En Corea del sur existían muchos grupos criminales, bandas pequeñas, bandas grandes, mafias que eran temidas.
Una de ellas era liderada por Nochu quien se escondía detrás de la faceta de "Jeon Jungkook " un empresario exitoso pero también temido...
Habían pasado dos semanas y Taehyung so había cambiado como le dijo a Jungkook esa noche
-Llegué - Habló Jeon entrando a la casa.
-Hola amor - Taehyung llegó a recibirlo - ¿Cómo te fue hoy? ¿Estás cansado?
-Me fuí bien mi vida - Le dió un beso - Solo vengo a buscar ropa, tengo un viaje de negocio.
-Musculitos prometiste no dejarme solo porque los niños aún están pequeños - Negó - Dijiste que después de el año.
-Lo sé amor pero de verdad es urgente - quito su cobarta - No te enojes por favor.
-Está bien amor -Sonrió - Ven a cenar primero y yo empaco tu ropa.
-No es necesario cielo - Negó - Yo lo hago.
-Musculitos por favor - Le hizó un puchero.
-Está bien amor - Asintió - Dame un beso que te voy a extrañar
-Yo mucho más - Se unieron en un beso.
Jungkook fue a cenar junto a su familia, porqué los gemelos bebían biberón mientras veían a sus papitos comer y reír juntos.
Ahora Jungkook estaba jugando con ellos en su cama mientras que su esposo estaba acomodando la ropa.
-¿Por cuantos días te vas?
-Por Dos solamente, es algo de urgencia - Movía la manita de su hija.
-Está bien amor - Asintió - Te voy a empecar dos juegos de trajes, uno negro y uno azul no quiero que digan como la otra vez que tu esposo no te lava la ropa y por eso usa el mismo de color negro.
-Amor eso fue una broma - Empezó a reír
-De igual manera ya llevas esos dos - Los metió a una maleta - Llevas polos blancos, gris y negros, juntos a pantalones, zapatos y zapatillas... ¿Qué se me olvida?
-Dame un beso - Frunció sus labios.
-Ya me acorde - Chasqueo sus dedos - Las corbatas y las camisas.
Taehyung empezó a caminar hasta el armario para sacar más ropa.
-Su papi es unico - Jungkook rio bajito - Lo amo tanto.
Jungkook veía a su esposo de un lado a otro alistandole ropa sabiendo que somo iba por dos días, practicamente ya había hecho maleta y media.
-Listo - Sonrió orgulloso - Está todo acomodado, en su lugar.
-Por favor no salgas tarde en la madrugada de la habitación - Le dió un beso - La cuna de los gemelos la pasaran para esta habitación, confío en ti y tu manera de defensa, protegerlos.
-Me estás asustando- Se alejo un poco - ¿Qué pasa?
-No pasa nada amor - Sonrió - es la primera vez que los dejo solos y me da algo de miedo.
-Tranquilo, ve con cuidado - Ne dió un beso - Sabes que no me tiembla la mano para pegarle un tiro a alguien.
-Sí, eso lo sé a la perfección - Suspiro pesado - Estaré pendiente al teléfono, aunque ando algo casando.
-Entoces no vaya - Le acarició el rostro - Quédate con nosotros.
-Quiero mi amor, eso quiero - Asintió - Pero es importante esto, la seguridad esta doblada no tienes de que preocuparte.
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