Palabras

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Las palabras siempre están ahí, resonando continuamente sin más orden ni sentido que los antojos de mi musa caprichosa. A veces son frases sueltas, otras veces pedazos de capítulos, ideas inconexas y escenas que en algún momento me gustaría poder escribir. Las recreo aun cuando me he prometido ordenar las historias de mi mente y escribirlas con orden y sentido. Pero es imposible controlar ese torrente caótico al que no me importa zambullirme mientras aguardo a que las horas pasen o se terminen los días de exámenes.

Pero las palabras son caprichosas: al final, cuando por fin logro sentarme delante del documento en blanco, ya no sé lo que quería decir.

Escritos sin sentidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora