotros -afirma Kin.

-Siempre tan escandalosos -menciona Law pero aún así sonríe.

Todos se veían tan despreocupados que ni siquiera les dieron importancia a que intentaran explotar y quemar el Sunny, ya que este estaba hecho con la mejor madera así que el único problema que habían tenido fue el que hayan quemado las velas.

-Cometí un error.

Kin'emon se arrodilla y baja la cabeza para disculparse porque se haya filtrado el plan, culpándose por ello y sin saber dónde estaban las otras tres mil quinientas personas aliadas. De todos modos, ya no había nada más que hacer, solo nos quedaba seguir como estamos. Los enemigos estaban tan entusiasmados por creer que hundiendo nuestros barcos se habría acabado, pero espero que no se crean que será tan fácil hacerlo.

Ellos lanzan balas de cañón hacia los samuráis en nuestro barco. Kin quería detenerlas pero dudó de poder hacerlo. Bepo, Pengui y Shachi saltan en su lugar, decididos a ayudar.

-¡Gracias, tripulación de Law-dono!

-¡Ya no retrasaremos a nadie! -afirma Penguin.

-Sí, no queremos volver a experimentar eso -le sigue Shachi.

-Es verdad. Esta vez protegeremos a nuestro capitán -sentencia Bepo decidido.

Sonreí conmovida y miré a Law unos segundos antes de volver a prestar atención al frente para ver a los Minks atacar a los Piratas Bestia.

-Aún hay algo más que no les dijimos -comenta una mujer mariposa, miembro de los Piratas Bestia.

-Lo siento. No queríamos hundirlos más en la desesperación. El banquete de hoy no es uno más del Festival del Fuego... Es un banquete para celebrar la alianza entre los Piratas Bestia y los terribles Piratas Big Mom.

-¿Se aliaron dos Emperadores? -ninguno de nosotros podía creerlo.

-Esto debe ser una broma -hablé entre dientes.

Los Piratas Bestia se burlan de todos nosotros y nos apuntan con sus cañones para destrozar los barcos de una vez.

-¡No sean tan arrogantes! ¡No nos subestimen! -responde Luffy a sus burlas- ¡Todo el mundo atrás!