Capítulo 34

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Cuando un lazo de destinados se forma ya no hay nada que pueda romperlo.

No se sabe cómo es que la madre luna trabaja para unir a dos destinados en la vida, pero lo que se sabe es que es completamente coherente a la hora de elegir.

JiMin y JungKook sentían que combinaban a la perfección pese a que sus aromas no tenían nada que ver el uno con el otro. Eran polos opuestos, pero eran esos mismos que se atraen con mucha intensidad y que cuando intentan separarlos siguen atrayéndose con fuerza.

Estos días en Los Ángeles pasaron demasiado rápido para el gusto de ambos. Una semana la consumieron en un abrir y cerrar de ojos, por esa razón, JungKook decidió tomar una más, pero después de eso sería imposible no volver a sus responsabilidades en Corea del Sur. Aunque este tiempo lo había aprovechado al máximo pasando momentos con JiMin, yendo de un lado a otro y acompañándolo en su vida cotidiana, sobre todo en los ensayos de sus presentaciones en el teatro. Descubrió que tenía muchos seguidores en este lugar debido a la popularidad que adquirió gracias a su talento y se sintió orgulloso de ver que ciertas marcas prestigiosas querían firmar con él para hacer campañas de publicidad, además de los videos musicales en los que saldrá como bailarín. Eran muchas cosas las que sucedían en su vida y no se sentía con el derecho de arrebatarle todo lo bueno que estaba viviendo.

Claro que sería difícil tener que separarse de él, pero al menos tenía la certeza de que estaba creciendo y que terminaba por afinar detalles que pudiese haber en su interior. Así que por ahora decidieron no hablar sobre que en una semana definitivamente tendrían que separarse para intentar sostener una relación a larga distancia. Optaron por disfrutar, por darse mucho amor y tener muchas citas cada vez que podían.

JungKook disfrutaba principalmente de poder verlo en sus presentaciones en el teatro que eran tres veces en la semana. Tenía el privilegio de deleitarse en primera fila y sobre todo se sentía especial por ser su Alfa que estaba ahí con él en esos momentos importantes. JiMin lo presentó como tal ante su grupo de baile y equipo de trabajo. Y por supuesto que hubo corazones rotos al ver que ese Omega rubio con mechitas rosas y de ojos grises ya tenía un compañero de vida. Ambos de la mano lucían perfectos, sobre todo por la forma en que sus ojos se encuentran, el brillo es evidente. Imposible no verlo.

Ahora JiMin ejecutaba su parte solista de la presentación mientras que el público observaba en silencio y completamente maravillado por la forma tan hermosa y única de bailar que tiene. JungKook es quien más concentrado está e incluso derrama lágrimas porque su orgullo es incontenible. Es un verdadero placer correr hacia los camerinos para abrazarlo y felicitarlo por ese esfuerzo que hace cada vez que está en el escenario dándolo todo para quienes lo miran.

"Nuestro Omega es perfecto" le dijo su lobo muy feliz.

"Lo es. Y ahora estamos con él"

Esas ataduras del pasado se estaban desvaneciendo día con día. Aunque sabían que como pareja aún les faltaba un largo camino por recorrer y tal vez complicaciones por enfrentar, pero están seguros de que nada se comparará con lo que ya vivieron hacía un año atrás cuando perdieron a su cachorro. A quienes habían agredido a JiMin directamente seguían fugitivos, pero dos días atrás JungKook recibió la llamada de que los habían capturado y que pronto les darían una sentencia severa. Al ser el CEO que mayormente contribuía a la economía coreana le daban ciertos beneficios. Es por eso que le dieron seguimiento a su caso sólo porque querían complacerlo. Pero las personas que más daño le hicieron a su Omega ya estaban tras las rejas, así que su camino estaba libre de piedras y espinas. Ahora podía correr descalzo si es lo que deseaba, pero pensaba que estaba hecho para volar.

Call It What You Want (Omegaverse Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora