Capítulo 22

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Había sido un día lleno de inquietudes y de muchas interrogantes sin resolver. JungKook se sentía extraño desde hacía un rato, pero todo se debía a que la información que su detective privado le dio era algo que no se hubiera esperado.

Ahora su perspectiva estaba cambiando drásticamente y los chillidos de su lobo le están afectando más de lo que quería aceptar. Además, siente que fue demasiado invasivo de su parte el haber investigado sobre la vida privada de JiMin. Ahora podía entender perfectamente por qué se cerró a hablarlo aquel día en que tocaron ese tema.

No podía evitar sentir culpa y una gran incertidumbre por saber cuál era su situación actual. Estaba completamente de acuerdo con el hecho de que haya tenido una vida difícil no es justificación para sus actos cometidos actualmente. Estafó y engañó a quién sabe cuántos Alfas y es seguro que debe pagar por eso, aunque ahora no se siente seguro de todo lo que le gritó en la mañana. Realmente no sabía qué pensar. Se sentía muy confundido pero a la vez inquieto. Ni siquiera se había ido de su oficina porque ha estado bastante distraído durante todo el día.

La noche había caído y él intentaba realizar su trabajo pendiente, pero no lograba concentrarse. Su lobo seguía insistiendo con que buscara al Omega, pero seguía creyendo que no debía hacer eso.

Se sintió un poco frustrado y decidió darse un pequeño respiro. No acostumbraba a beber pero a veces lo hacía cuando sentía que no podía más. Dio un buen trago de whisky que retuvo por unos cuantos segundos en su boca y después saboreó la esencia que ahí se quedó. Estaba muy dispuesto a beber otro trago cuando en sus oídos resonó un grito desgarrador e intenso, uno que hizo que el vaso cayera al suelo y que su corazón latiera desesperado.

"¿Escuchaste?" preguntó su lobo.

"Sí"

"JungKook... es nuestro Omega... está en peligro"

"Pero, ¿cómo es posible que lo hayamos escuchado? No entiendo"

"¿Y todavía quieres discutirlo? Cuando te digo que es nuestro Omega es porque la madre la luna escogió para nosotros. Es nuestro destinado"

JungKook no tuvo que detenerse a pensarlo. Su lobo tenía razón. JiMin era su Omega destinado y por esa razón escuchó su grito sin importar a qué distancia se encuentra.

Y ahora entendía todo. De verdad estaba en peligro, por eso se ha sentido así durante todo el día, pero ahora la culpa lo consume mientras bajaba por el elevador hasta donde se encuentra su auto. Y en cuanto estuvo ahí arrancó a toda velocidad sin tener la delicadeza de ponerse el cinturón de seguridad.

Sus ojos comenzaron a llorar mientras sentía una fuerte opresión en su pecho. No sabía exactamente en dónde buscar, pero después recordó la información que el detective le pasó; fue primero al que le habían dicho era el departamento donde estaba viviendo. Tocó muchas veces pero nadie le atendió y ahora sus opciones se reducían a una sola.

Condujo nuevamente a toda velocidad tratando de mirar todos los rincones que podía para ver si lo encontraba por ahí caminando. Pero su desespero incrementaba debido a que no aparecía y sentía, por alguna razón, que tenía el tiempo contado.

"Si algo le pasa, JungKook..."

"¿Y crees que no siento que me estoy muriendo por dentro? Tú tenías razón, ahora déjame, porque necesito concentrarme"

Las quejas constantes de su lobo hacían que se pusiera más tenso, incluso apretaba el volante haciendo que sus nudillos se pusieran blancos. Ahora había dejado todo lo malo de lado y decidió creer en él... en todo lo que le dijo cuándo suplicaba por su perdón.

Call It What You Want (Omegaverse Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora