Hetalia Pandora's Box

2.0

El sonido de las notas de un piano me despertó, conocía bien la tonada. "Everytime you kissed me", la canción de Pandora's Heart... En mi iP8d aparecía el texto: Levántate ya, o no podrás ganarle la Nutella a Luis.
Suspiré cansada no había dormido bien debido a que mis sueños fueron terriblemente extraños.
•Tú eres la nueva Pandora.•
•La caja debe de guardar a los males del mundo.•
•Necesitas ser fuerte.•
Estaba segura que todos esos comentarios habían sido dichos por un chico, pero, no tenía ninguna certeza. Me descobije, prendí la luz de mi cuarto con la ayuda del swich que tenía casi al lado de mi cama a unos tres pasos para ser casi exacta. Me quite mi pijama de panquesitos arcoiris, para cambiarla por un short pegado que ocultaba debajo de la falda escolar y una blusa de la Academia World. Acomodé mis calcetas hasta las rodillas y abroche mis zapatos escolares. Ahora el cabello, al mirarme en el espejo, casi me desmayo al ver que parecía medusa, después de mojarlo ligeramente y tratar de peinarlo, me puse un poco de crema para cabello así sería más fácil manejarlo, cuando mi (rebelde) cabello ya quedo estable, tome mis lentes que estaban al lado de la pecera de mi pez beta, me los puse, antes de salir de mi cuarto alimente al pez. Me apresure a caminar a la cocina. Después de un buen sándwich con Nutella (casi todo el relleno del bote en el sándwich x3) y un vaso de leche, Luis apareció en la cocina pidiéndome que le hiciera algo de desayuno.
-Quieres que te haga un sándwich de Nutella y un vaso de leche o prefieres un huevo con tocino y un jugo de naranja???-Le pregunte, mamá por lo general nos hacia el desayuno, pero, ayer me pidió que yo me encargara debido a que se iría antes al trabajo. Todos en la familia sabíamos que dejar a Luis cocinar sólo ocasionaría que terminara creando alguna mutación zombie. Luis se apresuró a decir que quería la primera opción así que me puse manos a la obra. 6:30 am y ya íbamos saliendo de la casa rumbo al colegio. Otra vez discutiendo sobre un tema sin importancia.
-Te digo que tu cabello es negro.-Comento Luis, negué con la cabeza y le mostré un mechón de mi cabello castaño chocolate oscuro que sujete entre mis dedos.
-Es castaño oscuro!!!-Reclame. Luis es menor que yo, aún si me gana de estatura. Por lo cual se aprovecho de eso, se paró al frente de mi y puso una mano en mi cabeza.
-Será castaño cuando dejes de ser una enana.-Comento divertido para después entrar al auto. Hijo de su madre.... Ese mocoso era un igualado, ya quería que Esteban regresará, así Luis dejaría de hacerme bullying para centrarse en fastidiar a nuestro hermano mayor. Entré en el auto situandome en el asiento del conductor, encendí el auto y me puse en marcha. Me detuve a dos cuadras enfrente de una casa pintada de blanco y café oscuro, el jardín estaba muy bien cuidado y la cerca tenía un letrero que decía:
Cuidado con la Coco.
En seguida salió corriendo de la casa una chica de cabello y ojos color miel, un poco chaparrita, su piel blanca mostraba una ligera coloración rosa, seguramente por haber corrido. El rosa de sus mejillas hacia juego con sus lentes del mismo tono, al igual que yo, usaba el uniforme de la Academia, pero, Regina traía un suéter rosa extra.
-Buenos días, Nita-Senpai!!!-Exclamo al entrar en el auto, ocupado el asiento de copiloto.
-Buenos días Regi.-Salude con una sonrisa en mis labios.
-Vámonos, abrocha tu cinturón.-Le ordene, Regí obedeció sin rechistar, comencé a conducir con cuidado hasta llegar a la Academia, estacione el auto, Luis bajo primero pues vio a sus amigos en la entrada, en cambio Regi y yo bajamos después pues no teníamos prisa por entrar ya que faltaban por lo menos 15 minutos para que comenzarán las clases. Después de tomar los libros del casillero, metiéndolos a la mochila, me despedí de mi amiga para ir al aula respectiva de mi grado y grupo. Regí era dos semestres menor que yo, lo que equivalía a un año, por esa razón íbamos en distintos salones. Estaba por entrar al salón cuando sentí que alguien se abalanzo sobre mi a modo de abrazo.
-Hola Nita!!!-Saludo alegremente una chica de cabellos marrones que no olvidaría fácilmente en mi vida. Vanessa me soltó con una sonrisa en sus labios.
-Holiwis Vane, hoy también nos sentamos juntas???-Pregunte abriendo la puerta del salón.
-Claro.-Aseguro mi morena amiga, hoy traía el pelo en una coleta, gracias a eso, su largó cabello le llegaba un poco más arriba de las rodillas. Todavía no sabía como rayos le hacía para lavar aquella cabellera. Entramos y nos sentamos en nuestros lugares, donde nos quedamos platicando un rato hasta que Sweet hizo aparición.