Era un día como todos los demás. La alarma de movimiento le aviso a JiMin que su cachorro ya estaba despierto. Revisó por las cámaras que había instalado y comprobó que sí, efectivamente, el hermoso MinGyu estaba pataleando y comenzaba a llorar. Lo más probable es que tenía hambre y debía ir pronto antes de que pegara el grito en los cielos.
JungKook está dormido y no quiere despertarlo para que lo ayude. Últimamente ha estado ansioso y un poco caliente. El hecho de que el cachorro tenga una habitación aparte es benéfico para ellos, porque pueden hacer el amor todas las noches y algunas mañanas al despertar. Y realmente quiere su ración de sexo matutina, así que se apresura para ir hacia donde se encuentra su bebé. Éste, en cuanto percibió su aroma, comenzó a llorar, porque así era de caprichoso y manipulador. Sabe que esas características las heredó de él. ¿Para qué negarlo? Si hasta físicamente es una mini versión suya y se siente muy orgulloso de ello.
—Mi amor, no llores— le habló dulcemente mientras lo sostenía en sus brazos— Papá ya está aquí y va a darte de comer.
Caminó hacia el silloncito que está cerca de la ventana y se acomodó listo para amamantar a su cachorro. Descubrió uno de sus pechos que enseguida fue reclamado por el pequeño glotón. JiMin sonrió al verlo contento tomando su primera comida del día esperando que más tarde pueda darle sus papillas. Porque ahora ya es un bebé de casi siete meses y debe iniciar con una buena alimentación que lo mantenga saludable. Tanto JiMin como JungKook se preocupan por eso y por todo lo demás.
Pasó casi alrededor de media hora amamantando a su cachorro hasta que éste por fin logró conciliar el sueño para tomar otra pequeña siesta. Después de eso aprovechó para dejarlo en su cuna y volver a su habitación para tomar una ducha. Descubrió que JungKook aún estaba inusualmente dormido. Por lo regular a estas horas del día ya estaba despierto ayudando con el desayuno, practicando box o seduciendo a su Omega para hacer el amor. Pero ahora parecía un tronco ahí tirado sobre la cama disfrutando de un sueño que parecía no tener fin.
Tomó su ducha con tranquilidad mientras tarareaba una canción. Se arregló como de costumbre y revisó que su bebé aún estuviera dormido. La cosa es que el segundo bebé seguía durmiendo muy plácidamente. Se acercó a él para revisar que todo estaba correcto y se topó con que su temperatura corporal era elevada. Rápidamente buscó un paño húmedo y lo colocó en su frente, pero cuando iba en busca de un termómetro, percibió el agradable aroma de MiYeon que provenía del salón de la casa. Bajó rápidamente para encontrase con ella sonriendo tan agraciada y bonita como siempre, pero su sonrisa se desvaneció en cuanto lo tuvo cerca.
—Apestas a mi hijo— dijo y se tapó la nariz.
—Es normal— la miró extrañado— Pero algo pasa con él. Tiene mucha temperatura. Voy a llamar al médico para que venga a revisarlo— expresó con preocupación.
MiYeon lo vio con ternura y después soltó una carcajada bastante sonora. Era evidente que el Omega no era ningún experto en estos temas. Sus bonitos ojos grises lo delataban y lo hacían ver muy adorable.
—Ay, mi hermoso cachorro— le sonrió manteniendo una distancia prudente debido a su aroma fuerte— Dime algo, ¿JungKook ha estado hambriento de sexo en estos últimos días?
JiMim se ruborizó y bajó la vista debido a que hablar de eso con su madre suegra le hacía sentir tímido. Pero era algo normal considerando que MiYeon no tenía ningún tipo de tabú.
—Sí— respondió con un hilito de voz— Lo primero que hace cuando llega del trabajo, si es que no estoy con MinGyu, me lleva directo a la habitación y no me deja salir hasta que...— suspiró nervioso— hasta que me anuda una o dos veces.
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Call It What You Want (Omegaverse Kookmin)
FanficJiMin es un omega que trabaja para un alfa que se dedica a estafar alfas millonarios. Su siguiente objetivo era seducir y estafar al gran Alfa y CEO Jeon JungKook, dueño del Grupo Jeon. Al inicio todo parece ser muy sencillo, porque aparentemente e...