Capítulo 18

5.3K 646 221
                                    



Quizá debió anticipar todos los movimientos posibles para que nada se le saliera de las manos, pero desde que JiMin comenzó a tener sentimientos reales por JungKook, su guardia se bajó completamente y sólo comenzó a fluir.

Sintió emoción cuando vio que la camioneta del Alfa estaba estacionada en el patio principal de la casa, pero en cuanto bajó de la suya y vio la forma en que los empleados lo miraban, tuvo un muy mal presentimiento.

Estaba inseguro de entrar, pero al final tuvo que hacerlo, de otro modo no podría solucionar la situación. En el salón estaban Jennie y TaeHyung hablando con expresiones bastante preocupadas, lo cual hizo que tanto él como su lobo se pusieran alerta.

—¿Dónde está JungKook? —preguntó temeroso.

—Arriba— respondió TaeHyung con un tono despectivo e intimidante.

Caminó hacia las escaleras bajo la mirada gélida y acusadora de Jennie sintiendo cómo su corazón se agitaba. Después de subir unos cuantos peldaños pudo percibir el aroma amargo del Alfa y se detuvo un momento para darse el valor que necesitaba. La incertidumbre le hizo reaccionar y corrió hacia donde su nariz y su corazón le indicaban. Pero su cuerpo se congeló al darse cuenta que JungKook estaba en la que le otorgó como su habitación cuando llegó a la casa. Y entonces no tuvo que detenerse a pensarlo más a profundidad, porque era más que obvio que lo sabía todo.

¿Jennie? ¿TaeHyung? ¿Quién lo delató?

No tendría caso que buscara culpables porque eso no iba a solucionar absolutamente nada. Sólo esperaba que le diera una oportunidad para que lo escuche e intentara convencer de que ya no iba a hacer nada en contra suya porque realmente se enamoró.

El tiempo se detuvo.

Podía escuchar los latidos de su corazón desbocado y el constante aullar de su lobo debido al inconmensurable miedo que sentían. Sus pasos fueron lentos y cautelosos hasta que por fin llegó al marco de la puerta que estaba completamente abierta. El aroma fue intenso y el temor a ser exiliado de ese lugar incrementó hasta su máximo punto. Sus pies temblaron. Sus ojos se llenaron de lágrimas. Mientras que su voz salió tenue y temblorosa.

—K-Kook.

Le llamó.

El aludido estaba sentado en el borde de la cama con los papeles acusatorios en una mano y con la otra se frotaba la nuca como si eso fuera a servirle de consuelo. Cuando escuchó la voz de aquel Omega que hoy mismo se había encargado de desgarrar su corazón sus instintos se activaron, siendo imposible no levantar la vista con unos ojos llenos de dolor mezclado con un intenso resquemor.

JiMin tembló aún más en su lugar e inconscientemente se sostuvo del picaporte de la puerta como si eso fuera a detener todo lo que se venía.

—Kook, por favor. No pierdas la calma— le dijo mientras se acercaba a él.

—Ni se te ocurra acercarte a mí— habló con voz oscura y llena de recelo— Quiero toda la verdad. No más mentiras y quiero que me expliques el porqué de todo. Debe haber una puta razón para que hayas orquestado todo este maldito teatro.

Esta era la primera vez que el Alfa le hablaba de ese modo y que lo miraba con mucho rencor. En ese momento no era para nada aquel dulce y amable ser que siempre lo consintió y le brindó todo su amor. No era el mismo que le dijo "te amo" hacia una semana atrás cuando se hicieron la promesa de estar juntos en su regreso. JiMin esperaba que eso pesara más que toda esta maldita mentira.

—Trabajo para un Alfa estafador. Yo me convertí en uno de ellos— confesó sin más con la mirada clavada en el suelo— Fui enviado aquí con el propósito de robar gran parte de tu fortuna y luego desaparecer cuando eso sucediera...— hizo una pausa para respirar un poco y luego continuó— Tenía que enamorarte para hacer que me firmaras esos papeles, así no tendrías como demandarme o meterme a la cárcel... pero... yo... yo no pude hacerlo porque...

Call It What You Want (Omegaverse Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora