Capítulo 31

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—¡Así que eres un Dragón Celestial, Doflamingo! —escuché a Law antes de que Fujitora lo presionara más contra el suelo.

—Lo correcto sería decir que lo era, pero ya no. ¿Qué es el linaje? ¿Qué es el destino? No creo que haya muchos que hayan tenido una vida con tantos fracasos como la mía.

Mientras ellos hablaban yo concentraba cada célula, cada glóbulo sanguíneo de mi cuerpo para que dejara de escaparse de mí y regresara, me curaba. Requería de mucha vitalidad y energía, pero debía mantenerme con vida, no podía dejar solo a Law con esos monstruos, menos con él.

—¿Qué pasa, Fujitora?

—No, es que... escuché un trueno en la dirección del mar.

¿Un trueno? ¿Podrá ser? Law dijo que consiguió llamarla. Sí, no hay duda. ¡Es Nami!

—¡Oye! ¡Joker! —Caesar aparece— ¡Si lo tienes, dámelo de una vez! ¡Mi corazón! ¡Mi corazón! ¡Oye! ¡Rápido!

Empecé a reír levemente llamando la atención de Doflamingo. No pude levantarme pero pude mirar hacia Law.

—T..Te dije... que era buena idea tener un corazón falso, L..Law.

Él sonríe estando de acuerdo mientras que Caesar parecía enfadado, ya que el corazón que Doflamingo tiene en la mano no es el suyo. Lo comprobó al estrujarlo y notar que Caesar no sintiera nada. Solo se escucha el grito de dolor de un marino aleatorio.

—¡¿Uno de los marinos?! ¡¿Entonces dónde está el mío?!

"¡Room!" —escuché— ¡Fujitora, sigue sujetándome con gravedad o me escaparé! ... "¡Shambles!".

Law desaparece junto a sus cosas intercambiándose con una piedra que se destruyó por la gravedad de Fujitora. Lo vi agarrar a Caesar. Sonreí de nuevo antes de aparecer sobre el hombro de Law.

—L..Lo siento, Law... —murmuré con dificultad—. No pude conseguir conectar con su sangre.

—Me diste el tiempo suficiente y tuviste una buena idea... Lo demás no importa. Doflamingo no es fácil de derrotar, y lo sabes —esquivaba todo el tiempo los ataques de Doflamingo mientras corría apresurado—. Ahora me toca a mí hacer más.

Se intercambia más rápido para esquivar. Conseguimos llegar hasta la playa, pero nos detuvimos de golpe cuando escuchamos a los chicos en el Sunny gritando por ser atacados por peces peleadores.

—¡Espera, Doflamingo! ¡No tienen nada que ver con esto!

—¡Se acabó, Law!

Vimos a Doflamingo ir hacia los chicos espantando a los peces, estaba por atacarlos hasta que vimos a Sanji volando hacia Doflamingo con la pierna en llamas.

—Sanji... —murmuré aliviada pero aún preocupada.

Sanji golpea repetidas veces a Doflamingo pero este no parece afectado y entonces el cocinero se detiene de golpe gracias a la habilidad de Doflamingo quien hace aparecer un látigo de fuego con el que intenta golpear a Sanji.

Repentinamente, Law nos intercambia con Doflamingo al que se le desvió su ataque.

—Lo siento, cometí un error. Vamos al barco.

Law nos hace aparecer a los cuatro en el barco, cayendo sobre Caesar y dejando a Sanji sin cuidado.

—¡Torao-san!

—¡No puede ser...! ¡¿_______?!

Law me sujeta en brazos al levantarse de Caesar, y me deja sentada en el suelo con una delicadeza impropia de él. Recostada contra la pared, Law se agacha hasta hincarse en una rodilla y permanecer a mi altura, examinando todo el daño que Doflamingo me ha provocado.

CORAZÓN ROBADO || Trafalgar Law y tú ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora