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Desperté en mi cama, todavía estaba oscuro, así que deberían de ser las 5 y tanto de la mañana. La fiesta había terminado por hay de las 3:40 de la madrugada. No me moleste en levantarme de mi cama, pues estaba muy cómoda entre las cobijas y el cuerpo de Arthur... Sonreí como boba, estaba abrazada a él, su camisa estaba levemente desabotonada, dejándome ver parte de su pecho. Acomode un mechón de mi copete que me molestaba para admirarlo dormir. Tenía los labios levemente abiertos, respiraba tranquilo. Estaba levemente avergonzada por entender como habían terminado las cosas, después de que nos besamos, platicamos de varios temas... Hasta que me quede dormida, seguramente él me había cargado y me había acomodado en mi cama... Pero, eso no explicaba porque Arthur estaba ahí. Deje de darle vueltas y enterré con suavidad, además de precaución mi cara en su pecho. Su loción me atraía a sobremanera... Dude varios segundos, pero, al final... Pose suavemente mis labios en su clavícula para darle un pequeño beso.
-... Cuidado Nita... Ese lugar es peligroso...-Murmuro Arthur bajando una de sus manos a mis caderas. Cuando hizo tal acción no pude evitar sonrojarme de más, además ahora estaba más que nada, súper apenada pues me había descubierto haciendo algo no muy santo que digamos...
-... Perdona, te desperté???-Pregunte murmurando en voz baja. Arthur abrió los ojos, se veía levemente sonrojado.
-Ya estaba despierto hace unos minutos... No te preocupes.-Me dijo para acomodar sus manos poco a poco a mi cintura.
-... Arthur, por qué te quedaste a dormir conmigo???...-Pregunte tímidamente.
-... No es que me haya quedado porque te veías tan indefensa mientras dormías, sólo... Yo...-Logre notar como se ponía rojo hasta las orejas, desvió la mirada a alguna parte de mi habitación, pero, al final, término dándome un beso pequeño en los labios.
-... Porque no quería irme de tu lado...-Murmuro en voz muy baja. Mi corazón latió fuertemente en regocijo al escuchar aquello, seguramente mis mejillas estaban coloradas, más, no me importo.
-... No tuviste problemas con mis padres???...-Pregunte alarmada recordando que ellos ya deberían de estar en casa.
-No pueden verme por ahora, no mientras yo no decida si deben notar mi presencia o no, entraron por ahí de las 4 para ver si ha estabas dormida... Creo que a tu padre no le agrado verte dormir con mi saco encima...-Dijo mientras miraba su saco en mi cuerpo. Me reí levemente al imaginar la cara de mi progenitor. El saco destacaba sobre mi vestido.
-... Nita...-Murmuro abrazandome más contra él.
-... Qué pasa???...-Pregunte levemente tímida ante la repentina acción del inglés.
-... Me dan ganas de verte sólo usando mi camisa...-Dijo a mi oído, tarde varios segundos en procesar sus palabras... Mi cara ardió para cuando entendí a que se refería.
-... Eres un pervertido...-Murmure tratando de cubrir mi cara por la vergüenza, más Arthur no me lo permitió, pues tomo mi rostro entre sus manos y me beso lentamente. Al separarse pude notar que Arthur me miraba levemente nervioso.
-... Tengo algo que pedirte... Pero, por el momento no es el lugar o la hora adecuada... Debemos dormir un poco más...-Dijo para cubrirme levemente con la cobija.
-Empiezo a pensar que corro peligro si me quedo dormida...-Comente mirando acusatoriamente al cejón.
-... No hoy, Nita... No hoy...-Repitió para cerrar levemente los ojos, acomodando su rostro entre mi cuello y mi hombro.
-...-No fui capaz de decir nada más, pues comencé a caer en los brazos de "Morfeo", sólo que este Morfeo era cejón, rubio y británico... Ah, y ahora demostró que también podía ser un pervertido... Sonreí levemente antes de volver a quedarme completamente dormida.
Desperté ya por ahí de las 9:45 tal vez, revise mi iP8d que quedaba cerca de mi cama. Eran las 10:00 de la mañana, Arthur todavía dormía un poco, con todo el cuidado del universo, me levanté de la cama. Camine a mi closet sacando unos jeans negros, una playera blanca que tenía la bandera de Inglaterra en forma de corazón, unos converse negros, calcetines de distinto color, uno azul y uno rojo. Mi ropa interior, la cual consistía en unos bóxers para mujer y un brassiere deportivo, ambos de color negro, muy cómodos para mis actividades de a diario. Estaba por salir de mi habitación cuando Arthur se sentó en la cama.
-... Buenos días... Lady Ruiz...-Saludo mirándome con una sonrisa pequeña en los labios.
-... Buenos días, gentleman Kirkland...-Conteste para salir a de mi habitación en dirección al baño...

Hetalia Pandora's BoxDonde viven las historias. Descúbrelo ahora